En el limbo del cannabis

?Es delito cultivar, vender y traficar con marihuana? S¨ª, lo es, atendiendo al art¨ªculo 368 del C¨®digo Penal, bajo penas de prisi¨®n de tres a seis a?os. ?Se puede constituir una asociaci¨®n que diga en sus estatutos que sembrar¨¢ esta droga para su consumo? S¨ª, tambi¨¦n es posible, seg¨²n la fiscal¨ªa de Barcelona.

Con estos mimbres, la pol¨¦mica de los l¨ªmites est¨¢ servida y trae de cabeza tanto a los Mossos d'Esquadra como a los due?os de las asociaciones que promueven el consumo de la droga en "espacios privados, de uso y acceso exclusivo para socios".

En Catalu?a existen m¨¢s de 40 entidades de este tipo, seg¨²n la Federaci¨®n de Asociaciones Cann¨¢bicas (aunque federadas solo est¨¢n tres). En las bases de datos de la Generalitat constan unas 30 entidades o clubes que fomentan el estudio, la legalizaci¨®n, el uso o el consumo del cannabis. Ante cualquier actuaci¨®n policial, las asociaciones se amparan en que est¨¢n legalmente registradas. Los Mossos d'Esquadra, en que infringen la ley. A todo ello se suma el malestar de vecinos, que suelen padecer el trasiego de gente que acude a los locales.

En tre meses, la polic¨ªa auton¨®mica ha detenido a nueve personas de tres asociaciones (en Sitges y Barcelona) por tr¨¢fico de drogas. El ¨²ltimo caso ocurri¨® el domingo. A la una de la tarde, varios agentes entraron en el n¨²mero 57 de la calle de Guitard, en Les Corts (Barcelona): The Resin Club. Los mossos llevaban una orden del juzgado n¨²mero 29 de Barcelona que les autorizaba a ello.

All¨ª encontraron 200 plantas de marihuana, 300 gramos de semillas y 200 gramos m¨¢s de la droga preparada para ser vendida. La denuncia, an¨®nima, provino de uno de los vecinos del inmueble, al que le llegaba el olor de las plantas."Se o¨ªa toda la noche el motor que ten¨ªan para las plantas. Cuando se abren las ventanas, a ver c¨®mo duermes", lament¨® ayer Susana Camacho, de 67 a?os, portera del bloque de pisos de la calle de Guitard donde est¨¢ el club. La mujer se quej¨® tambi¨¦n del ir y venir de personas d¨ªa y noche: "Se les o¨ªa charlar y con m¨²sica hasta las tres de la ma?ana". Otra vecina, que prefiri¨® no identificarse, asegur¨® que era evidente que se consum¨ªa droga en el club y que eso supone un p¨¦simo ejemplo en el vecindario.

Desde el domingo, el presidente de la asociaci¨®n, Aitor J., de 34 a?os, y dos mujeres, que viv¨ªan en el local y eran socias, Elisabeth M., de 32 a?os, y Line S., de 29, est¨¢n detenidos. La entidad se publicita en Internet a trav¨¦s de su p¨¢gina web y consta en el registro de asociaciones de la Generalitat.

"El derecho de asociaci¨®n es un derecho constitucional. Solo tiene un l¨ªmite: que sus finalidades no sean il¨ªcitas. Cuando se present¨® la primera asociaci¨®n que reconoc¨ªa el consumo propio, se plante¨® una duda razonable, por eso se present¨® a la fiscal¨ªa", explic¨® ayer Xavier Camp¨¤, subdirector general de Entidades Jur¨ªdicas del Departamento de Justicia. Camp¨¤ admite "cierta contradicci¨®n" entre la ley y los estatutos de las asociaciones. "Por eso acudimos a la fiscal¨ªa", insisti¨®.

El ministerio p¨²blico fundamenta que por el hecho mismo de constituirse como asociaci¨®n no est¨¢n cometiendo un delito. "Pese a mencionarse fines y actividades que podr¨ªan plantear problemas de valoraci¨®n penal, introducen, respecto a algunos de sus objetivos, matices que denotan la pretensi¨®n de armonizar las actividades proyectadas con criterios legales", recoge.

Pero incluye una clara advertencia: "Cualquier actividad que puediera llevar a cabo que incurra en las conductas tipificadas como delito en los art¨ªculos del C¨®digo Penal motivar¨¢n la correspondiente actuaci¨®n policial".

El abogado de que defiende a las tres asociaciones intervenidas por los Mossos, Mart¨ª C¨¤naves, considera "desmesurada la acci¨®n policial". A su entender, no cometen ninguna ilegalidad porque "no hay consumo de terceras personas" dentro de las asociaciones. Se realiza un "cultivo colectivo de cannabis" con un uso "exclusivo para los socios", insiste, y explica que "deben inscribirse, abonar una cuota e informar del consumo que esperan hacer en los siguientes meses para abastecerse". La pol¨¦mica est¨¢ servida.