Sanidad lidera los recortes para atajar el gasto del sistema de salud
Las prestaciones suponen el 35% de los presupuestos auton¨®micos - Ninguna comunidad, salvo Catalu?a, ha elaborado un plan de ahorro espec¨ªfico
El Sistema Nacional de Salud es un gato demasiado fiero para que alguien se atreva a ponerle el cascabel de los recortes. O, por lo menos, para que lo haga p¨²blicamente. Desde que acab¨® la descentralizaci¨®n en 2002, las competencias son auton¨®micas, pero, salvo en Catalu?a, no ha habido ning¨²n consejero que haya explicado d¨®nde meterle la tijera al servicio mejor valorado por los ciudadanos. Y la excepci¨®n catalana lo es solo a medias, con las medidas congeladas ante las protestas, pendiente de que otras comunidades se unan despu¨¦s de las elecciones del 22-M.
El pastel que se maneja no es peque?o: se trata, seg¨²n datos de 2010 del Ministerio de Sanidad, de una partida que suma 63.768 millones de euros, un 6,1% del PIB. Pero ante el rechazo de la opini¨®n p¨²blica a los recortes, las comunidades han encontrado una f¨®rmula: ampararse en el Gobierno central. Ellas proponen, acuerdan, y es el Ministerio de Sanidad el que da la cara. Es lo que pas¨® hace un a?o en el Consejo Interterritorial que acord¨® las medidas de ahorro.
La ca¨ªda en los costes se estima en 2.500 millones de euros en un a?o
De ellas, la primera afectaba al personal. Aunque m¨¦dicos y enfermeras no son funcionarios, su patrono es el mismo: las comunidades (con la excepci¨®n del Ingesa, que gestiona la sanidad de Ceuta y Melilla). Y por eso les lleg¨® el recorte del 5% del sueldo que afect¨® a los otros empleados p¨²blicos. Teniendo en cuenta que los gastos de personal son el 43,4% del sanitario, ello arroja 27.675,3 millones en sueldos. Luego ese 5% implica un ahorro para las comunidades -que son las que pagan- de 1.384 millones.
La segunda medida fue crear una central de compras para conseguir mejores precios de los proveedores. El sistema todav¨ªa no ha dado resultados, porque ha habido que crear una figura nueva. Su aprobaci¨®n fue el 8 de abril pasado y, en principio, va a empezar con la compra de vacunas para la gripe del a?o que viene. Aunque la idea fue apoyada por unanimidad hace un a?o, solo ocho de las 17 comunidades se han adscrito: Arag¨®n, Asturias, Baleares, Cantabria, Castilla y Le¨®n, Comunidad Valenciana, Extremadura y Madrid.
No hay un sesgo pol¨ªtico en las que se han apuntado. Hay tres gobernadas por el PP, y falta alguna de las m¨¢s destacadas entre las gobernadas por el PSOE, como Andaluc¨ªa. Fuentes de Sanidad le quitan importancia a estas ausencias, y explican que parte de las que no est¨¢n ya ten¨ªan contratos bienales con los proveedores, y que otras, como Andaluc¨ªa, consideran que pueden conseguir buenos precios solas. El ahorro aproximado de esta iniciativa ser¨¢ de 3,3 millones de euros, seg¨²n el ministerio, aunque puede aumentar si se apuntan m¨¢s comunidades o si se extiende la compra centralizada a otros productos (se trabaja en los contratos con absorbentes -pa?ales- para adultos incontinentes).
Queda la partida m¨¢s jugosa. Dos reales decretos aprobados el a?o pasado supusieron una rebaja del precio de los medicamentos y productos sanitarios, y un endurecimiento del c¨¢lculo de los precios de referencia (el m¨¢ximo subvencionado), que ha pasado a ser el del f¨¢rmaco m¨¢s barato dentro de los que tienen gen¨¦rico, en vez de la media de los tres m¨¢s baratos como era antes de marzo. Los resultados han sido fulminantes sobre la factura farmac¨¦utica (lo que pagan las Administraciones por los medicamentos que los ciudadanos compran con receta). En total, si se toman los datos de abril de 2010 a marzo de 2011, la compra de medicamentos con receta ha supuesto para las comunidades 11.895 millones de euros, mientras que en el mismo periodo de los 12 meses anteriores (de abril de 2009 a marzo de 2010) ascendi¨® a 12.619 millones. Esto quiere decir que el ahorro ha sido, como poco, de 724 millones (un 5,74%).
