Alemania condiciona la cumbre sobre Grecia a un acuerdo previo
La indecisi¨®n agita de forma peligrosa a la zona euro
La UE sigue atascada, incapaz de encontrar un acuerdo para el segundo rescate que precisa Grecia. El alargamiento de la indecisi¨®n agita peligrosamente a toda la zona euro, especialmente a Espa?a e Italia, que han visto encarecer la financiaci¨®n de su deuda incesantemente. La llave contin¨²a en manos de Alemania, que ha condicionado la celebraci¨®n de una cumbre para encontrar soluciones al problema griego a que previamente se alcance un acuerdo. El encuentro de los l¨ªderes de los 17 pa¨ªses de la moneda ¨²nica hab¨ªa sido promovido por el presidente del Consejo Europeo, Herman van Rompuy, para recomponer el clima de desconcierto generado el pasado lunes ante el fracaso de los ministros para definir la contribuci¨®n de los bancos en este segundo paquete de ayuda.
"Los pr¨®ximos d¨ªas ser¨¢n especialmente cruciales", admite Papandreu
La canciller alemana, Angela Merkel, declar¨® ayer en Abuja (Nigeria) que "por lo que se refiere a la celebraci¨®n de una cumbre de jefes de Estado o de Gobierno de la zona euro, creo que la condici¨®n previa ser¨ªa que seamos capaces de tomar una decisi¨®n y finalizar el plan de ayuda a Grecia". El jefe del Gobierno en funciones de B¨¦lgica, Ives Leterme, hizo referencia en su parlamento a "una decisi¨®n (sobre Grecia) en los pr¨®ximos d¨ªas cuando se celebra la reuni¨®n de los jefes de Estado o de Gobierno". El primer ministro griego, Yorgos Papandreu, reconoci¨® que "los pr¨®ximos d¨ªas ser¨¢n particularmente cruciales".
Mientras, los responsables del Tesoro de los Estados miembros, que integran el Comit¨¦ Econ¨®mico y Financiero europeo tratan de hallar la f¨®rmula que permita una contribuci¨®n de la banca en el segundo paquete, mediante la refinanciaci¨®n de una parte de la deuda a su vencimiento, sin que ello pueda interpretarse como una suspensi¨®n de pagos parcial.
La contribuci¨®n de los bancos, aseguradoras y fondos de pensiones al segundo rescate por una cuant¨ªa de unos 30.000 millones ha sido exigida por Alemania, Finlandia y Holanda para aliviar la carga a sus contribuyentes. Los bancos deber¨ªan comprometerse a refinanciar de nuevo los bonos a medida que llegaran a su vencimiento. El BCE se mostr¨® siempre en contra por temor a que la imposibilidad de los acreedores de obtener su dinero cuando llegara su amortizaci¨®n fuera considerada default (suspensi¨®n de pagos). El banco emisor del euro teme que esta consideraci¨®n pudiera aplicarse a los bonos de los otros pa¨ªses con problemas y propagar una debacle en toda la zona euro "peor que la de Lehmann Brothers".
Los t¨¦cnicos de los distintos pa¨ªses, la Comisi¨®n y el BCE trabajan "sobre 36 modelos" de participaci¨®n de los bancos en la b¨²squeda de alguna que sea aceptada por las agencias de calificaci¨®n y no implique la suspensi¨®n de pagos.
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