El pastel es de Live Nation
En 2010, el negocio de la m¨²sica est¨¢ b¨¢sicamente en los conciertos. En Espa?a, la parte del le¨®n se la lleva la filial del coloso mundial
La oficina de Live Nation en Madrid es un bajo en la zona noble de la ciudad que rodea El Retiro. Si no fuera porque en las paredes cuelgan carteles de conciertos, pasar¨ªa por una empresa de seguros. Pero es la sede de "la mayor compa?¨ªa de eventos en directo del mundo", pata local de una multinacional que en 2009 organiz¨® 22.000 conciertos en 28 pa¨ªses y vendi¨® 140 millones de entradas. Un gigante que cotiza en la Bolsa de Nueva York y que naci¨® en 2005 como escisi¨®n de Clear Channel Comunications, primer grupo radiof¨®nico de EE UU.
En cinco a?os, Live Nation Entertainment ha alcanzado proporciones colosales. No solo es promotora de conciertos y due?a de m¨¢s de 170 salas en todo el mundo, adem¨¢s se fusion¨® en 2009 con Ticketmaster, la mayor vendedora online de entradas del planeta, tiene acuerdos de esponsorizaci¨®n con 850 marcas y representa a nivel mundial a la ¨¦lite musical. Madonna, Jay Z o Lady Gaga son artistas que trabajan en exclusiva con Live Nation. O U2, que firm¨® con ellos un acuerdo por 12 a?os para llevar sus merchandising, su web y, sobre todo, sus giras. La de Vertigo, de 2005 a 2007, tuvo m¨¢s de 300 millones de euros de beneficios. Paul McGuinness, el m¨¢nager de los irlandeses explicaba a Billboard el motivo del acuerdo. "Es obvio que la mayor parte del negocio de U2 es el directo. Incluso para bandas como esta que es una gran vendedora de discos".
La estrategia de expansi¨®n internacional pasa por adquirir las grandes promotoras de cada naci¨®n. En Europa tiene filiales en 16 pa¨ªses, desde Turqu¨ªa hasta Espa?a. Ha sido una revoluci¨®n. Un ejemplo: compr¨® Mean Fiddler, la promotora brit¨¢nica que llevaba entre otros el festival de Glastonbury. El efecto domin¨®, y los 38 millones de libras que su ex due?o, Vince Power, se agenci¨® con la operaci¨®n llevaron a que hoy el FIB est¨¦ en manos brit¨¢nicas.
En Espa?a adquiri¨® Gamerco en 2006. Una empresa paraguas que agrupaba a otras cinco m¨¢s peque?as dirigida por un triunvirato. Est¨¢ el fundador, Gay Mercader, 61 a?os, un personaje capital para entender el desarrollo de la m¨²sica en directo en Espa?a, que vive en una mas¨ªa en Girona desde hace 20 y lleva sus asuntos por tel¨¦fono. "Me gusta el tel¨¦fono, a m¨ª me aporta proximidad", dice desde su coche volviendo del acupuntor. "La venta ha ido como esperaba. Fui muy reacio a vender mi empresa durante mucho tiempo. Pero me di cuenta de que dif¨ªcilmente pod¨ªamos crecer m¨¢s. O me hac¨ªa parte de la mayor empresa del mundo o un d¨ªa... Y el balance es ¨®ptimo. Las pocas cosas que se nos escapaban ?Madonna, U2...? las hemos recuperado. Es obvio que Live Nation se va a expandir exponencialmente en los pr¨®ximos a?os".
En su caso, esa expansi¨®n pasa por el concurso para llevar el Palu Sant Jordi y las instalaciones del Anillo Ol¨ªmpico barcelon¨¦s en exclusiva y por entrar en el mundo de los festivales. Ya lo hicieron con Rock in Rio, y ahora apuntan a que en 2011 habr¨¢ casi con total seguridad dos festivales en Madrid. Uno peque?o y alternativo y otro con grandes nombres, aunque a¨²n no detallan ni fechas, ni cartel, ni ubicaci¨®n.
La empresa abri¨® hace meses la oficina de Madrid. En Barcelona sigue la central y all¨ª reside Paco Mart¨ªnez, el hombre en la sombra, director general y cerebro econ¨®mico de la venta a Live Nation. Pero las otras dos cabezas visibles, el italiano Pino Sagliocco ?que en 2009 celebr¨® su 50 cumplea?os con una superfiesta en Ibiza de la que dieron cuenta las revistas del coraz¨®n? y el barcelon¨¦s Roberto Grima ?m¨¢s cercano a los 40 y que fue guitarrista del m¨ªtico grupo mod Los Negativos? se han mudado a la capital. "Yo empec¨¦ en 1979, Roberto en 1985 y Gay en 1973", dice el italiano. "Primero fuimos competencia, 25 a?os de dura competencia. Lleg¨® un d¨ªa en que nos dimos cuenta de que luchar por separado era bastante dif¨ªcil".
"Tal y como estaba el mercado, la oferta de Live Nation nos daba la opci¨®n de traer a Espa?a a grupos que de otra manera ser¨ªa m¨¢s dif¨ªcil y mucho m¨¢s costoso. Hay mucha fantas¨ªa con lo del monstruo de Live Nation", defiende Grima. "Nosotros seguimos haciendo lo mismo. Hemos respetado a los hist¨®ricos siempre que ha sido razonable. Seguimos teniendo la misma relaci¨®n con los grupos. Somos las mismas personas".
Porque el tama?o de Live Nation despierta recelos entre la competencia. No se dice en voz alta, por no irritar al primo de Zumosol, pero promotores consultados aseguran que se hace dif¨ªcil competir. "Live Nation, a corto o medio plazo, podr¨¢ dar oportunidades a los peque?os que tienen buenas ideas, pero no cobertura financiera y de producci¨®n. Eso lo podemos aportar nosotros. No pretendemos hacerlo todo. S¨ª ser un m¨²sculo que pueda reforzar a todos. Ser un pulm¨®n: no agobiar y menos a¨²n asfixiar", asegura Sagliocco. "Hemos tenido la suerte de que en un a?o de crisis hemos vivido uno de los mejores a?os de nuestra historia. A la gente ah¨ª fuera le interesa lo que hacemos".
Aunque para muchos los precios de las entradas pueden matar a la gallina de los huevos de oro, Grima asegura que la pol¨ªtica de Live Nation es mantenerlos ajustados. "Hay grupos que escuchan y son prudentes. Otros que no. Arcade Fire a 34 euros: no es tirado, pero es baratito y llenan el Palacio de Deportes de Madrid. Kings of Leon, no, porque las ponen a 46. De todos modos, muchas veces el precio no lo pone el promotor. Somos los m¨¢s grandes, pero no los ¨²nicos. Y los artistas escuchan al mejor postor. Al final ellos deciden".
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