La Liga Norte esconde los libros que no le gustan
Una biblioteca p¨²blica del V¨¦neto retira 'Gomorra', de Saviano
La biblioteca municipal de Preganziol -media hora de tren desde Venecia, 15.000 habitantes entregados al cuidado de sus peque?as empresas, sus jardines y a una muy selectiva recogida de basura- no parece la primera l¨ªnea de una guerra. Sin embargo, la en¨¦sima pol¨¦mica entre la derecha que gobierna el pa¨ªs y el mundo de la cultura que intenta contarlo se libr¨® en esta zona de burgues¨ªa laboriosa. En concreto, en su biblioteca p¨²blica: de sus estanter¨ªas desapareci¨® el libro m¨¢s famoso de Roberto Saviano, Gomorra. Una de las empleadas ha denunciado que "desde lo alto" le ordenaron deshacerse del volumen, despu¨¦s de que en televisi¨®n el autor dijera que la mafia busca complicidad con la pol¨ªtica, lo que significa, en estas tierras pl¨¢cidas y ricas, con la Liga Norte.
Se ha animado al "boicot c¨ªvico" contra un grupo de autores de izquierdas
El alcalde Sergio Marton, del mismo partido derechista, ha rechazado la acusaci¨®n de censura. Su secretario provincial Gianantonio Da Re, en cambio, echa le?a al fuego: "Los libros de ese escritor los habr¨¢ comprado la precedente Administraci¨®n de izquierdas. Mejor meterlos en el s¨®tano, a lo mejor alg¨²n ratoncito se los roe".
La que Saviano define como la m¨¢quina del fango (si el poder no est¨¢ de acuerdo con una opini¨®n, la destruye) consume su en¨¦simo acto en estas dos habitaciones repletas de libros, entre la oficina de correos, una escuela y casitas adosadas, en la calle Antonio Gramsci, fundador del Partido Comunista. Justo ah¨ª, el jueves hubo una protesta contra la censura. "Ni el alcalde ni nadie va a decidir lo que yo puedo leer o no", dec¨ªa Mariella Frigo, de 64 a?os, ama de casa. "Soy moderado, tirando a derechas. Pero los pol¨ªticos se han pasado de la raya", se?ala Giuseppe, de 70 a?os, cardi¨®logo jubilado. No se refiere solo a este incidente. Preganziol no es un caso aislado.
Est¨¢ en marcha otra cruzada de la Liga Norte y el Pueblo de la Libertad, aliados en el Ejecutivo de Roma y fuertemente arraigados en el norte (sobre todo en V¨¦neto y Lombard¨ªa). A principios de 2004, un centenar de intelectuales firm¨® un manifiesto sobre el terrorismo rojo y negro que ensangrent¨® los a?os setenta y ochenta. Ped¨ªan, entre otras cosas, el perd¨®n de Cesare Battisti, miembro de un grupo de extrema izquierda, condenado por el Supremo a cadena perpetua por cuatro asesinatos y exiliado en Brasil. A finales de 2010, el presidente Lula se neg¨® a extraditarlo. El Gobierno italiano no obtuvo su victoria diplom¨¢tica, pero empez¨® la caza de brujas.
Los que firmaron quedaron proscritos. Daniel Pennac, Valerio Evangelisti, Massimo Carlotto, Tiziano Scarpa, el colectivo Wu Ming, el mismo Saviano (que luego quit¨® su firma)... Siete a?os m¨¢s tarde se convirtieron en "malos maestros". Raffaele Speranzon, berlusconiano concejal de Cultura de la provincia de Venecia, propuso quitar de las bibliotecas las obras de estos autores (novelas y cuentos). La concejal regional de Educaci¨®n, Elena Donazzan, hace unos d¨ªas amenaz¨® con enviar una carta a todos los directores de escuelas para que sus alumnos no leyesen esos libros. No lo hizo, pero anim¨® al "boicot c¨ªvico". "La semana pasada abr¨ª Libero [diario del hermano de Berlusconi] y vi mi nombre encabezado por el t¨ªtulo: 'Los amigos del asesino", comenta Stefano Tassinari, escritor y dramaturgo. "Mi ¨²nica culpa es tener una opini¨®n distinta a la del poder". "La cuesti¨®n no es solo folcl¨®rica. Describe un pa¨ªs que no sabe aceptar su pasado. Si no compartes su visi¨®n, est¨¢s fuera", comenta un miembro de Wu Ming.

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