Denominaciones
As¨ª como a los militantes y simpatizantes del PNV los denominamos peneuvistas, a los de PSE socialistas o sociatas y a los del PP peperos, pienso yo que alg¨²n tipo de denominaci¨®n tendremos que aplicarles a los militantes de Bildu. De momento, oscilamos entre referirnos a ellos como "los de Bildu" o sumirlos en un marasmo en el que se mezclan abertzales, batasunos y t¨¦rminos menos agradables. Y no puede ser, de modo que me he puesto a la tarea, y sin apenas esforzarme me han asaltado dos denominaciones, dos, entre las que me cuesta decidirme. Bilduinos, esta es una, fruto de una derivaci¨®n en la que a la ra¨ªz "bildu" le a?adimos un sufijo muy com¨²n para formar gentilicios, como, por ejemplo, en "bilba¨ªno" -con perd¨®n- o tambi¨¦n en "beduino", palabra en la que el sufijo completa a una ra¨ªz de origen ¨¢rabe -bedaui o badawi- que significa morador del desierto. Es un hecho que hay bilba¨ªnos que son adem¨¢s bilduinos, pero me cuesta m¨¢s ver la posible relaci¨®n de estos ¨²ltimos con los beduinos, ya que el nomadismo de estos no parece que les vaya mucho a aquellos, devotos de la fijaci¨®n hasta en las ideas. Queda, eso s¨ª, lo del desierto, o basamortu, sobre lo que volveremos.
La otra denominaci¨®n que me abord¨® para referirme a ellos fue la de bildularis. Recordar¨¦ que el nuevo sufijo figura en palabras como txistulari, txirrindulari o segalari, y se?ala al agente activo de una pr¨¢ctica que viene indicada en la ra¨ªz. Bildularis ser¨ªan, por tanto, los que se dedican a hacer "bildu", esto es, a recoger, unir, actividad que parece caracterizar a los militantes de la nueva formaci¨®n. Es lo que subrayaba Mikel Ormazabal en este peri¨®dico cuando hablaba de contagio o colonizaci¨®n de los diversos componentes de la coalici¨®n por parte de los bildularis y sentenciaba que "Bildu, m¨¢s que una suma de sensibilidades pol¨ªticas, demuestra ser una pieza monol¨ªtica". Af¨¢n por unir, y pasar el rodillo, que se puede extraer tambi¨¦n de algunas declaraciones de Mariano ?lava sobre las f¨®rmulas de participaci¨®n en las pr¨®ximas elecciones generales. "Trabajaremos por la comuni¨®n de fuerzas", dec¨ªa ?lava con las miras puestas en Aralar y el PNV. Luego, en un sorprendente ejercicio de universalismo bedaui, apuntaba la posibilidad de que de que s¨®lo acudieran al Congreso para aquellos asuntos que afecten al Pa¨ªs Vasco.
Y nos queda el desierto, o no saben no contestan. Los bilduinos de San Sebasti¨¢n dicen que no hay dinero y que se acabaron los macroproyectos, hasta los que salen gratis. Guerra a lo macro, y defensa de lo euskaldun y popular. ?Puede plantearse si una estaci¨®n de autobuses es euskaldun y popular o no lo es? No, pues entonces no es que no se haga, es que ni se piensa en ella, y punto. La polic¨ªa del desierto s¨®lo ha de actuar all¨ª donde se ofrecen alternativas al principio soberano. All¨ª donde cualquier iniciativa pueda no atenerse a la idea fija. Para unir hay que limpiar, hay que purificar. ?Es eso lo que nos espera?
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