M¨¢laga estrena su museo Thyssen

Carmen Thyssen ya tiene un museo en M¨¢laga, con su colecci¨®n de pinturas y su propio nombre, y la ciudad refuerza notablemente su oferta cultural y de ocio en su empe?o por distinguirse como destino tur¨ªstico. La baronesa Thyssen y el alcalde, Francisco de la Torre, se regalaron ayer elogios por esta provechosa relaci¨®n al presentar en sociedad la nueva pinacoteca que hoy se inaugura oficialmente entre una notable expectaci¨®n ciudadana y period¨ªstica. El regidor agradeci¨® "el compromiso y la generosidad" de Carmen Thyssen, de la que lleg¨® a decir que presta "un gran servicio al Estado" por su labor muse¨ªstica; y la baronesa respondi¨® otorgando a De la Torre una cuota de responsabilidad decisiva: "Me convenci¨® con su gran perseverancia durante mucho tiempo".

La baronesa Thyssen ha puesto su colecci¨®n de pintura espa?ola del siglo XIX, formada por 230 cuadros, para configurar los fondos del museo durante los pr¨®ximos 12 a?os -el protocolo firmado en 2008 contemplaba 15 a contar desde ese momento-; y el Ayuntamiento de M¨¢laga ha rehabilitado el Palacio de Villal¨®n, un edificio noble del siglo XVI que estaba absolutamente ruinoso, a los que ha a?adido otros cinco inmuebles en la c¨¦ntrica calle Compa?¨ªa como sede de la instituci¨®n -solo la rehabilitaci¨®n supera los 17 millones de euros-.

El museo se inaugura sin que se haya firmado un contrato de cesi¨®n de obra, como contemplaba el protocolo suscrito hace tres a?os. La baronesa dijo que tiene la intenci¨®n de que el proyecto se prolongue. "Estoy enamorada del museo y esto se va resolver para mucho m¨¢s tiempo, mi intenci¨®n es siempre hacer las cosas bien hechas", dijo. El alcalde inform¨® de que la fundaci¨®n ha cumplido ya con otro de los tr¨¢mites esenciales que hab¨ªa omitido, la entrega de la documentaci¨®n pertinente a la Consejer¨ªa de Cultura para que el centro pueda tener el reconocimiento oficial de museo y ser inscrito en la red andaluza.

A falta de solo cuatro d¨ªas para que la legislaci¨®n electoral proh¨ªba los actos de inauguraci¨®n, las prisas han sido m¨¢s que evidentes. A ¨²ltima hora de ayer varias decenas de operarios se afanaban en dejar presentable la tienda y la planta baja del edificio administrativo, aunque comparado con el estado de hace cuatro d¨ªas parece milagroso.

El museo Carmen Thyssen M¨¢laga, denominaci¨®n definitiva del centro que en principio iba a llamarse Carmen Thyssen Bornemisza, nombre que tiene registrado el Estado, se compone de un conjunto de edificaciones de 7.147 metros cuadrados, 5.185 de ellos de uso expositivo.

La colecci¨®n -se han colgado 172 cuadros- se exhibe en tres plantas agrupadas por ¨¢reas tem¨¢ticas. En la baja hay un recorrido por el paisaje rom¨¢ntico y el costumbrismo, con obras de Dehodenq, Bamberger, Dom¨ªnguez B¨¦cquer, G¨®mez Gil o P¨¦rez Villamil.

En la primera planta se muestra el preciosismo y el paisaje naturalista, con obras de Fortuny, Jos¨¦ Benlliure, Moreno Carbonero, Carlos de Haes o S¨¢nchez-Perrier.

La segunda planta, dedicada al fin del siglo y a la modernizaci¨®n de la pintura espa?ola es sin duda la de mayor calidad art¨ªstica, con obras de Sorolla, Julio Romero de Torres, Zuloaga, Regoyos o Ram¨®n Casas. La tercera planta est¨¢ ocupada por la sala para exposiciones temporales, la primera de las cuales, De Picasso a T¨¤pies, abrir¨¢ el 11 de abril.

Una selecta sala junto al balc¨®n principal del palacio de Villal¨®n, Maestros antiguos, re¨²ne una decena de cuadros de tema religioso anteriores al XIX por decisi¨®n de la baronesa, entre los que resalta Santa Marina, de Zurbar¨¢n, y varias esculturas con una talla an¨®nima de un Cristo muerto del siglo XIII que el bar¨®n Thyssen tuvo en su residencia de Pedralbes y que hasta abrir su museo de M¨¢laga ten¨ªa prestada su viuda al Museo Nacional de Arte de Catalu?a.