Los coqueteos burs¨¢tiles de la familia Playboy
El yerno de Hugh Hefner, acusado de usar informaci¨®n privilegiada
Durante dos d¨¦cadas el imperio de las conejitas Playboy estuvo dirigido por una mujer, Christie Hefner, hija de Hugh Hefner, el legendario fundador de una revista que marc¨® el siglo XX y que creci¨® salvajemente como negocio dentro de la industria del porno hasta que la consolidaci¨®n de Internet hizo que la empresa se tambaleara. Para entonces, mediados de la pasada d¨¦cada, tanto Hefner como su hija ya deb¨ªan de tener abultadas cuentas bancarias, pero eso no fren¨® a William A. Marovitz, esposo de Christie, a la hora de tratar de ara?ar algo de calderilla aprovechando sus influencias. As¨ª lo cree la SEC, el regulador burs¨¢til estadounidense, que ayer acus¨® a Marovitz de utilizar informaci¨®n privilegiada procedente de su esposa para ganar 100.000 d¨®lares (casi 70.000 euros) en la Bolsa.
El valor actual del imperio alcanza los 140 millones de euros
Su esposa le hab¨ªa advertido que no tocara las acciones de la firma familiar
Teniendo en cuenta que el valor actual del imperio Playboy supera los 200 millones de d¨®lares (casi 140 millones de euros) y que el principal propietario es el padre de su mujer, resulta cuanto menos chocante que Marovitz se arriesgara a ser cazado para ganar apenas unos miles de d¨®lares. Sin embargo, es lo que hizo varias veces entre 2004 y 2009, seg¨²n la SEC. Su propia esposa le hab¨ªa advertido que no pod¨ªa vender ni comprar acciones de Playboy mientras ella estuviera en el cargo de consejera delegada, un puesto que abandon¨® en 2008, aunque sigui¨® asesorando a la empresa.
El corredor de Bolsa que manejaba sus acciones tambi¨¦n le hizo la misma advertencia. Sin embargo, seg¨²n la SEC, Marovitz se ocup¨® personalmente de hacer negocios con acciones de Playboy y utiliz¨® informaci¨®n que solo la familia pod¨ªa tener. En concreto, se le acusa de haber comprado 9.000 acciones en noviembre de 2009 a 2,77 d¨®lares por acci¨®n (casi dos euros), mientras la empresa estaba en negociaciones para ser adquirida por Iconix Brand Group, algo que se supo p¨²blicamente dos d¨ªas m¨¢s tarde y que dobl¨® el precio de esas mismas acciones.
Un mes despu¨¦s las conversaciones se interrumpieron y antes de que se corriera la voz, Marovitz vend¨ªa dos tercios de sus activos. Seg¨²n publicaba ayer la prensa, Marovitz, que fue senador en el Estado de Illinois, ha accedido a pagar 167.000 d¨®lares (unos 116.000 euros) para compensar sus pecados.
Curiosamente el esc¨¢ndalo se ha destapado la misma semana en que las conejitas Playboy vuelven a dar de qu¨¦ hablar. Algunos periodistas ya han podido ver los primeros cap¨ªtulos de la serie The Playboy Club. Este nuevo programa de la cadena NBC se basa en las historias personales de las mujeres que trabajaron en el primer Playboy Club creado por Hefner en los a?os sesenta en Chicago, donde las mujeres serv¨ªan copas vestidas de conejitas.
Los comentarios period¨ªsticos han reavivado el debate entre los creadores, que defienden que es una serie importante para las mujeres porque muchas de las que all¨ª trabajaron despu¨¦s hicieron carrera (desde la periodista Barbara Walters a la modelo Lauren Hutton o la cantante Debbie Harry); y las asociaciones de padres y grupos religiosos, que chillan y patalean ante la perspectiva de su estreno en septiembre.
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