China incrementa el gasto militar
El rearme de Pek¨ªn desata la inquietud entre los pa¨ªses vecinos y EE UU
China est¨¢ dispuesta a contar con un Ej¨¦rcito a la altura de su peso pol¨ªtico y econ¨®mico. El presupuesto militar ha vuelto a experimentar un impulso tras la ligera ralentizaci¨®n sufrida el a?o pasado, lo que redoblar¨¢ las suspicacias de Estados Unidos y algunos pa¨ªses asi¨¢ticos sobre las intenciones de su vecino. El Gobierno anunci¨® ayer que el gasto en defensa alcanzar¨¢ 601.100 millones de yuanes (65.500 millones de euros) en 2011. Seg¨²n ha asegurado, esto supone 67.600 millones de yuanes m¨¢s que en 2010 y un crecimiento del 12,7%, frente al 7,5% de aumento del a?o pasado.
No est¨¢ claro si el 12,7% corresponde al incremento respecto al presupuesto de 2010, que, seg¨²n lo declarado el a?o pasado por estas fechas, fue de 532.110 yuanes, o es sobre lo gastado realmente en dicho ejercicio. El 7,5% de aumento del presupuesto previsto para 2010 estaba calculado respecto a lo gastado en 2009. Si se calculaba sobre el presupuesto que hab¨ªa sido anunciado para 2009, el alza era del 10,7%.
El presupuesto de defensa crece un 12,7%, hasta los 65.500 millones
Se compare con el 7,5% o con el 10,7%, lo que parece claro es que, superada m¨¢s o menos en China la crisis econ¨®mica, Pek¨ªn ha vuelto a dar un empuj¨®n a la partida militar, cuyas cifras oficiales solo reflejan una parte de la realidad, seg¨²n los expertos.
Li Zhaoxing, portavoz de la Asamblea Popular Nacional (APN), intent¨® al presentar los datos, en v¨ªsperas del inicio hoy de la sesi¨®n anual del Parlamento, calmar las inquietudes de quienes ven con preocupaci¨®n el ascenso militar de Pek¨ªn. "El gasto en defensa de China es relativamente bajo para los est¨¢ndares mundiales. El Gobierno chino ha intentado siempre limitarlo y lo ha situado en un nivel razonable, que garantice el equilibrio entre la defensa nacional y el desarrollo econ¨®mico", dijo. Seg¨²n Li, el presupuesto militar para 2011 supone alrededor del 6% del presupuesto total del pa¨ªs.
El exministro de Exteriores afirm¨® que la partida militar es transparente y de naturaleza defensiva, y que el grueso se destinar¨¢ a modernizar "de forma moderada" el armamento, a entrenamiento de la tropa, desarrollo de recursos humanos, infraestructuras y a mejorar los sueldos de sus 2,3 millones de soldados. "No hay nada parecido a gasto militar oculto en China, y el presupuesto est¨¢ sujeto a las auditor¨ªas del Gobierno y de los militares", se?al¨®.
No piensan lo mismo Estados Unidos y los vecinos asi¨¢ticos de Pek¨ªn, que ven con temor el continuado ascenso de las inversiones chinas en la adquisici¨®n y el desarrollo de aviones de combate, buques de guerra, helic¨®pteros o submarinos de ¨²ltima generaci¨®n, y acusan a China de falta de transparencia sobre sus ambiciones militares. Washington y analistas extranjeros afirman que es dif¨ªcil saber qu¨¦ est¨¢ incluido en el presupuesto de defensa chino, y que, en cualquier caso, las cifras reales son dos o tres veces mayores.
Pek¨ªn advierte, por su lado, de que mientras su presupuesto militar supone el 1,4% del PIB, el de Estados Unidos representa alrededor del 4%, y los de India, Reino Unido o Francia, m¨¢s del 2%. El Pent¨¢gono present¨® el mes pasado un presupuesto militar base r¨¦cord para el ejercicio fiscal de 2012: un total de 553.000 millones de d¨®lares (396.200 millones de euros). La cifra no incluye el coste de las guerras en Irak y Afganist¨¢n.
