Tres reyes de la vulgaridad
Todo lo contrario al d¨ªa anterior, ayer la fiesta de los toros ofreci¨® su cara m¨¢s mediocre. Un fraude en toda regla. Anunciaron la alternativa de un muchacho malague?o que est¨¢ muy verde para tomarla en Bilbao. Lo demostr¨® con creces, aunque puso viva voluntad, sobre todo en el ¨²ltimo de la tarde. Pero eso no es lo m¨¢s punible. Lo realmente deplorable estuvo en el cuerpo de dos toreros, llamados figuras, como son El Juli y Alejandro Talavante.
El Juli puso de relieve que no quer¨ªa saber nada de la corrida. Lo dejaba para el d¨ªa siguiente, o sea, para hoy, que torea con Ponce y Pereda. Ayer solo quiso cobrar. En la faena de ese toro reparti¨® mantazos, abus¨® del pico afic¨¢ndose en la vulgaridad total. En su segundo perdi¨® pasos en todo momento. El toro echaba la cara arriba, y el torero no pod¨ªa dominarlo. No se ped¨ªa que se luciera. Se ped¨ªa que lo dominara.
JANDILLA / EL JULI, TALAVANTE, FORTES
Toros de Jandilla, con cabezas astifin¨ªsimas, juego aceptable, salvo el cuarto, que ten¨ªa peligro.
El Juli: pinchazo y estocada desprendida (aplausos); estocada desprendida y descabello (aplausos y algunos pitos).
Alejandro Talavante: pinchazo y estocada desprendida -aviso- (silencio); estocada -aviso-, -segundo aviso- y descabello (ovaci¨®n).
Sa¨²l Jim¨¦nez Fortes: dos pinchazos, estocada defectuosa y tres descabellos -aviso- (aplausos); estocada (ovaci¨®n).
Plaza de Toros de Vista Alegre. 24 de agosto. Quinta de feria. Tres cuartos de entrada.
Alejandro Talavante, del que dec¨ªan los palmeros profesionales que estaba en un momento dulce, en sus dos faenas demostr¨® c¨®mo no hay que torear. La labor de su primero la hizo a la velocidad de un vendedor de pizzas motorizado. Se lo pas¨® de lejos. Nada de nada. En su segundo, exhibi¨® alg¨²n muletazo de cierta entidad, pero poca. No lig¨® los pases. Perd¨ªa pasos, abusaba del pico, no templaba, no cargaba la suerte. Un fiasco. Y para colmo cuando meti¨® la espada hizo ademanes como que hab¨ªa realizado el volapi¨¦ del siglo y fue tan poco eficaz ese "volapi¨¦ del siglo", que el toro tard¨® en morir y le dieron los dos avisos, y a punto estuvieron de mandarle el toro a los corrales. ?Cre¨ªa Talavante que estaba en una plaza de carros? El Alejandro Talavante que ven¨ªa precedido de una aureola bullente, se qued¨® en un simple Alejandro Vulgaridad.
Al joven Jim¨¦nez Fortes le deseamos la mejor de las suertes en la carrera que ayer inici¨®. Y ya que est¨¢ en Bilbao, conven¨ªa que le regalaran el v¨ªdeo de la corrida del d¨ªa anterior. ?Se acuerdan? S¨ª, aquella corrida en la que tore¨® Morante con otros dos toreros, que tampoco lo hicieron mal.
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