Salud: el coronel no tiene quien le escriba

El d¨ªa que el presidente Zapatero dijo que Espa?a atrapar¨ªa a Francia, el coronel, subordinado de Aureliano Buend¨ªa, esperaba una carta, y la consejera Marina Geli afirmaba que el sistema sanitario p¨²blico catal¨¢n era el mejor del mundo y proclamaba la necesidad de incrementar el gasto sanitario por habitante hasta la media europea.

Josep Maria Sabat¨¦, exdirector del Servicio Catal¨¢n de la Salud, contin¨²a instalado en ese d¨ªa e insiste en una mirada retrospectiva. Pues no. La realidad es que Catalu?a tiene un d¨¦ficit sanitario oficial de 850 millones generado a lo largo de un ¨²nico a?o. Con las recurrencias, las certificaciones de obra llegadas despu¨¦s del 1 de enero y los compromisos contra¨ªdos y no presupuestados, esta cifra llega hasta los 1.200 millones.

Es la realidad: en este contexto tenemos que gobernar.

Venimos de una inercia que niega la crisis y afirma que podemos gastar m¨¢s de lo que tenemos, m¨¢s de lo recaudado. Entre 2004 y 2009 se acumularon 2.600 millones de d¨¦ficit sanitario, regularizados despu¨¦s de un duro informe de la Sindicatura de Cuentas de Catalu?a.

Un a?o despu¨¦s, el Departamento de Salud continuaba afirmando que deb¨ªamos tener un gasto de salud como el de la media europea. En el mismo momento, el director del CatSalut afirmaba que necesitaba 700 millones de euros para poder acabar el a?o 2010. Mientras el viejo coronel segu¨ªa esperando la carta, en Catalu?a se constru¨ªan cuatro hospitales nuevos, todos ellos en municipios gobernados por el PSC: m¨¢s de 400 millones de inversi¨®n con un incremento de gasto ordinario de otros tantos.

No lo juzgamos. No lo criticamos. Pero no podemos continuar negando la crisis econ¨®mica. En 2011 no se mantiene el discurso ZP, ni la gesti¨®n econ¨®mica de la consejera Geli. Negar la crisis del sistema sanitario p¨²blico es eutanasia activa.

El problema del Gobierno es que debe pagar las deudas heredadas hoy. Sabat¨¦ receta a trav¨¦s de este mismo diario una serie de medidas que, dice, aliviar¨ªan el d¨¦ficit, que, por cierto, ¨¦l no puso en marcha cuando manifestaba que le faltaban 700 millones.

Entendemos, pues, que las medidas propuestas no le permitieron enjugar el d¨¦ficit de 2010, ni le permitir¨ªan cubrir el actual, entre otras cosas porque su rendimiento econ¨®mico es bajo. Si no tom¨® ni estas ni otras medidas m¨¢s efectivas era porque son dif¨ªciles y, en gran medida, impopulares. Gast¨® mucho y no tom¨® medidas en un a?o electoral.

Es el momento de la responsabilidad, no de mirar atr¨¢s. Es momento de buscar acuerdos para lograr una reforma estructural con el objetivo de lograr un sistema sanitario p¨²blico de calidad y viable y ayudar a impulsar aquellas medidas impopulares pero necesarias para garantizar la continuidad del sistema p¨²blico. Estoy convencido de que una vez pase el momento pol¨ªtico de las elecciones, contaremos con la lealtad del se?or Sabat¨¦ y de su partido. Al fin y al cabo estaremos dando respuesta a una situaci¨®n econ¨®mica dif¨ªcil y sin precedentes. No consideramos al anterior Gobierno culpable pero, como m¨ªnimo, s¨ª corresponsable. Podr¨ªa y deber¨ªa ayudar a mejorar esta situaci¨®n. Con esta confianza, al igual que el viejo coronel, seguiremos esperando, no una carta, sino la lealtad institucional que este Gobierno merece.

Francesc Sancho es secretario de Estrategia y Coordinaci¨®n del Departamento de Salud de la Generalitat de Catalu?a.