Los responsables
Cuatro a?os largos despu¨¦s del inicio de la Gran Recesi¨®n sigue el debate sobre las responsabilidades. Las de quienes condujeron a esta cat¨¢strofe con sus acciones o ideas, pero tambi¨¦n las de quienes abusaron, estafaron, desregularon con el objeto de apoyar pr¨¢cticas irregulares, se enriquecieron il¨ªcitamente, etc¨¦tera.
Que las pol¨ªticas p¨²blicas para salir de la crisis son manifiestamente mejorables es una cosa. Echar la culpa de lo sucedido a los pol¨ªticos es otra. Hay que desconfiar de los banqueros, analistas, economistas..., que ponen el acento en la responsabilidad de los pol¨ªticos sin hacer una fuerte autocr¨ªtica de su propia actuaci¨®n. Desv¨ªan intencionadamente la atenci¨®n.
Que la calidad de las pol¨ªticas p¨²blicas es mejorable, es una cosa. Pero los responsables de la crisis son otros
Hasta ahora, la ¨²nica persona que ha pisado la c¨¢rcel por sus estafas es Bernard Madoff, autor de la estafa financiera m¨¢s grande de la historia protagonizada por un solo hombre: por el volumen de la misma (alrededor de 65.000 millones de d¨®lares), por su duraci¨®n (m¨¢s de dos d¨¦cadas de simulaci¨®n) y por la extensi¨®n geogr¨¢fica (afectados de todo el mundo, pertenecientes, sobre todo, a la clase social de los ricos y ultrarricos). Madoff -"uno de los nuestros", no un outsider de las finanzas- confes¨® su estafa en diciembre de 2008, cuando el mundo deglut¨ªa la quiebra de Lehman Brothers. Apenas seis meses despu¨¦s fue condenado a 150 a?os de c¨¢rcel por 11 delitos.
1.500 d¨ªas despu¨¦s de la aparici¨®n de las hipotecas locas, se acaba de presentar una demanda civil en EE UU contra 17 bancos (casi toda la aristocracia financiera de Wall Street) por haber mentido sobre la calidad de aquellas hipotecas, provocando p¨¦rdidas por valor de m¨¢s de 100.000 millones de d¨®lares y haber deteriorado la situaci¨®n de dos entidades prestamistas semip¨²blicas, Fannie Mae y Freddie Mac. Esta demanda se suma a otras de los ¨²ltimos meses. Algo se ha activado.
En Islandia comenz¨® hace unos d¨ªas el primer juicio contra un pol¨ªtico -el exprimer ministro conservador de la isla- por su actuaci¨®n negligente y falta de previsi¨®n. Islandia ha sido uno de los laboratorios del neoliberalismo (desregulaci¨®n y privatizaciones masivas, impuestos muy bajos, burbuja inmobiliaria..., hasta su quiebra). Milton Friedman asesor¨® a los gobiernos conservadores. Ahora, mediante la convocatoria de dos referendos, sus ciudadanos (320.000 personas) se han negado a pagar por los perjuicios causados a entidades bancarias de otros pa¨ªses (Reino Unido y Holanda) por dos o tres docenas de banqueros, empresarios y pol¨ªticos que saquearon el pa¨ªs. Al ex primer ministro se le piden dos a?os de c¨¢rcel.
Una cosa son los golfos apandadores que se han beneficiado de los problemas de tanta gente, y otra distinta son los supervisores y reguladores que no actuaron bien (a veces porque sus instituciones estaban demediadas o trufadas de conflictos de intereses; otras, porque a pesar de estar all¨ª no cre¨ªan en su funci¨®n). Las responsabilidades son distintas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.