?ltimo vuelo del Bar¨®n Rojo
Tras 30 a?os, la formaci¨®n original se separa y hace recuento de su trayectoria
La noticia escueta dir¨ªa as¨ª: la formaci¨®n primigenia de Bar¨®n Rojo cierra su gira del 30? aniversario en el madrile?o Palacio Vistalegre, el 22 de octubre. Pero detr¨¢s se adivinan las glorias y miserias del rock espa?ol. Armando y Carlos de Castro -propietarios del nombre- retomar¨¢n su formaci¨®n B, otro Bar¨®n Rojo que recorre un circuito modesto con dos m¨²sicos contratados.
Jos¨¦ Luis Campuzano, al¨ªas Sherpa, bajista y cantante original, preferir¨ªa que el cuarteto cl¨¢sico continuara unido: "Toco parte de ese repertorio con mi banda pero, claro, no tengo el mismo tir¨®n que cuando salgo con Bar¨®n". Hermes Calabria, el baterista uruguayo que tambi¨¦n grab¨® Volumen brutal y dem¨¢s robustos elep¨¦s de los ochenta, se muestra flem¨¢tico: imparte clases en una academia de m¨²sica, tiene una vida regulada. Pero incluso Hermes sufre retortijones cuando divisa en un aeropuerto el avi¨®n de Iron Maiden: "Me dio envidia. Record¨¦ que Bruce Dickinson, su cantante, se subi¨® al escenario con nosotros en Londres, en 1982. Perdimos aquel tren".
"Nos negamos a tocar para el PSOE en el 82 y lo pagamos"
Ellos mantienen una idea elevada de lo que significa tocar rock
Aunque Bar¨®n gir¨® por Europa y Am¨¦rica, no hubo continuidad. Sherpa lamenta tantas oportunidades perdidas: "Zafiro, nuestra discogr¨¢fica, gan¨® much¨ªsimo pero nunca arriesg¨®. Pudimos haber grabado un directo en el Budokan, en Jap¨®n; terminamos en el Pabell¨®n del Real Madrid, que no es lo mismo. Lleg¨® una oferta para telonear internacionalmente a AC/DC. Hubiera costado siete millones de pesetas, una minucia a cambio de entrar en nuevos mercados".
?Podemos decir que se palpa cierto rencor? S¨ª: el grupo apareci¨® en 1981, cuando el foco medi¨¢tico apuntaba a la movida. No encajaban est¨¦ticamente y se sintieron ninguneados. Les cortej¨® Javier Moscoso, ministro de la Presidencia con Felipe Gonz¨¢lez, que cre¨ªa ver all¨ª "una protesta social, heredera de la protesta pol¨ªtica de los cantautores". A la larga, se sintieron maltratados: "En la campa?a de 1982, el PSOE nos ofreci¨® actuar en 40 actos electorales. Nos negamos y lo pagamos: cuanto m¨¢s discos vend¨ªamos, menos conciertos de aquellos que patrocinaban los Ayuntamientos".
Evocan tambi¨¦n algunas inmundas negociaciones. TVE les propuso grabar un especial... si consegu¨ªan que reapareciera en el programa Marisol, entonces artista de su misma compa?¨ªa. Y siempre, la sensaci¨®n de marginaci¨®n. Sherpa pone otro ejemplo: "Coincidimos en Bogot¨¢ con Serrat, Hombres G, Roc¨ªo Jurado y Perales. Resulta que ellos tocaban en teatros o salas de fiesta; nosotros en la plaza de toros. El corresponsal nos hizo un reportaje para el Telediario La embajada musical de Espa?a en Colombia. Al d¨ªa siguiente, lo vimos en TVE Internacional ?y se mencionaba a todos menos a Bar¨®n Rojo! ?No deb¨ªamos sentirnos paranoicos?".
En su cancionero abundaban los temas que presentaban en t¨¦rminos ¨¦picos la resistencia de "los rockeros". Cuesta encontrar letras amorosas en su obra, mientras proliferan las cr¨ªticas sociales, las vi?etas urbanas, los himnos generacionales. Sherpa lo explica como "fruto de la mala hostia". "Encontrabas taxistas que no te paraban, te insultaban por llevar pelo largo. Cuando entrabas en un banco, se te pon¨ªa detr¨¢s el vigilante, la mano en la pistola".
Rompiendo t¨®picos, los fundadores de Bar¨®n Rojo insisten en que nunca vivieron excesos de sexo o drogas. Para Armando, "cuando bajabas del escenario y quer¨ªas ligar, eras uno m¨¢s, no un objeto del deseo". Carlos especifica: "Nuestro rock exige m¨¢xima concentraci¨®n, no es compatible con las drogas duras. Siempre se nota, como ocurre en alguna etapa de Led Zeppelin".
Sherpa s¨ª almacena una historia disparatada que les relaciona con Carlos Lehder, aquel narco colombiano que levant¨® una estatua a John Lennon. "Por lo visto, quer¨ªa montar una fiesta privada con los Stones. Ellos no picaron y los siguientes en su lista ¨¦ramos nosotros. Antes de contactarnos, Lehder fue extraditado por la DEA. Todav¨ªa sigue en una prisi¨®n estadounidense".
Ellos mantienen una idea elevada de lo que significa tocar rock. Como instrumentistas formados en conservatorios, niegan esa medalla a los conjuntos pop de los ochenta. Los hermanos De Castro incluso se lo discuten al llamado "rock urbano" de Rosendo y compa?¨ªa. Armando deplora "una pretensi¨®n de dignificar lo que era finalmente rock cutre", mientras Carlos lo sit¨²a en un momento espec¨ªfico: "Hab¨ªa verdaderos comisarios pol¨ªticos, relacionados con grupos de poder en el negocio musical, que extend¨ªan certificados de autenticidad".
Como el resto de la profesi¨®n, Bar¨®n Rojo est¨¢ conmocionado por la ca¨ªda de Teddy Bautista. Armando colabor¨® con ¨¦l en los setenta y le defiende. Sherpa es m¨¢s cr¨ªtico: "Este pa¨ªs lleva en su gen¨¦tica el latrocinio". No, ahora no interpretan el Get on your knees, de Los Canarios, que grabaron en 1989. "Es que nunca estuvo en el repertorio" de ensayo para esta reuni¨®n, "unas 40 canciones". S¨ª rescatan Anda suelto Satan¨¢s, de Aute: "Tiene una gran letra, muy adecuada para estos tiempos, con tanto fan¨¢tico religioso por ah¨ª".
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