Sentada contra la corrupci¨®n

Con los disturbios de Barcelona en la retina, el movimiento 15-M en Valencia acudi¨® ayer a las Cortes para protestar contra la investidura de Francisco Camps como presidente de la Generalitat y la corrupci¨®n en general. A diferencia de los enfrentamientos registrados el mi¨¦rcoles en la capital catalana, la polic¨ªa apenas tuvo que intervenir en Valencia. Solo al final de la ma?ana, cuando los indignados trasladaron su protesta a la Bolsa, una decena de agentes forzaron el desalojo, asunto que disgust¨® y caus¨® alg¨²n momento de tensi¨®n. Por lo dem¨¢s, el esfuerzo y la insistencia de los coordinadores por protestar sentados y mantener un tono pac¨ªfico cuaj¨® y perdur¨® hasta la tarde.

El ¨²nico incidente leve tuvo lugar en el desalojo de la Bolsa de Valencia

Pese al aviso de los indignados, nadie acamp¨® frente a las Cortes el mi¨¦rcoles por la noche. En un principio, la acampada ten¨ªa previsto trasladarse de la plaza del Ayuntamiento a las calles adyacentes al Parlamento auton¨®mico, como el jueves pasado. All¨ª esperar¨ªan a los diputados. Sin embargo, dado el per¨ªmetro que hab¨ªa establecido la polic¨ªa ya a primera hora de la noche, nadie apareci¨® hasta ayer por la ma?ana. A las 10.00, unos 200 ciudadanos gritaban ya contra la corrupci¨®n en los accesos a la C¨¢mara, principalmente en las calles Navellos y Muro de Santa Ana. Esta ¨²ltima fue escenario de las cargas policiales del jueves pasado. Entonces, agentes de la Polic¨ªa Nacional e indignados se enfrentaron con un saldo de 18 heridos entre ambas partes.

Pasado el mediod¨ªa, el n¨²mero de manifestantes rebasaba ya el medio millar. La concentraci¨®n se divid¨ªa entre los diferentes accesos a las Cortes para interceptar eventuales salidas de diputados. Los indignados apuntaban a los implicados en las tramas de corrupci¨®n G¨¹rtel y Brugal. El grupo parlamentario del PP tiene diez diputados imputados o implicados en casos de corrupci¨®n.

Durante toda la ma?ana y buena parte de la tarde, la presencia policial result¨® masiva. Decenas de agentes de las polic¨ªas Nacional y Auton¨®mica custodiaron todas las calles que conduc¨ªan a las Cortes. Los indignados, por su parte, recorr¨ªan el circuito que exig¨ªa el per¨ªmetro policial incansablemente. En el lado de la calle Navellos, donde m¨¢s ciudadanos se concentraban, las proclamas contra la corrupci¨®n gastaban iron¨ªa al referirse a los casos G¨¹rtel y Brugal y a la versi¨®n que ha trascendido de los enfrentamientos del mi¨¦rcoles en Barcelona. En vez de "Vamos a contar mentiras", se entonaba: "Aqu¨ª no hay infiltrados, aqu¨ª no hay infiltrados, todos somos perroflautas, tralar¨¢...". De hecho, ayer se habl¨® mucho de la ciudad condal y del papel que hab¨ªan jugado los Mossos d'Esquadra que hab¨ªan acudido a las protestas de paisano. Tanto tem¨ªa el 15-M que apareciese la violencia que algunos comentarios apenas escapaban a la paranoia. Cuando alguien gritaba en contra de la polic¨ªa, se ped¨ªa silencio; cuando otro alguien se acercaba demasiado a la valla con actitud desafiante, se le ped¨ªa que retrocediera. As¨ª todo el d¨ªa menos en la Bolsa. Al tratarse de una acci¨®n sorpresa, los indignados llegaron antes que los furgones y se sentaron en el hall del complejo con la intenci¨®n de leer un manifiesto. Sin embargo, la polic¨ªa les desaloj¨® de inmediato, de ah¨ª que creciera moment¨¢neamente la tensi¨®n.

Por la tarde, apenas quedaba una decena de manifestantes cerca de las Cortes. El calor y la falta de alicientes m¨¢s all¨¢ de lo expresado durante la ma?ana desinfl¨® la concentraci¨®n y la emplaz¨® a la manifestaci¨®n del domingo por la tarde, que se espera sea masiva. Las tiendas volvieron a vender y los paseantes a pasear. Los comerciantes vivieron las ¨²ltimas horas del d¨ªa con alivio. Otro d¨ªa m¨¢s con la calle cortada y la caja se hubiese resentido seriamente. Ayer ya se plantearon reclamar las p¨¦rdidas del d¨ªa.