"La tecnolog¨ªa es el mejor aliado de la democracia"
Adriana Cisneros (Caracas, 1980), vicepresidenta del grupo que lleva su apellido, encarna a la tercera generaci¨®n de una familia venezolana que ha sabido reinventar una y otra vez su modelo de negocio para adaptarse a los tiempos: desde el cami¨®n que compr¨® su abuelo Diego para fundar una primera empresa de transportes hasta convertirse en uno de los productores audiovisuales m¨¢s fuertes del mundo de la mano de su padre, Gustavo, actual presidente. Medios de comunicaci¨®n, turismo, telecomunicaciones... El grupo est¨¢ presente en muchos sectores, pero su buque insignia sigue siendo Venevisi¨®n, la productora de contenido televisivo m¨¢s grande de Sudam¨¦rica. Adriana Cisneros es la cara y el alma de la compa?¨ªa en su tr¨¢nsito hacia el nuevo modelo del siglo XXI.
"En EE UU est¨¢n empezando a ver el potencial que tiene el mercado hispano"
"Haremos un gran movimiento en Espa?a cuando se arreglen las licencias"
Pregunta. ?Qu¨¦ le trae por Espa?a?
Respuesta. Vengo con frecuencia. Hace un a?o que estamos analizando algunas oportunidades de negocio en el terreno de los medios de comunicaci¨®n, que esperemos que se den pronto. Esta visita coincide, adem¨¢s, con el hecho de que nuestra m¨¢s reciente telenovela, Eva Luna, est¨¢ en el aire en Televisi¨®n Espa?ola.
P. ?Por qu¨¦ tiene tanto ¨¦xito la telenovela venezolana?
R. Llevamos mucho tiempo haciendo esto; exportamos la primera hace ya casi 35 a?os. En el caso de Eva Luna, hemos tenido una experiencia espectacular en Estados Unidos. Sali¨® al aire en Univisi¨®n -canal l¨ªder de habla hispana- en prime time, y semanalmente le est¨¢bamos ganando en audiencia a los canales abiertos en ingl¨¦s. Hemos hecho una telenovela atractiva para las nuevas generaciones, cre¨¢ndole toda una vida digital e interactiva (perfiles de Facebook,
Twitter, episodios adicionales para bajar por Internet, etc¨¦tera). Aparecieron dos millones de televidentes nuevos que nadie sab¨ªa que exist¨ªan en EE UU. La principal labor que he hecho en los cinco a?os que llevo trabajando con mi familia ha sido modernizar el sistema de medios tradicionales. Me entregaron una compa?¨ªa de 1990 y ahora estamos en 2011 y mirando a 2030.
P. ?C¨®mo van a afectar las nuevas tecnolog¨ªas a la industria de los contenidos?
R. Nosotros fuimos de los primeros en Latinoam¨¦rica en firmar con Netflix, el equivalente de Spotify para contenidos audiovisuales (pagas como nueve euros al mes y tienes acceso a unas bibliotecas enormes). Ese es el nuevo modelo para las compa?¨ªas de medios. Es muy diferente la experiencia de sentarte frente a la televisi¨®n a ver un canal porque eso es lo que hay, a que a trav¨¦s de tu iPad o tu ordenador puedas ver lo que quieras, cuando quieras, de todos los productores y canales que quieras. Si la gente est¨¢ consumiendo contenidos de una forma diferente, uno tiene que repensar tambi¨¦n qu¨¦ est¨¢ produciendo, c¨®mo va a ser ese contenido, de qu¨¦ duraci¨®n, cu¨¢ntos episodios; todo eso va a cambiar.
P. ?Todos sus contenidos audiovisuales son en espa?ol?
R. Por ahora. Estamos iniciando conversaciones con unos posibles socios en EE UU para empezar a hacer algo en ingl¨¦s, con un subtema hispano. La idea es que este programa se emita en uno de los mayores cableoperadores de EE UU, algo que puede ocurrir de aqu¨ª al a?o que viene.
P. ?Qu¨¦ planes tiene su compa?¨ªa en Espa?a?
R. En Espa?a hay much¨ªsimas oportunidades. Para nosotros lo importante es conseguir sinergias: ver qu¨¦ oportunidades se presentan aqu¨ª en las que podamos obtener las mayores sinergias con lo que ya estamos haciendo en Latinoam¨¦rica y al rev¨¦s. Estamos convencidos de que esta es la d¨¦cada de Latinoam¨¦rica. El continente est¨¢ empezando a pasar por un gran momento de crecimiento y riqueza. Es muy emocionante. Y ?por qu¨¦ no montar a Espa?a dentro de esa fuerza de Latinoam¨¦rica? Para nosotros tiene mucho sentido.
