El fiscal pide seis a?os para un empresario por tirar sosa c¨¢ustica al r¨ªo Anoia durante 13 a?os
El ministerio p¨²blico arremete contra la Generalitat por tolerar los vertidos
La Fiscal¨ªa de Medio Ambiente pidi¨® ayer seis a?os de c¨¢rcel para el empresario que mont¨® una empresa de fabricaci¨®n de detergente en Gelida (Alt Pened¨¨s) y verti¨® directamente los contaminantes qu¨ªmicos en el cauce fluvial durante 13 a?os. Entre 1995 y 2008, Alejandro Boyer, responsable de la empresa Laboratorios Glower y acusado de delito medioambiental, trat¨® los residuos t¨®xicos como si fueran aguas residuales dom¨¦sticas: los lanz¨® al sistema de alcantarillado p¨²blico que desemboca en el Anoia sin ning¨²n sistema de tratamiento o depuraci¨®n, y sin permiso medioambiental, detall¨® la fiscal en el juicio celebrado en la Audiencia de Barcelona.
El ministerio fiscal censur¨®, adem¨¢s, la actuaci¨®n de la Generalitat por no zanjar el episodio contaminante tras descubrirlo en 1997. Ese a?o el Departamento de Medio Ambiente mult¨® al empresario con 137.800 pesetas -unos 830 euros- por contaminar el r¨ªo; en los a?os siguientes, sin embargo, ning¨²n organismo del Gobierno catal¨¢n investig¨® ni denunci¨® "ni el m¨¢s evidente vertido ni los m¨¢s que evidentes efectos contaminantes" que la empresa sigui¨® causando al Anoia, se lamenta en el escrito de acusaci¨®n.
Medio Ambiente no denunci¨® "el m¨¢s que evidente vertido", lamenta la acusaci¨®n
La Generalitat tampoco se percat¨® de que el imputado hab¨ªa falseado datos para obtener la licencia de actividad y asegurado que la empresa solo originaba aguas residuales sanitarias en el proceso de producci¨®n de jab¨®n, incoherencia que la Administraci¨®n tampoco detect¨®.
El empresario pag¨® la multa administrativa que le impuso el Departamento de Medio Ambiente, pero sigui¨® vertiendo residuos al r¨ªo, entre ellos sosa c¨¢ustica y carbonato s¨®dico, sustancias corrosivas que a lo largo de los a?os causaron "la destrucci¨®n del bosque y la vegetaci¨®n de la ribera" y "graves riesgos" para la fauna acu¨¢tica de la zona, precis¨® la fiscal. En 2006, la Agencia Catalana del Agua requiri¨® a la empresa que suprimiera cualquier tipo de vertido residual que pudiera afectar a las aguas fluviales, pero el laboratorio continu¨® su actividad hasta que en una investigaci¨®n de los Mossos d'Esquadra se hall¨® en el r¨ªo una zona de aguas contaminadas que aparentemente proced¨ªan del laboratorio y remiti¨® un informe a la fiscal¨ªa, que abri¨® diligencias contra el empresario. El agente que descubri¨® el vertido ilegal declar¨® al juez que en el cauce fluvial hab¨ªa unos 100 metros cuadrados de desechos l¨ªquidos de tono blanquecino, altos niveles de sedimentaci¨®n de un producto residual jabonoso y un intenso olor a putrefacci¨®n. Las muestras de ese tramo fluvial arrojaron niveles de contaminaci¨®n que "exceden en mucho los par¨¢metros admisibles", seg¨²n los peritos del Instituto Nacional de Toxicolog¨ªa. La defensa se?al¨® que esa carga contaminante pod¨ªa proceder de aguas residuales dom¨¦sticas, posibilidad que los peritos descartaron porque los niveles eran "demasiado elevados".
El abogado defensor consider¨® exagerada la pena de c¨¢rcel y pidi¨® la libre absoluci¨®n del imputado por entender que no se han realizado suficientes an¨¢lisis en el r¨ªo Anoia que evidenciasen la contaminaci¨®n que los vertidos provocaron en el cauce. La acusaci¨®n, por su parte, insisti¨® en reclamar un castigo ejemplar, dadas las agravantes de clandestinidad, desobediencia y falsedad en las que presuntamente incurri¨® el empresario. Por ello solicita tambi¨¦n que el juez le imponga una multa de 32.400 euros y cuatro a?os y medio de inhabilitaci¨®n para realizar actividades industriales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.