"Para ver espacios verdes no hay que irse a la monta?a"

Hacer las ciudades m¨¢s humanas, m¨¢s habitables, no es tarea f¨¢cil. Arquitectos y paisajistas van cada vez m¨¢s de la mano para crear peque?os oasis en esas colmenas donde reinan las prisas, el asfalto y los humos. La paisajista Kathryn Gustafson (Yakima, Washington, 1951) lleva d¨¦cadas entregada a esa tarea. "Todas las ciudades padecen el mismo problema, no tienen suficientes espacios verdes. Si queremos que sean sostenibles, la gente tiene que encontrar lo que necesita dentro", defiende convencida.

Hija de cirujano, esta terapeuta del espacio se crio cerca de las Monta?as Rocosas, en plena naturaleza. Estudi¨® Artes Aplicadas en Washington, dise?o textil en Nueva York y trabaj¨® en Par¨ªs como dise?adora de moda. Su salto al paisajismo fue el viraje m¨¢s importante de su vida. Sus primeros trabajos fueron para el Gobierno franc¨¦s, pero tambi¨¦n trabaj¨® en las sedes de multinacionales como Shell y L'Or¨¦al en el pa¨ªs galo.

La paisajista dise?a un parque de 25 hect¨¢reas en el centro de Valencia

Distinguida por la Sociedad Americana de Arquitectos Paisajistas y con despacho en Londres y Seattle, viaja a menudo a Valencia, donde lidera al equipo encargado de dise?ar y ejecutar el Parque Central de Valencia, 25 hect¨¢reas en pleno centro, dividido durante d¨¦cadas por el ferrocarril. Para desayunar solo quiere t¨¦. Y como no acaba de entenderse con el camarero, se levanta y le se?ala el tarro de t¨¦ a la canela. Lo pide sin az¨²car ni edulcorante. La reposter¨ªa no le tienta.

Cuando empieza a trabajar en un proyecto como este le encanta recorrer a pie el sitio, hacer fotos y observar a la gente. Empaparse del entorno. Y le gusta hacerlo sola. "A veces tengo demasiada gente a mi alrededor", confiesa. Su trabajo, cuenta, es reducir en lo posible el ruido de las ciudades, pacificar su tr¨¢fico, reducir los humos... Para ella es muy importante crear espacios para sentir. As¨ª, en el parque ha previsto huertos ecol¨®gicos cuya cosecha se cocine en los restaurantes cercanos y ha distribuido placas solares para hacerlo autosuficiente. "La regla n¨²mero uno de cualquier espacio es hacerlo sostenible".

Le gusta Espa?a porque la gente est¨¢ mucho en la calle. Aun as¨ª opina que los latinos no sacan todo el partido al espacio. "Tal vez porque se tiende a decir esto es m¨ªo, aquello tambi¨¦n...". Para su proyecto en Valencia ha pedido, por ejemplo, que si se cierra por la noche no sea con altas vallas.

Los pol¨ªticos tienden a veces a reglamentar con exceso el uso y disfrute de los espacios p¨²blicos. Pero la actitud est¨¢ cambiando en todo el mundo, apunta Gustafson -con proyectos como el Memorial de Diana de Gales en Londres y el Parque del Milenio en Chicago-. "Por el paseo Mar¨ªtimo de Beirut encuentras a mucha gente corriendo, algo impensable hace 20 a?os". Hay un nuevo concepto de salud urbana: "Hay que andar, correr, ir en bici, participar y usar m¨¢s la ciudad", apunta. Los pol¨ªticos lo ven y se est¨¢n adaptando. "Las ciudades necesitan m¨¢s zonas de ocio, espacios flexibles que permitan a los ciudadanos ser m¨¢s creativos", argumenta.

Su soluci¨®n para el medio urbano contempor¨¢neo es clara: "Para encontrar espacios verdes, la gente no tiene por qu¨¦ irse a la monta?a. Todo tiene que estar en la ciudad". Y subraya c¨®mo las grandes urbes reaccionan a esta tendencia. "Por ejemplo, la actitud de los pol¨ªticos de Singapur es: 'No queremos un jard¨ªn en la ciudad, sino que la ciudad sea un jard¨ªn'. Es muy inteligente", concluye.