P. ?C¨®mo ser¨ªa esa conexi¨®n?
R. Lo ver¨¦is. Justamente estamos en eso ahora. Por el momento solo puedo decir que se trata de producci¨®n de contenidos.
P. ?Y algo espec¨ªfico en el panorama audiovisual espa?ol?
R. Estamos esperando a que terminen de solucionar el tema de las licencias digitales. En ese momento pensamos hacer un movimiento importante, del que ahora tampoco puedo hablar m¨¢s.
P. Y en EE UU, ?todav¨ªa hay margen para seguir penetrando?
R. Claro. El estadounidense est¨¢ empezando ahora a entender el fen¨®meno hispano. Por primera vez los due?os de las televisiones se dan cuenta de su potencial. Tiene mucho que ver con el censo que va a salir. Pero est¨¢n muy confundidos tratando de ver qu¨¦ es lo que quiere espec¨ªficamente ese mercado, y yo creo que no hay una sola respuesta. Hay quien quiere contenido en espa?ol, quien lo quiere en ingl¨¦s pero con lazos culturales hacia Latinoam¨¦rica, y los que ya solo quieren que sea todo en ingl¨¦s. ?Y por qu¨¦ limitarse? Yo me siento c¨®moda viendo los tres formatos. Y creo que ah¨ª va a estar nuestro ¨¦xito, en no encasillarnos, en no volvernos locos tratando de entender qu¨¦ es eso del mercado hispano. El mercado hispano es todo.
P. ?Ha llegado el momento de pensar globalmente en los negocios, m¨¢s que regionalmente?
R. El mercado es el mundo. Y m¨¢s cuando nos empezamos a separar del modelo tradicional de los medios. Ya no necesitas la pantalla de televisi¨®n porque tienes cosas como Netflix. No tienes restricciones geogr¨¢ficas, tu p¨²blico est¨¢ en el mundo completo. Si nuestro contenido, a trav¨¦s de medios tradicionales, ya se ve en 120 pa¨ªses, incluyendo China, Ir¨¢n o Afganist¨¢n, en m¨¢s de 50 idiomas, el pr¨®ximo paso es natural.
P. ?Qu¨¦ funci¨®n tienen las nuevas tecnolog¨ªas para sortear las trabas a la libertad de expresi¨®n que todav¨ªa hoy se intentan imponer en algunos pa¨ªses?
R. La tecnolog¨ªa es el mejor aliado de la democracia. Cuando la tecnolog¨ªa es parte de tu vida no tienes m¨¢s remedio que ser un ciudadano del mundo.
P. Es un medio de escapar del control de los Gobiernos.
R. Es que no pueden hacer nada. Lo hemos visto, por ejemplo, en Londres, cuando ocurrieron todos estos episodios tan violentos. El gran debate era si se pod¨ªan bloquear las redes sociales como Twitter, a trav¨¦s de las que se organizaban los grupos. Y se dieron cuenta de que cerrar estos servicios, aunque les podr¨ªa ayudar policialmente, mandaba un mensaje muy en contra de la libertad de expresi¨®n y la democracia. Cuando la tecnolog¨ªa ha entrado, ya nadie la puede sacar.
P. Cisneros tambi¨¦n tiene una importante fundaci¨®n, muy enfocada en la educaci¨®n.
R. Es un tema en el que mis padres llevan trabajando desde hace 40 a?os. Se enfocaron en la educaci¨®n porque consideraron que la mejor manera de combatir la lejan¨ªa que existe entre ricos y pobres en Latinoam¨¦rica es darle acceso a la educaci¨®n a la gente de bajos recursos. Ahora yo presido la fundaci¨®n y me siento tan comprometida con ella como con el negocio. Cuando asum¨ª las dos responsabilidades me di cuenta de que era mucho trabajo, y me pregunt¨¦ por qu¨¦ seguir haci¨¦ndolo por separado. Hoy en d¨ªa, en el plan de cada nuevo negocio que montamos est¨¢ el plan de responsabilidad social.
P. ?Usted ya lleva la antorcha de la Organizaci¨®n Cisneros?
R. La llevo yo. Tard¨¦ como unos cinco a?os en formular esta nueva visi¨®n, y ahora ya estamos todos montados en el mismo autob¨²s; mi visi¨®n ya es la visi¨®n del grupo y todos nuestros recursos est¨¢n enfocados en esto.
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