Bailar desnudos es bailar
Dos compa?¨ªas de Quebec danzan sin ropa en sendas obras en el Mercat
?C¨®mo est¨¢ la cartelera!, se dir¨¢n algunos. Tras el foll¨®n de Gang bang en el Teatre Nacional de Catalunya (TNC), con su sexo gay durante la visita del Papa y sus sustos ultras, llega hoy a la sala Petita del mismo teatro Musicol¨¨psia, de la compa?¨ªa de danza Lan¨°nima Imperial, con el subt¨ªtulo Raps¨°dia per a set putes, que ya es ac¨¢pite, y la declarada intenci¨®n de provocar y ser "irreverentes". El estreno coincide con la presentaci¨®n en el Lliure de Montju?c de la conmovedora Gardenia, obra de los Ballets C de la B protagonizada por viejos travestidoss (s¨¢bado y domingo), y en el vecino Mercat de les Flors, la interesant¨ªsima Operaci¨®n Focus Quebec, en el marco de la cual dos prestigiosas compa?¨ªas de danza canadienses bailan sendas coreograf¨ªas con desnudos integrales.
La desnudez no presenta problemas t¨¦cnicos, seg¨²n el core¨®grafo L¨¦veill¨¦
En una de las obras, Amour, acide et noix (hoy y ma?ana), de Daniel L¨¦veill¨¦, tres hombres y una mujer act¨²an desvestidos, a pelo, vamos, toda la funci¨®n, y en la otra, Un peu de tendresse bordel de merde! -t¨ªtulo tambi¨¦n que retener-, de Dave St.-Pierre (s¨¢bado y domingo), los bailarines protagonizan diversas escenas desnudos, entre ellas una hipnotizante, de una desazonadora belleza, en la que resbalan con sus cuerpos sobre el escenario oleoso. En otro momento, danzarines como Dios los trajo al mundo pero con m¨¢s vello se pasean entre el p¨²blico dej¨¢ndose caer en el regazo de los espectadores (!). El espect¨¢culo de St-Pierre, que no hay que perderse, entusiasm¨® en el Festival de Avi?¨®n en 2009. "En Catalu?a el tema de la desnudez no nos preocupa, hemos visto muchos espect¨¢culos de desnudos", se?al¨® el director del Mercat, Francesc Casades¨²s, pensando en piezas como Mozartnu, de Iago Pericot. "Pese al pasado cat¨®lico, no creo que suceda nada".
"?Por qu¨¦ desnudos?", se interrog¨® el propio L¨¦veill¨¦ ayer al presentar su coreograf¨ªa. Y ¨¦l mismo se respondi¨®: "Inicialmente quer¨ªa que los bailarines llevaran la m¨ªnima ropa, ba?ador, calzoncillos, bragas. Pero me gusta llevar las ideas al l¨ªmite. La desnudez desvela el alma humana. Desvestirlos del todo fue una revelaci¨®n, para m¨ª y para ellos. Cuando un bailar¨ªn baila m¨ªnimamente cubierto es sexy, cuando lo hace deesnudo es completamente diferente, otra dimensi¨®n, de una vulnerabilidad esencial". L¨¦veill¨¦ es una instituci¨®n del mundo art¨ªstico quebequ¨¦s. "No escondo la humanidad de los bailarines", afirma, con una frase doblemente apropiada en este caso. Amour, acide et noix (2001), inspirada en la dura vida de un joven en la calle, es la primera parte de una trilog¨ªa y se baila con Las cuatro estaciones, de Vivaldi. El core¨®grafo recalca que la desnudez no presenta problemas t¨¦cnicos. "No condiciona ni cambia nada. Incluso dos movimientos que me autocensur¨¦ porque me parec¨ªan muy fuertes con los bailarines desnudos los volv¨ª a incorporar y son de los que funcionan mejor con el p¨²blico".Obra de danza teatro, Un peu de tendresse bordel de merde!, de Dave St-Pierre, ausente ayer, aborda diferentes formas de ternura, a veces con im¨¢genes chocantes, como la chica que se sienta desnuda sobre un pastel.
La Operaci¨®n Quebec tiene una extensi¨®n en la Fundaci¨®n T¨¤pies, donde la fil¨®sofa especializada en movimiento Erin Manning impartir¨¢ un taller y dar¨¢ una conferencia. En la T¨¤pies, adem¨¢s, el s¨¢bado, a las 18.30, bailar¨¢n improvisaciones sobre su espect¨¢culo los int¨¦rpretes de L¨¦veill¨¦, previsiblemente desnudos.
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