El Tribunal de Madrid defiende juzgar a Correa y El Bigotes junto a Camps
Los jueces dejan en manos de la justicia de Valencia decidir si hay delito
La Sala Penal del Tribunal Superior de Justicia de Madrid acord¨® ayer que sean sus colegas de Valencia quienes decidan si los tres m¨¢ximos jefes de la trama G¨¹rtel deben ser juzgados junto a Francisco Camps en relaci¨®n con el regalo de los trajes y joyas que hizo la red al presidente valenciano y a otros altos cargos del PP de esa comunidad (Ricardo Costa, Rafael Betoret y V¨ªctor Campos).
La Sala ratifica en gran parte la decisi¨®n del juez instructor de G¨¹rtel, Antonio Pedreira, quien en el tema de los trajes se inhibi¨® a favor del Tribunal Superior de Valencia por entender que tanto el cabecilla de la red, Francisco Correa, como su n¨²mero dos, Pablo Crespo, y ?lvaro P¨¦rez, el Bigotes, deb¨ªan ser enjuiciados junto a los citados altos cargos del PP por ser ellos quienes les sobornaron con esas d¨¢divas.
La Sala Penal de Madrid analiz¨® ayer el recurso del PP contra la decisi¨®n de Pedreira en el tema de los trajes y en la que sosten¨ªa que no es posible juzgar de forma aislada a Camps y los otros altos cargos como receptores de los regalos sin enjuiciar paralelamente a quienes les sobornaron. El PP act¨²a en G¨¹rtel como acusaci¨®n particular, aunque a juzgar por sus constantes recursos m¨¢s bien parece ser una defensa.
La decisi¨®n de la Sala Penal de Madrid puede demorar el previsible juicio contra Camps por aceptar trajes de la trama G¨¹rtel, a pesar de que este asunto ya est¨¢ instruido por el juez de Valencia Jos¨¦ Flors, quien solo est¨¢ pendiente de recibir los escritos de dos imputados antes de tomar una ¨²ltima decisi¨®n. Salvo que su Sala dictamine otra cosa, la intenci¨®n inicial de Flors es sentar en el banquillo a Camps y a los otros altos cargos pero no a la c¨²pula de G¨¹rtel.
Cohecho pasivo
En julio de 2009, Flors dio por instruida la causa de los trajes y dict¨® un auto en el que revel¨® que existe "constancia" de que las prendas de vestir adquiridas por Camps en diferentes tiendas de Madrid fueron pagadas por sociedades vinculadas a Orange Market. Tambi¨¦n consider¨® que los hechos "eran constitutivos de un delito de cohecho pasivo del art¨ªculo 426 del C¨®digo Penal", que determina que "la autoridad o funcionario p¨²blico que admitiere d¨¢diva o regalo que le fueren ofrecidos en consideraci¨®n a su funci¨®n o para la consecuci¨®n de un acto no prohibido legalmente, incurrir¨¢ en la pena de multa de tres a seis meses".
Pero el asunto qued¨® entonces paralizado porque Camps y los otros imputados recurrieron la decisi¨®n de Flors ante la Sala de lo Penal de Valencia, que acab¨® archivando el caso de los trajes con el voto a favor del expresidente de este ¨®rgano Juan Luis de la R¨²a. La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n apel¨® el archivo ante el Tribunal Supremo, que un a?o despu¨¦s tumb¨® la decisi¨®n de la Sala y orden¨® reabrir la causa para juzgar a Camps y los otros imputados. Como el objeto de ese recurso era el archivo decretado en Valencia, el Supremo no se pronunci¨® sobre si la c¨²pula de G¨¹rtel deb¨ªa ser enjuiciada junto a Camps. Anticorrupci¨®n, que pide para Camps, por cohecho pasivo, una multa de 41.250 euros, es partidaria de que el presidente de la Comunidad Valenciana y los otros altos cargos se sienten en el banquillo junto a los responsables de G¨¹rtel por la conexi¨®n entre los donantes de los regalos y sus receptores.
Fuentes jur¨ªdicas de Valencia creen que es factible juzgar a Camps, Costa, Campos y Betoret como receptores de regalos sin necesidad de enjuiciar en la misma causa a los donantes de los trajes. Estos medios se?alan que el delito de cohecho pasivo del art¨ªculo 426 del C¨®digo Penal es un tipo residual y diferente del activo, y que va dirigido solo contra los funcionarios que aceptan regalos en funci¨®n de sus cargos, no contra los donantes.
Fuentes jur¨ªdicas de Madrid entienden, en cambio, que el tipo base, el de cohecho propio, castiga a receptor y dador, y entienden que separar a unos de otros cara al juicio rompe los principios de "econom¨ªa procesal" y el de no ruptura de la continencia de la causa, por lo que lo normal es que se juzgue a Correa, el Bigotes, Camps y al resto de los imputados en un mismo procedimiento.
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