Esta cifra es solo seg¨²n el c¨¢lculo m¨¢s conservador, ya que presupone que el gasto farmac¨¦utico de 2011, antes de las medidas, iba a ser igual al de 2010. Teniendo en cuenta que siempre, hasta ahora, hab¨ªa habido un aumento, el ahorro real es mayor. Por ejemplo, si se considera que entre 2011 y 2010 el incremento hubiera sido del 3%, el ahorro llegar¨ªa a los 1.100 millones.
Y a esta cifra le falta la de las compras hechas por los hospitales. Teniendo en cuenta los datos de la patronal Farmaindustria de que las ventas a centros hospitalarios son aproximadamente el 40% de lo que venden a farmacias, eso querr¨ªa decir que el ahorro a las comunidades por los recortes ser¨ªa de otros 300 millones aproximadamente. As¨ª que en total puede hablarse de un recorte de unos 1.200 o 1.300 millones. El Ministerio de Sanidad es m¨¢s espec¨ªfico, y en abril anunciaba -aunque sin dar el desglose- que el gasto farmac¨¦utico hab¨ªa bajado en 1.275 millones en 10 meses. Si se le suma el ahorro en sueldos, puede hablarse de un recorte de unos 2.500 millones. ?Es mucho? En t¨¦rminos absolutos, seguro. Pero en t¨¦rminos relativos representa alrededor del 5% del gasto sanitario, y menos del d¨¦ficit que aduce que tiene solo Catalu?a.
Recetas en el punto de mira
Puestos a recortar, las comunidades prefieren hacerlo en las compras de medicamentos. Galicia fue primera que lo intent¨®, estableciendo un cat¨¢logo de productos de los que solo pod¨ªa recetarse el m¨¢s barato. El sistema era, en el fondo, parecido al que establece el Ministerio de Sanidad cuando fija los precios de referencia, pero los medicamentos afectados no coincid¨ªan. El resultado era que ambos sistemas se superpon¨ªan, con lo que los gallegos ten¨ªan menos acceso a medicamentos que el resto de la poblaci¨®n del pa¨ªs. El Ministerio de Sanidad adujo esa desigualdad para recurrirlo, y el Constitucional, al admitirlo a tr¨¢mite, paraliz¨® su implantaci¨®n.
Castilla-La Mancha estudia un sistema paralelo de recetas. Unos productos (los m¨¢s baratos) se podr¨ªan prescribir por el sistema informatizado que tienen los m¨¦dicos de primaria (es una de las comunidades m¨¢s avanzadas en receta electr¨®nica). Los otros, m¨¢s caros, necesitan que se receten en papel, lo que es una manera de mantenerlos en la cartera, pero de desincentivar su uso.
Andaluc¨ªa tambi¨¦n tiene en marcha un sistema novedoso: sacar a subasta el suministro de algunos medicamentos y productos sanitarios. La idea es que, entre productos equivalentes, ganar¨¢ quien lo oferte m¨¢s barato. Esto implica, en la pr¨¢ctica, ir m¨¢s all¨¢ del sistema de precios de referencia en cuanto a la disminuci¨®n de precios. Habr¨¢ que ver si Sanidad lo acepta.
Cifras del sistema
- Gasto total. En 2010, la atenci¨®n sanitaria consumi¨® 63.768 millones de euros, un 6,1% del PIB.
- Personal. El gasto en n¨®minas es la partida m¨¢s importante: un 43,4% del total (27.675 millones). La rebaja del 5% de los sueldos supuso, por tanto, un ahorro de 1.384 millones.
- Gasto farmac¨¦utico. En los 12 meses que van de abril de 2010 a marzo de 2011 la subvenci¨®n de recetas (medicamentos despachados en farmacias) supuso 11.895 millones de euros, un 5,7% menos que los 12.619 millones de un a?o antes.
- Hospitales. Representan aproximadamente un 40% del gasto farmac¨¦utico. El ahorro en esta partida ha sido de unos 300 millones.
- Total. Sanidad calcula que ha ahorrado 1.275 millones en medicamentos.
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