El rectorado es cosa de hombres

Una mujer preside por primera vez la Asociaci¨®n de Universidades Europeas. Maria Helena Nazar¨¦, exrectora de la Universidad de Aveiro (Portugal), acaba de ocupar el cargo y ya ha dejado clara su misi¨®n: romper el techo de cristal de las mujeres en la educaci¨®n superior. Si empezara por Espa?a, tendr¨ªa mucho trabajo. Aqu¨ª los rectorados son cosa hombres. Y como muestra, las recientes elecciones en la Complutense de Madrid, la universidad presencial m¨¢s grande de Espa?a. Hubo seis candidatos. Todos eran varones.

Solo 10 de los 75 campus espa?oles -cuatro p¨²blicos y seis privados- tienen una mujer al frente. Son el 13% del total. El porcentaje tampoco mejora en el escal¨®n inmediatamente posterior. Las catedr¨¢ticas apenas representan el 15% del total y eso que las mujeres son mayor¨ªa en las aulas desde hace m¨¢s de 20 a?os.

Elisa P¨¦rez Vera no fue consciente de que se hab¨ªa convertido en un fen¨®meno hasta que vio su cara en el telediario. "Fui una pionera", asume la primera rectora de Espa?a, que dirigi¨® la UNED entre 1982 y 1987. "Nuestro problema es plantearnos siquiera la posibilidad de competir", reflexiona la ahora magistrada del Tribunal Constitucional. "Yo lo hice porque la universidad me hab¨ªa dado mucho y yo a ella nada". P¨¦rez Vera, soltera y sin hijos, apunta otra complicaci¨®n: "La compatibilidad entre la vida familiar y la docencia no est¨¢ resuelta".

"La conciliaci¨®n y el periodo de maternidad suelen coincidir con el periodo de carrera cient¨ªfica de cualquier investigadora", a?ade Yolanda Guerrero, directora del Instituto Universitario de Estudios de la Mujer de la Universidad Aut¨®noma de Madrid. "Eso hace que tengamos menos sexenios, menos disponibilidad para estancias en el extranjero y para otros requisitos necesarios para acceder al cargo". El panorama empieza a cambiar, seg¨²n Gerrero. En la UAM ya hay un 20% de catedr¨¢ticas. Organismos como las Unidades de Igualdad, que vigilan por la paridad y est¨¢n presentes en una treintena de universidades p¨²blicas, ayudan al avance. Pero "la mejora es lenta y puede retroceder", alerta Guerrero. Flora de Pablo, de la Asociaci¨®n de Mujeres Cient¨ªficas del Centro Superior de Investigaciones Cient¨ªficas (CSIC) liga los retrocesos a la crisis. "Las mujeres entran cuando hay vacas gordas, pero su fr¨¢gil avance se resiente con las vacas flacas", seg¨²n la representante del CSIC, uno de los organismos m¨¢s avanzado en la presencia de mujeres.

Tres de las actuales rectoras (UAB, M¨¢laga y Antonio de Nebrija) se han labrado la carrera desde la base, optan por equipos paritarios y tuvieron que renunciar a otras facetas de su vida. "Yo dej¨¦ de lado una relaci¨®n m¨¢s intensa con mis tres hijos, algo dif¨ªcil de asumir", afirma Ana Ripoll, rectora de la Universidad Aut¨®noma de Barcelona.

Adelaida de la Calle, al frente de la Universidad de M¨¢laga desde 2004, explica que la situaci¨®n fue a¨²n m¨¢s dif¨ªcil cuando quiso optar a una c¨¢tedra. "Tuve que esperar a que otros compa?eros accediesen al puesto antes". De la Calle fue elegida rectora frente a tres hombres. Para ella, otra de las claves es que cada vez haya m¨¢s mujeres en puestos de responsabilidad: "Es muy importante tener modelos". A Pilar V¨¦lez, de la Antonio de Nebrija, le cost¨® asumir el ofrecimiento: "Lo primero que pens¨¦ cuando me lo propusieron es que no era para m¨ª". La oferta lleg¨® despu¨¦s de la baja de maternidad de su segundo hijo. "Pens¨¦ que no iba a poder y, al final, lo que haces es compaginar como puedes".

Una rectora en 1982 y 10 casi 30 a?os despu¨¦s demuestran que el avance no es veloz. "No es solo una cuesti¨®n de tiempo", reflexiona Flora de Pablo. "Hacen falta pol¨ªticas activas y obligatoriedad". Y pone un ejemplo: "Solo con implantar guarder¨ªas en los centros con m¨¢s de 250 personas, la carrera de las mujeres ser¨ªa m¨¢s f¨¢cil".