Las promesas de reformas no logran acallar la protesta en Siria

El r¨¦gimen sirio parece encallado en la duda. No deja de prometer reformas y libertades, pero dispara a quienes las piden. Ayer volvi¨® a anunciarse que el presidente Bachar el Asad estaba a punto de pronunciar un discurso en el que abolir¨ªa el estado de excepci¨®n vigente desde 1963. Eso no cambi¨® la situaci¨®n en Deraa, donde los manifestantes volvieron a salir a la calle y volvieron a ser reprimidos con disparos y gases lacrim¨®genos. Desde el inicio de la revuelta, hace 10 d¨ªas, han muerto al menos 61 personas.

El vicepresidente, Faruk el Shara, declar¨® que el presidente El Asad aparecer¨ªa en televisi¨®n en los pr¨®ximos dos d¨ªas para anunciar medidas que, seg¨²n ¨¦l, agradar¨ªan y tranquilizar¨ªan a los sirios. No ofreci¨® ning¨²n otro detalle. La asesora presidencial Buthaina Shaaban asegur¨® el s¨¢bado que el estado de excepci¨®n ten¨ªa las horas contadas y que la liberalizaci¨®n del r¨¦gimen era cosa hecha; ese mismo d¨ªa murieron 12 personas en la ciudad costera de Latakia, por disparos de las fuerzas de seguridad.

Los diplom¨¢ticos extranjeros en Damasco coincid¨ªan en opinar que El Asad a¨²n no hab¨ªa decidido si comparecer ante los ciudadanos y conceder algunas de las reivindicaciones de los manifestantes, o sofocar la revuelta a sangre y fuego. Su padre, Hafez el Asad, no dud¨® en matar entre 10.000 y 20.000 personas en 1982 para aplastar una rebeli¨®n islamista centrada en la ciudad de Hama, y permaneci¨® en el poder 18 a?os m¨¢s, hasta su muerte. Los expresidentes de T¨²nez y Egipto, en cambio, cedieron a la presi¨®n popular, uno en enero y el otro en febrero, y cayeron en menos de una semana.

El Asad no solo sufr¨ªa la presi¨®n de los sirios. Despu¨¦s de que Washington y numerosas capitales europeas le instaran a dejar de ametrallar a su gente y abrir un di¨¢logo nacional, ayer fue el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, quien le pidi¨® que "escuchara la voz de su pueblo". Erdogan es un estrecho aliado de El Asad y evita que Siria se quede a solas con Ir¨¢n y la milicia libanesa de Hezbol¨¢, lo que le otorga una especial influencia. El primer ministro turco revel¨® que hab¨ªa hablado dos veces por tel¨¦fono con El Asad durante el fin de semana. "Me dijo que estaba preparando el levantamiento del estado de excepci¨®n para satisfacer a los manifestantes y que tambi¨¦n preparaba medidas sobre partidos pol¨ªticos; esperamos que esas medidas se apliquen realmente y no se queden en simples promesas", explic¨® Erdogan. "No recibimos una respuesta negativa cuando le pedimos que escuchara la voz de su pueblo", a?adi¨®.

La agencia oficial siria difundi¨® que El Asad hab¨ªa recibido llamadas de apoyo del rey Abdal¨¢ de Arabia Saud¨ª, del rey Hamad Bin Isa al Jalifa de Bahr¨¦in (que utiliza tropas saud¨ªes para reprimir a los manifestantes chi¨ªes), del presidente iraqu¨ª, Jalal Tabalani, y de diversos emires y jeques, todos ellos, seg¨²n la agencia, anim¨¢ndole a derrotar "la conspiraci¨®n contra la seguridad y la estabilidad de Siria".

La versi¨®n oficial del r¨¦gimen sirio consiste en que las manifestaciones son fruto de una "conspiraci¨®n" y que no son las fuerzas de seguridad las que disparan sobre la multitud, como confirman centenares de testigos, sino misteriosos grupos armados que desaparecen sin dejar rastro.