Jap¨®n, India o Taiw¨¢n se encuentran entre quienes ven con inquietud el rearme chino. "Es un incremento del gasto de defensa extremadamente alto. No deja de preocuparnos para qu¨¦ es utilizado todo ese dinero", dijo Seiji Maehara, ministro de Defensa japon¨¦s. El mi¨¦rcoles pasado, Tokio tuvo que enviar varios cazas cerca de unas islas en aguas en disputa en el mar de China Oriental tras detectar la presencia de dos aviones chinos, uno de vigilancia y otro de lucha antisubmarina. Jap¨®n est¨¢ estudiando incrementar su flota de submarinos y las tropas y el n¨²mero de radares en las islas de Okinawa para dar respuesta al pujante poder¨ªo chino. Vietnam y Filipinas tambi¨¦n se han visto envueltos recientemente en roces con Pek¨ªn en los mares en disputa.
El mes pasado, India manifest¨® su "grave preocupaci¨®n" por la evoluci¨®n militar china y se comprometi¨® a reforzar sus propias Fuerzas Armadas. Nueva Delhi anunci¨® el martes pasado que incrementar¨¢ en un 11,6% el presupuesto militar este ejercicio, hasta 1,64 billones de rupias (26.100 millones de euros). El a?o anterior, el aumento fue de alrededor del 4%.
El Gran Hermano en Pek¨ªn
El Gobierno chino prepara un proyecto que a muchos cr¨ªticos recordar¨¢ el mundo de control reflejado por George Orwell en su novela 1984 y el Gran Hermano que todo lo ve. Pek¨ªn est¨¢ desarrollando un sistema, que prev¨¦ poner en marcha en este primer semestre, para seguir y tener localizados durante las 24 horas del d¨ªa a todos y cada uno de los suscriptores en la capital china de la compa?¨ªa China Mobile, que controla el 70% del mercado, seg¨²n ha informado la prensa local. Las otras dos operadoras -China Unicom y China Telecom- se unir¨¢n probablemente al proyecto. Pek¨ªn podr¨ªa vigilar as¨ª los movimientos de unos 17 millones de personas sobre una poblaci¨®n de unos 24 millones.
Las autoridades aseguran que el sistema ser¨¢ utilizado para ayudar a gestionar el tr¨¢fico urbano, pero tambi¨¦n para "saber cu¨¢nta poblaci¨®n hay en un momento dado en un lugar determinado".
La orwelliana decisi¨®n permitir¨¢ al Gobierno, seg¨²n el diario de Hong Kong South China Morning Post, saber d¨®nde est¨¢ en todo momento cada usuario -ya sea un conocido activista chino o un empresario extranjero-, y ya se encuentre en el sal¨®n de su casa, cenando en un restaurante o paseando por la ciudad. Ser¨¢ una efectiva herramienta para prevenir y abortar cualquier intento de concentraci¨®n popular y manifestaci¨®n.
La noticia ha trascendido en medio del nerviosismo de las autoridades ante las revueltas que han sacudido el mundo ¨¢rabe y la intensificaci¨®n de las medidas para evitar un potencial contagio. Los analistas pol¨ªticos consideran que es muy poco probable que se produzca una situaci¨®n similar en el pa¨ªs asi¨¢tico debido a su pujanza econ¨®mica, las positivas perspectivas con que ve el futuro la mayor parte de los chinos y el f¨¦rreo control que ejerce el Gobierno sobre la informaci¨®n. Pese a ello, Pek¨ªn no quiere correr el m¨ªnimo riesgo.
Tras someter a estricta censura a los medios de comunicaci¨®n oficiales y las p¨¢ginas en Internet; tras haber detenido o puesto bajo vigilancia domiciliaria a decenas de disidentes -algunos han sido acusados de querer subvertir el poder del Estado por difundir las convocatorias para manifestarse en China-, le ha tocado el turno a la prensa extranjera. Las autoridades han prohibido a los periodistas extranjeros que cubran las informaciones sobre las protestas convocadas cada domingo por organizadores desconocidos en ciudades de todo el pa¨ªs -en el caso de Pek¨ªn, en la calle Wangfujing, una de las m¨¢s comerciales- a trav¨¦s de la web estadounidense Boxun, dirigida por disidentes.
El Departamento de Seguridad P¨²blica ha llamado a cap¨ªtulo a decenas de corresponsales, a los que ha interrogado y acusado, en sesiones grabadas en v¨ªdeo, de haber incumplido unas poco claras normativas para filmar o entrevistar en los lugares designados para las protestas, y les ha advertido de que si vuelven a acudir podr¨ªan ser detenidos y sus visados cancelados.
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