Muere en Pakist¨¢n una joven electrocutada por su familia
Los padres desaprobaban su relaci¨®n con un vecino
El cad¨¢ver de Saima Bibi, una joven pakistan¨ª, presentaba signos de tortura y quemaduras en el cuello, la espalda y las manos, muy probablemente, por electrocuci¨®n y por agua caliente. Fue su propia familia quien la asesin¨® por el "pecado" de enamorarse de un hombre que ellos no aprobaban, seg¨²n un comunicado policial difundido ayer.
La decisi¨®n fue del consejo del pueblo de Mouza Hakra, en el distrito de Bahawalpur, en el centro de Pakist¨¢n. La sentenciaron a muerte por "avergonzar" a su familia. Bibi se enamor¨® de un vecino que su parentela no aprobaba, as¨ª que los dos escaparon a Karachi, el centro financiero paquistan¨ª. Pero Bibi volvi¨® a su casa poco despu¨¦s; hab¨ªa hablado con sus padres y le hab¨ªan prometido que podr¨ªa casarse con el hombre del que estaba enamorada, seg¨²n inform¨® a Reuters Zahoor Rabbani, el responsable de la polic¨ªa de la zona. "Sus t¨ªos y otras personas influyentes la mataron cuando se neg¨® a casarse de acuerdo a su voluntad", asegur¨® Rabbani. El asesinato ocurri¨® presumiblemente el s¨¢bado.
Fue un vecino quien inform¨® a la polic¨ªa de que la familia estaba quemando el cuerpo de la joven (de 17 a?os seg¨²n unas fuentes y de 22 a?os, seg¨²n otras) alegando que "hab¨ªa cometido suicidio bebiendo pesticidas".
El padre de Bibi, Abdul Majeed, y otros cuatro de sus familiares han sido detenidos, seg¨²n la polic¨ªa. Pero, hay pocas posibilidades de que sean castigados: aunque una ley de 2004 protege a las v¨ªctimas, en la inmensa mayor¨ªa de los casos son puestos en libertad, aseguran los activistas.
El caso de Saima Bibi es uno de los que se han llamado "asesinatos por honor", que est¨¢n aumentando alarmantemente en Pakist¨¢n, seg¨²n los activistas de derechos humanos y en favor de la mujer. Es una antigua costumbre que si a un hombre no le parece bien alguna pareja o actividad sexual de una de sus familiares, la mate. "Es una cruel tradici¨®n en una sociedad patriarcal en la que las mujeres son tratadas como objetos", cuenta Shahnaz Bukhari, una de las activistas m¨¢s reconocidas en Pakist¨¢n, que dirige la Asociaci¨®n de Mujeres Progresistas.
Hasta 650 mujeres murieron por este tipo de cr¨ªmenes en 2009, seg¨²n el ¨²ltimo informe de la Comisi¨®n de Derechos Humanos de Pakist¨¢n. Aunque se considera que la cifra real es mucho mayor, ya que muchas de esas muertes no salen a la luz: las familias o las comunidades logran hacerlas pasar por suicidios. La mayor¨ªa de las veces se trata de mujeres pobres de ¨¢reas rurales. M¨¢s de una quinta parte de los homicidios en Pakist¨¢n podr¨ªan ser "por honor", seg¨²n un estudio publicado en 2009 por el European Journal of Public Health.
Con las constantes crisis pol¨ªticas en Pakist¨¢n en los ¨²ltimos a?os, las cosas han empeorado. "La situaci¨®n es terror¨ªfica, si mataron al gobernador, ?qu¨¦ podemos esperar los defensores de los derechos humanos?", se pregunta Bukhari.
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