Rusi?ol, otra vez moderno
El Institut d'Estudis Catalans estrena en las letras catalanas la obra completa de un autor en la Red y con acceso abierto
Moderno por antonomasia cuando irrumpi¨® con popular e inusitada fuerza en las letras y la pintura catalana a principios del siglo XX, Santiago Rusi?ol vuelve a ser innovador y puntero a principios del XXI, justo cuando se cumplen 150 a?os de su nacimiento. Porque desde esa efem¨¦ride, el autor de L'auca del senyor Esteve es ya el primer escritor catal¨¢n que empieza a tener toda su obra completa en Internet, en un acceso universal y abierto (http://taller.iec.cat/OCSR/). La modernidad es resultado de la labor de la especialista Vinyet Panyella, que desde 2008 coordina un equipo de expertos (entre ellos, los escritores Jaume Cabr¨¦ y Susanna Rafart, y estudiosos como Margarita Casacuberta y Dami¨¤ Pons) bajo el mantel del Institut d'Estudis Catalans y su filial, la Societat Catalana de Llengua i Literatura.
"El sistema literario catal¨¢n ha de resituar muchas cosas y, entre ellas, la figura de Rusi?ol y el reduccionismo al que se le ha sometido con lo de su imagen fr¨ªvola; esta labor ayudar¨¢", defiende Panyella. Por ambici¨®n no quedar¨¢: en un proyecto de seis a?os que llegar¨¢ hasta 2014 y con 40.000 euros de presupuesto (sin contar el coste t¨¦cnico), se trata de recuperar, estudiar y publicar electr¨®nica-mente la ingente producci¨®n literaria del autor barcelon¨¦s, paradigma del modernismo, de la que "apenas ahora existen una decena de t¨ªtulos vivos en las librer¨ªas catalanas", apunta la coordinadora. Una nimiedad si se tiene presente que la obra completa digital, dividida en seis vol¨²menes, alcanzar¨¢ los 110 t¨ªtulos y, por primera vez, la totalidad de sus art¨ªculos, unos 1.300.
"No hay in¨¦ditos, pero s¨ª mucha cosa hasta ahora diseminada o fuera de circulaci¨®n desde hace a?os", cuantifica Panyella, que calcula que ahora tienen localizado "el 98% de una obra muy dispersa en revistas y diarios". En total ser¨¢n seis vol¨²menes, que arrancar¨¢n con las prosas diversas y los viajes, las conferencias y discursos y los pr¨®logos. A este le sigue el de las novelas (las cuatro suyas, m¨¢s las traducciones que realizo, especialmente de Alphonse Daudet), el de art¨ªculos (de 10 cabeceras distintas, desde La Vanguardia i L'Aven? a El Eco de Sitges y L'Esquella de la Torratxa), el del teatro (con 70 obras), el que re¨²ne el epistolario y las entrevistas, y el que cerrar¨¢ la serie con una milim¨¦trica cronolog¨ªa, bibliograf¨ªa e ¨ªndices de lugares personas y obras.
El lujo cobra su mayor esplendor en cuanto se observa que la p¨¢gina web, que tambi¨¦n podr¨ªa recoger los lienzos del artista, albergar¨¢ una doble versi¨®n de cada obra: la primera edici¨®n original ("no quedan casi manuscritos de Rusi?ol, por eso nos basamos en esas publicaciones") y su correspondiente transcripci¨®n al catal¨¢n normalizado. M¨¢s a¨²n: cuando se pueda, se ofrecer¨¢n incluso ediciones de bibli¨®filo, como la que ya puede verse del bello Jardins d'Espanya (1903), con dibujos del propio Rusi?ol, y de Andalusia vista per un catal¨¤, de 1896, de la que el ¨²nico ejemplar que se conoce est¨¢ en la Biblioteca de Catalu?a.
Ahora, la obra completa ofrece ya 17 obras en formato PDF para su libre descarga. Para dentro de dos meses se espera que se alcancen las 50, entre ellas todo el contenido de los dos primeros vol¨²menes. La clave de una operaci¨®n as¨ª est¨¢ en que los derechos de la obra de Rusi?ol pasan a ser de dominio p¨²blico este pr¨®ximo junio. "Eso ha facilitado las cosas; en cualquier caso, una operaci¨®n as¨ª nos recuerda que hay que empezar a mirar el patrimonio literario catal¨¢n de manera diferente, y a los editores, que su rol ha cambiado y que han de trabajar a partir de proyectos como este", apunta Oriol Izquierdo, director de la Instituci¨® de les Lletres Catalanes, que ha apoyado la iniciativa.
Rusi?ol ha dado pie tambi¨¦n, a ra¨ªz de las obras completas digitales, a la Sociedad Rusi?ol (http://blocs.iec.cat/santiago), grupo de trabajo de la Societat Catalana de Llengua i Literatura para promocionar y difundir su obra, y tiene ya una ruta literaria. La modernidad de Rusi?ol dura, pues, siglo y medio.
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