Luz para el tercer sector

Las entidades que conforman el tercer sector est¨¢n de enhorabuena. Cooperativas, mutualidades, fundaciones, asociaciones, sociedades laborales, empresas de inserci¨®n, centros de empleo, sociedades agrarias y cofrad¨ªas de pescadores estrenan ley y reconocimiento jur¨ªdico. El mi¨¦rcoles pasado el Congreso de los Diputados aprob¨® por unanimidad una norma pionera en Europa, seg¨²n el Ministerio de Trabajo, que tiene por objetivo "configurar un marco jur¨ªdico que reconoce y facilita la actividad de un sector de empresas cuyo denominador com¨²n es la primac¨ªa de los trabajadores, de los consumidores y del fin social, el compromiso con el desarrollo local, la cohesi¨®n y la sostenibilidad".

El empleo generado en cooperativas y fundaciones creci¨® un 5% el a?o pasado

La econom¨ªa social mueve anualmente 116.000 millones de euros en Espa?a

Son las entidades sin af¨¢n lucrativo, en las que predomina el objeto social y la persona sobre el capital. Esas empresas que se rigen por distintas normativas y que se quejan de la falta de visibilidad. Entre otras cosas porque son muchas y muy dispersas y, salvo raras excepciones, como

Corporaci¨®n Mondrag¨®n, apenas son conocidas y reconocidas jur¨ªdicamente.

Aunque mueven 116.000 millones de euros, emplean a m¨¢s de dos millones de personas, es decir, por encima del 10% de la poblaci¨®n ocupada, seg¨²n el estudio elaborado por el Centro Internacional de Investigaci¨®n e Informaci¨®n sobre la Econom¨ªa P¨²blica, Social y Cooperativa (CIRIEC), tampoco est¨¢n sometidas a un control estad¨ªstico (como pretende corregir ahora la norma) que les permita poner en valor su aportaci¨®n a la econom¨ªa, que el Ministerio de Trabajo cifra en el 3% del PIB, y establecer cauces de representaci¨®n.

Y eso es lo que conseguir¨¢n con la ley, prev¨¦ Juan Antonio Pedre?o, presidente de la Confederaci¨®n Empresarial Espa?ola de la Econom¨ªa Social (Cepes), que aglutina a unas 45.000 empresas de las 200.000 entidades que conforman el tercer sector en su conjunto.

El texto establece el plazo de seis meses, explica, para poner en marcha medidas para el desarrollo de estas entidades. Cada comunidad aut¨®noma tendr¨¢ que determinar los programas de fomento y apoyo que van a impulsar para la actividad de estas empresas, contin¨²a. Lo que se traducir¨¢, en opini¨®n del grupo Mondrag¨®n, en que "se nos tendr¨¢ m¨¢s en cuenta para el reparto de las ayudas p¨²blicas".

Un espaldarazo necesario, indica Pedre?o, para unas de las pocas organizaciones que, adem¨¢s de estar creciendo en plena crisis, est¨¢n creando empleo. El presidente de Cepes pone sobre la mesa los ¨²nicos datos de que dispone: "En 2010 las cooperativas crecieron un 7% en n¨²mero y generaron un 5% de empleos m¨¢s que el a?o anterior". "El futuro pasa por nuestro sector. Cuando las Administraciones P¨²blicas van a dejar de crear trabajo, como ocurri¨® el a?o pasado, y las grandes empresas tampoco est¨¢n contratando, muchas de nuestras sociedades optan por reducir los salarios para mantener el empleo".

En la misma l¨ªnea, Carlos ?lvarez, presidente de la Asociaci¨®n Espa?ola de Fundaciones, que agrupa a unas 1.100 entidades sin ¨¢nimo de lucro de las 8.500 que contabiliza en Espa?a. "La ley reconoce que las familias de la econom¨ªa social tienen un cometido importante en la econom¨ªa. Y nos permitir¨¢ un mejor tratamiento en la legislaci¨®n fiscal", dice.

?lvarez coincide con Pedre?o en que la crisis ha incidido menos en este sector (pese a que se hayan recortado del orden del 20% las ayudas p¨²blicas), al igual que en el empleo que genera. "Si en 2007 y 2008 se creaban unas 450 fundaciones anuales, el a?o pasado y el anterior nacieron unas 430. Sin embargo, en estos cuatro a?os el incremento en el empleo ha sido del 4% anual", a?ade.

Fundaci¨®n Integra es una de las entidades que ha creado trabajo en plena crisis. Su directora, Ana Mu?oz de Dios, piensa que "la ley reforzar¨¢ a las fundaciones con actividad econ¨®mica o empresarial, pues las ayudar¨¢ a disponer de los canales adecuados de interlocuci¨®n con la Administraci¨®n P¨²blica, a eliminar obst¨¢culos para generar empleo y a allanar el camino para el impulso de sus actividades econ¨®micas con la simplificaci¨®n de tr¨¢mites administrativos. Todo ello contribuir¨¢ a la creaci¨®n de empleo". Integra tiene un presupuesto de unos 450.000 euros anuales y se dedica a insertar a personas en exclusi¨®n social en el mercado laboral.

Del lado cooperativo, los cinco socios de Maej, firma murciana de reparaci¨®n y venta de maquinaria el¨¦ctrica, est¨¢ lidiando la crisis rebajando al m¨ªnimo los sueldos de los cooperativistas. "Hemos hecho maravillas para no cerrar la empresa, que ha pasado de vender 1,3 millones de euros a 500.000. Ahora nos han concedido una peque?a l¨ªnea de cr¨¦dito que nos permitir¨¢ subsistir", dice su portavoz, Mar¨ªa Jim¨¦nez.

El grupo m¨¢s grande del sector, Mondrag¨®n Corporaci¨®n, tambi¨¦n ha reducido los salarios de casi todas sus empresas entre un 5% y un 8,5%. Pero no ha sido suficiente y, "por primera vez en la historia hemos perdido empleo", reconoce un portavoz. Sus 92.700 trabajadores han pasado a ser 85.000 entre 2008 y 2009 (¨²ltimos datos disponibles), cuando sus ingresos bajaron en m¨¢s de 2.000 millones de euros para colocarse en 14.780 millones de euros. Pendiente del cierre del ejercicio 2010, el grupo cooperativo asegura que est¨¢ en la senda de la recuperaci¨®n, sobre todo en la rama industrial (43% de la plantilla), para la que ya est¨¢ contratando por el tir¨®n de los mercados internacionales, no as¨ª en el ¨¢rea de distribuci¨®n, donde sobre Eroski todav¨ªa pesan ciertas dudas (52,5% del personal).

Fuente: Centro Internacional de Investigaci¨®n e Informaci¨®n sobre la Econom¨ªa P¨²blica, Social y Cooperativa (CIRIEC).