La salud forma parte de la soluci¨®n
El nuevo Gobierno de CiU ha generado un alarmismo excesivo sobre las cuentas del Departamento de Salud. Quiz¨¢s el desconocimiento por parte de algunos consejeros o la desconfianza por parte de otros han empujado al sector sanitario a asistir con sorpresa a un espect¨¢culo que no va acorde ni con nuestros tiempos ni con nuestras realidades cotidianas. Parece ser que no hay acuerdo gubernamental respecto a qu¨¦ es esto de la sanidad. Un consejero dice que hay que cortar presupuesto, otro que hay que invertir en sector productivo -?ignoran que los centros sanitarios forman parte de este tejido?-, y el otro parece haber quedado atrapado entre lo posible y lo necesario.
La sanidad constituye un sector econ¨®mico de alto valor a?adido, intensivo en mano de obra altamente cualificada y con una alta capacidad de impacto e influencia sobre otros sectores econ¨®micos. Tambi¨¦n es l¨ªder en investigaci¨®n e innovaci¨®n, siendo tanto o m¨¢s valioso para el relanzamiento econ¨®mico del pa¨ªs que otros sectores considerados estrat¨¦gicos. El consumo en salud por el gobierno de la Generalitat en 2010 fue de 10.438 millones de euros (26% del presupuesto). Un 52% tuvo un impacto directo sobre la econom¨ªa, y un 48 % corresponde a sueldos de los profesionales.
Este impacto sobre la econom¨ªa implica al sector farmac¨¦utico, laboratorios, servicios de diagn¨®stico por imagen y rehabilitaci¨®n, material sanitario y aparatos cl¨ªnicos, transporte sanitario, hoteler¨ªa, comunicaciones y log¨ªstica, entre otros. Hay que preguntarse si para los consejeros estos sectores son productivos y estrat¨¦gicos o no lo son; o depende, o quiz¨¢, o seg¨²n para qu¨¦.
Asistimos desconcertados a un alarmismo sobre un sector que funciona y que ha generado empleo incluso en los peores a?os de la crisis -26.000 profesionales se han incorporado al sistema entre el 2004 y el 2010- y que ha invertido en la construcci¨®n de nuevos centros y la sustituci¨®n o reforma de aquellos que han quedado obsoletos. Los profesionales no pueden pensar que su Gobierno piensa de ellos y su trabajo que son un presupuesto agujerado que hay que enmendar. Si queremos que nuestro sistema p¨²blico no sufra una descapitalizaci¨®n que sirva como excusa para la inversi¨®n en centros privados debemos impedir que se ralentice excesivamente o detenga un plan de inversiones que ya fue revisado en el pasado ejercicio, mantener un ritmo m¨¢s lento en su ejecuci¨®n para evitar que el sistema p¨²blico se resintiera.
La salud es el elemento de la vida m¨¢s apreciado y m¨¢s valorado por la ciudadan¨ªa, las pol¨ªticas p¨²blicas de salud son y tienen que continuar siendo un instrumento de inversi¨®n social y de generaci¨®n de riqueza y ocupaci¨®n. Pero tienen que cohesionar la sociedad y tienen que generar bienestar y, sobretodo, reducir las desigualdades sociales y territoriales -la inversi¨®n privada se concentra siempre en la gran ciudad-. Es indiscutible el valor del impacto econ¨®mico y social que tiene el capital salud de una poblaci¨®n. Recortar las inversiones, paralizar los proyectos, confundir a los profesionales y desconcertar a la poblaci¨®n no es un buen inicio para una legislatura complicada que deber¨ªa buscar las necesarias complicidades para conseguir que uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo no sea cuestionado. Y es por todo ello que la salud no debe ser un problema sino formar parte de la soluci¨®n.
Josep Maria Sabat¨¦ es diputado del PSC en el Parlament y exdirector del Servicio Catal¨¢n de la Salud.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.