Una iran¨ª cegada con ¨¢cido renuncia a la ley del Tali¨®n

La presi¨®n internacional ha logrado que Ameneh Bahram¨ª, una mujer iran¨ª a la que un pretendiente despechado dej¨® ciega al arrojarle ¨¢cido a la cara hace siete a?os, renunciara ayer en el ¨²ltimo momento a la ley del Tali¨®n. De acuerdo con la legislaci¨®n iran¨ª, el responsable de tal atrocidad, Majid Mohaved¨ª, hab¨ªa sido condenado a sufrir la misma pena que infligi¨® a su v¨ªctima; y solo ella pod¨ªa pedir que se le conmutara. Bahram¨ª solicita a cambio que el agresor la compense con 150.000 euros para financiar su tratamiento m¨¦dico.

"Todo estaba listo para llevar a cabo la pena sobre los ojos de Majid, pero Ameneh le ha perdonado cuando est¨¢bamos a punto de ejecutarla", anunci¨® el fiscal general de Teher¨¢n, Abbas Yafar¨ª Dolatabad¨ª, citado por la agencia semioficial Isna. El responsable judicial alab¨® la decisi¨®n de la mujer como "un acto valiente". La televisi¨®n iran¨ª mostr¨® im¨¢genes de la mujer en una sala de hospital con su agresor arrodillado a la espera de que ella le echara unas gotas de ¨¢cido en los ojos. Mohaved¨ª lloraba y dec¨ªa que Bahram¨ª hab¨ªa sido "muy generosa".

La mujer, de 32 a?os, fue agredida por rechazar a un pretendiente

Para salir de prisi¨®n, el hombre tendr¨¢ que pagarle el tratamiento m¨¦dico

"Durante siete a?os he tratado de conseguir que se cumpla la ley del Tali¨®n

[qisas en la ley isl¨¢mica], pero hoy he decidido perdonarle", declar¨® Bahram¨ª. La mujer dio a entender que el revuelo internacional despertado por su caso hab¨ªa pesado en su decisi¨®n. "Daba la impresi¨®n de que todo el mundo estaba esperando a ver lo que hac¨ªamos", se?al¨®.

Bahram¨ª, de 32 a?os, perdi¨® la vista en los dos ojos en 2004, cuando Mohaved¨ª, despechado porque hab¨ªa rechazado sus insistentes propuestas de matrimonio, le destroz¨® la cara al atacarla con ¨¢cido. El agresor fue detenido y, cuatro a?os despu¨¦s, un tribunal le conden¨® a ser privado de la vista, en aplicaci¨®n del b¨ªblico "ojo por ojo y diente por diente" que la interpretaci¨®n iran¨ª de la shar¨ªa (ley isl¨¢mica) mantiene de forma literal.

La crueldad de la condena desat¨® una campa?a de Amnist¨ªa Internacional y otras organizaciones de defensa de los derechos humanos. El r¨¦gimen iran¨ª, cuya imagen est¨¢ por los suelos tras la represi¨®n de las protestas por la reelecci¨®n de Mahmud Ahmadineyad y la condena a morir lapidada contra Sakineh Ashtian¨ª, se ha mostrado sin duda sensible a esa movilizaci¨®n. Las autoridades judiciales suspendieron la ejecuci¨®n de la sentencia el pasado 14 de mayo sin explicar los motivos y, desde entonces, han presionado a Bahram¨ª para que perdonara a su agresor, seg¨²n ha relatado ella misma.

A lo que no renuncia, y as¨ª lo ha dicho claramente en varias ocasiones, es a lo que en la legislaci¨®n isl¨¢mica se conoce como "precio de sangre", una compensaci¨®n econ¨®mica que le resarza del sufrimiento que ha padecido. Bahram¨ª, que lleva cerca de una veintena de operaciones y cuyo rostro a¨²n est¨¢ desfigurado, pide que Mohaved¨ª le pague el tratamiento que necesita. Calcula que costearlo suponen 150.000 euros.

Mientras no pueda cumplir ese requisito, el hombre no podr¨¢ salir de la c¨¢rcel, donde ya ha cumplido siete de los 12 a?os a los que fue condenado. Su abogado ha dicho que el precio de sangre fijado por Baharami supone una cifra inalcanzable para ¨¦l. El ¨²nico activo del que dispone su familia, argumenta, es una casa en Teher¨¢n.

Por otra parte, ayer tambi¨¦n se celebr¨® en la capital iran¨ª la tercera y ¨²ltima vista del juicio contra tres excursionistas estadounidenses que justo hace dos a?os fueron detenidos en la frontera con Irak. Shane Bauer, Josh Fattal y Sarah Shourd (que fue liberada bajo fianza el pasado septiembre) han defendido desde el principio que se extraviaron cuando hac¨ªan senderismo. Pero las autoridades iran¨ªes, que no desaprovecha cualquier ocasi¨®n de azuzar sus malas relaciones con EE UU, les acusan de entrada ilegal en el pa¨ªs y de espionaje, un cargo que puede castigarse con la pena de muerte y que los tres han rechazado.

Su abogado, Masoud Shafi, que no hab¨ªa podido reunirse con ellos desde su anterior comparecencia ante el juez el pasado 6 de febrero, expres¨® su confianza en que haya una sentencia favorable en el plazo de una semana. Amnist¨ªa Internacional ha denunciado el proceso de "parodia de justicia". En un signo de las intenciones del r¨¦gimen de Teher¨¢n, la televisi¨®n estatal volvi¨® a airear ayer el caso de varios iran¨ªes detenidos por diversas causas en EE UU.