Romance de ciencia ficci¨®n
En ocasiones muy puntuales, las pel¨ªculas de ciencia ficci¨®n poco tienen que ver con los avances tecnol¨®gicos y con la presencia de espectaculares artilugios a¨²n por inventar en el mundo real. A veces (piensen en el espacio sobrenatural de la extraordinaria en todos los sentidos Picnic en Hanging Rock) una historia ambientada en el futuro (o, como el caso que nos ocupa, en un presente hist¨®rico con mutaciones) viene a presentarnos una realidad palpable y reconocible, por mucho que la sociedad en la que se enmarque sea dist¨®pica, es decir, una utop¨ªa negativa alejada de lo ideal para el ser humano. Es lo que ocurre con la inclasificable Nunca me abandones, basada en una novela del japon¨¦s afincado en Inglaterra Kazuo Ishiguro, adaptada ahora al cine por el prestigioso realizador de videoclips Mark Romanek, empe?ado en desterrar la idea de que los de su especie, cuando llegan al cine, utilizan montajes ultrarr¨¢pidos y apabullantes puestas en escena.
NUNCA ME ABANDONES
Direcci¨®n: Mark Romanek. Int¨¦rpretes: Carey Mulligan, Andrew Garfield, Keira Knightley, Charlotte Rampling.
G¨¦nero: ciencia ficci¨®n. EE UU, 2010.
Duraci¨®n: 103 minutos.
Cruce imposible entre una trama a lo Philip K. Dick y ambiente de Austen
Para entendernos, y sin necesidad de desvelar demasiado de una trama que solo comienza a entenderse en la novela alrededor de la p¨¢gina 100 (Romanek, en todo caso, hace bien en dar ciertas pistas en los primeros minutos), estamos ante una pel¨ªcula donde la sociedad que lucha contra las enfermedades incurables, gracias a la ciencia, ha creado un mundo paralelo en el que reina lo buc¨®lico, pero en el que el amor est¨¢ desterrado, un tanto a la manera del reducto social de El bosque, de M. Night Shyamalan. Nunca me abandones, ambientada entre las d¨¦cadas de los setenta y los noventa, con muy vagas explicaciones sobre los razonamientos y la metodolog¨ªa utilizada para llegar a tal estado colectivo, se conforma as¨ª como el cruce imposible entre una trama a lo Philip K. Dick y unos personajes, unos ambientes y unos subtextos cercanos al romanticismo de Jane Austen. Una pel¨ªcula interesant¨ªsima aunque, eso s¨ª, demasiado fr¨ªa, sobre todo teniendo en cuenta que se est¨¢ priorizando el sentimiento de desesperanza en perjuicio de la reflexi¨®n expositiva sobre las caracter¨ªsticas de una sociedad enmarcada en un futuro alternativo, y que todos los elementos formales y narrativos de la pel¨ªcula (m¨²sica de cuerda y tonalidad rom¨¢ntica; paisajes campestres; tri¨¢ngulo amoroso) deber¨ªan confluir, y no lo consiguen del todo, en una explosi¨®n de emociones.
Babelia
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