Abderrahman ben Lahmar, profesor y militante dem¨®crata
El 4 de julio falleci¨® en Tetu¨¢n (Marruecos) el profesor, hispanista y militante dem¨®crata Abderrahman ben Lahmar. Nacido en la excapital del Protectorado espa?ol un a?o despu¨¦s de la independencia de Marruecos, milit¨® desde la adolescencia en el Sindicato Nacional de Alumnos creado por la organizaci¨®n clandestina marxista Ila Al Amam, en la que lleg¨® a ocupar cargos de relevancia hasta su desmantelamiento por la polic¨ªa pol¨ªtica de Hassan II. Profesor de filosof¨ªa y ¨¢rabe en escuelas p¨²blicas secundarias de Casablanca, Sal¨¦ y Larache, regres¨® a su ciudad natal, en donde prosigui¨® sus actividades culturales centradas en torno al averro¨ªsmo y la espiritualidad suf¨ª en las dos orillas del Mediterr¨¢neo. A mediados de los noventa, fund¨® y fue redactor jefe de la revista biling¨¹e Cuadernos del Norte, una publicaci¨®n independiente que marc¨® un hito en el renacimiento de la cultura espa?ola en Marruecos. A ra¨ªz de ello, fue a entrevistarme a Marraquech con su amigo y colaborador, el tambi¨¦n hispanista Abdel Hamid Sarraj. Desde entonces, sol¨ªa visitarles en Tetu¨¢n durante mis estancias veraniegas en T¨¢nger. Recuerdo que una vez, despu¨¦s de haber almorzado con ellos, Abderrahman insisti¨® en que fuera a tomar el caf¨¦ a su casa, pues su padre, me dijo, quer¨ªa interpretar una composici¨®n musical en mi honor. Al llegar a su domicilio y saludar a la familia, hall¨¦ a un anciano acomodado en un sof¨¢ que me sonre¨ªa en silencio. De pronto, tom¨® el la¨²d que acariciaba en su regazo y, en vez de interpretar como yo cre¨ªa m¨²sica andalus¨ª, hizo sonar para m¨ª los compases del Himno de Riego. Confieso que la escena me conmovi¨® y no se me borrar¨¢ de la memoria.
Contribuy¨® al renacimiento de la cultura espa?ola en Marruecos
Abderrahman Lahmar continu¨® su labor de cr¨ªtico literario, sin olvidar por ello su compromiso pol¨ªtico, con sus homenajes a Abraham Serfaty y a los militantes sindicalistas ATIME (Asociaci¨®n de Trabajadores Marroqu¨ªes en Espa?a). Fue, asimismo, el director del festival cultural veraniego de Ued La¨², y organiz¨® la presentaci¨®n de mi libro Espa?a y sus Ejidos en el Centro Cultural Tetuan¨ª Abdeljalek Torres.
El pasado mes de abril, a mi regreso de El Cairo, le telefone¨¦ para agradecerle su traducci¨®n de mis art¨ªculos sobre la primavera ¨¢rabe. Me dijo que padec¨ªa de c¨¢ncer, y cuando me compromet¨ª a visitarle a mi llegada a T¨¢nger a finales de junio, se limit¨® a decir: "Si es que a¨²n estoy aqu¨ª".
Quiero compartir con estas l¨ªneas el dolor de su familia y de todos los dem¨®cratas y amigos de Tetu¨¢n.
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