Qu¨¦ arte el del 'homo sapiens'

En 1968 un grupo de espele¨®logos que rondaban los 20 a?os y hac¨ªan meritos para federarse se descolgaron por una sima conocida como el Pozu'l Ramu, en el macizo de Ardines, Ribadesella. Una vez llegaron al suelo descubrieron una impoluta superficie de arena, sin ning¨²n tipo de huellas. No hab¨ªa sido pisada en mucho, mucho tiempo. Se adentraron por las galer¨ªas de la cueva en una traves¨ªa en la oscuridad que dur¨® siete horas, avanzando por terreno desconocido con un equipo precario. As¨ª encontraron el Camar¨ªn de las Vulvas y el Panel Principal, dos de los conjuntos art¨ªsticos rupestres m¨¢s importantes de la cueva (hay hasta 12). Un par de semanas despu¨¦s, Tito Bustillo, uno de los j¨®venes descubridores, falleci¨® en un accidente de monta?a en otra expedici¨®n en la zona de Quir¨®s. En homenaje, la cueva fue bautizada con su nombre. El descubrimiento de esta joya del arte del Paleol¨ªtico tuvo gran repercusi¨®n medi¨¢tica. Cuarenta a?os despu¨¦s, en 2008, fue declarada patrimonio de la humanidad por la Unesco. Y el pasado mes de marzo se inaugur¨® el Centro de Arte Rupestre Tito Bustillo.

Lo ideal es una visita completa, que incluya la cueva y el centro. Cada a?o un grupo de expertos decide la cuota m¨¢xima permitida de visitas; este a?o es de 150 personas al d¨ªa, en grupos de 15. Por eso es importante reservar plaza con antelaci¨®n. La visita guiada dura algo m¨¢s de una hora, y en ella se recorren unos 900 metros de entrada y otros 900 para salir por el mismo sitio, una abertura artificial que se perfor¨® en la roca y permite un acceso f¨¢cil por un t¨²nel asfaltado. En la cueva hace 15 grados; se recomienda llevar algo de abrigo.

Una vez dentro el espect¨¢culo es doble: por un lado el natural, con las estalactitas, las estalagmitas, los derrumbes, el sonido del r¨ªo subterr¨¢neo. Y por otro las pinturas rupestres. Se realizan varias paradas explicativas hasta llegar al Panel Principal, una pared donde hay m¨¢s de un centenar de pinturas en dos fases, la antigua o premagdaleniense, con signos en rojo, y la m¨¢s moderna o magdaleniense, con pinturas zoomorfas (b¨®vidos, c¨¦rvidos, caballos). Ante las pinturas, conservadas desde hace 20.000 a?os, envuelto en la penumbra, impresiona pensar que durante m¨¢s de 10.000 a?os la cueva fue utilizada por seres humanos. Los grupos que vivieron aqu¨ª hac¨ªan su vida cotidiana cerca de la salida, sellada por un derrumbe, raz¨®n por la cual las pinturas permanecieron ocultas hasta 1968. Para llegar a los lugares donde se realizaron las pinturas, algunas en las zonas m¨¢s profundas, aquellos hombres y mujeres ten¨ªan que hacer largas traves¨ªas (recordemos que los j¨®venes espele¨®logos tardaron siete horas).

Hay muchas teor¨ªas acerca de la utilidad de las pinturas, posiblemente fueran utilizadas para alg¨²n tipo de rito, aunque seguramente nunca lo sabremos a ciencia cierta. Adem¨¢s, en el Panel hay una pintura de un reno, lo que indica que en aquella ¨¦poca, con la glaciaci¨®n, Asturias tuvo una climatolog¨ªa parecida a la actual en Noruega. El mar estaba por entonces cuatro kil¨®metros m¨¢s lejos.

En el Centro de Arte Rupestre, de 6.500 metros cuadrados, se explica, adem¨¢s del Panel Principal, otros conjuntos no visitables por su dif¨ªcil acceso como el Camar¨ªn de la Vulvas, una peque?a c¨¢mara en cuyas paredes hay pintados sexos femeninos, la Galer¨ªa de los Caballos, o la recientemente descubierta y muy rec¨®ndita Galer¨ªa de los Antropomorfos, donde se encuentran esquem¨¢ticas figuras humanas. El centro ofrece cuidadas reproducciones de estos espacios as¨ª como de los utensilios hallados en la cueva. En seis salas que reproducen el ambiente cavernario, y utilizando la ¨²ltima tecnolog¨ªa de forma muy did¨¢ctica, se explican tambi¨¦n las vicisitudes del descubrimiento (hay un documental con testimonios actuales de algunos de los descubridores y algunas piezas del equipo que utilizaron, como cascos y carburos), la geolog¨ªa de la zona o las caracter¨ªsticas de sus pobladores, homo sapiens como nosotros, con el mismo aspecto y la misma inteligencia.