Pompeu Fabra en la Ciutadella
El escritor M¨¤rius Serra hace una original y encendida defensa del catal¨¢n - Tres cocineros recitan fragmentos de Josep Pla
La ofrenda floral, el pacto expr¨¦s de la Constituci¨®n, los pitos a los pol¨ªticos en el monumento a Rafael Casanova y, por encima de todas las cosas, la firme defensa del modelo de inmersi¨®n ling¨¹¨ªstica. Si en 2010 se centr¨® en la repulsa contra la sentencia del Estatuto, ayer gir¨® alrededor de la defensa del catal¨¢n en todos los actos, oficiales o no, y en las manifestaciones que se celebraron en Catalu?a.
El escritor M¨¤rius Serra protagoniz¨® el momento cumbre de esa reivindicaci¨®n al leer, en medio de una atronadora ovaci¨®n, un discurso en la ceremonia del parque de la Ciutadella en el que cit¨® una frase de Pompeu Fabra en la que dec¨ªa que no le importaba tanto la gram¨¢tica como que los ni?os aprendieran la lengua.
"Lo que dec¨ªa Pompeu Fabra hace 100 a?os lo llamamos hoy inmersi¨®n ling¨¹¨ªstica", proclam¨® Serra ante un auditorio que soport¨® un calor t¨®rrido y que se protegi¨® con sombreros de paja tocados con la senyera regalados por la organizaci¨®n. "?Necesitamos m¨¢s inmersi¨®n que nunca! Porque si leemos del derecho y del rev¨¦s el nombre de nuestra lengua tendremos el quid de la cuesti¨®n: ?Catal¨¤ a l'atac! Viva la lengua viva". Las 5.000 personas reunidas junto a la Cascada de la Ciutadella le brindaron una ovaci¨®n a la que se sumaron los pol¨ªticos desde el escenario. Alicia S¨¢nchez-Camacho (PP) no aplaudi¨®.
La ceremonia, presentada por la periodista Ariadna Oltra, tuvo el mismo formato que inaugur¨® en 2006 el expresidente Pasqual Maragall y a la que se incorpor¨® con media hora de retraso Joan Laporta. Pese a que CiU hab¨ªa criticado ese modelo con vehemencia, fue casi calcada a la de a?os anteriores. Entre los momentos originales figur¨® la intervenci¨®n de tres c¨¦lebres cocineros (Carme Ruscalleda, Josep Roca y Jaume Subir¨®s) para leer fragmentos sobre cocina escritos por Pla. Poco antes, la actriz ?ngels Poch, recit¨® un conmovedor texto de Joan Maragall de La ciutat del perd¨® en el que criticaba la pasividad de los barceloneses y de la clase pol¨ªtica catalana ante las ejecuciones en Montju?c tras la Semana Tr¨¢gica. El acto no cont¨® esta vez con el concurso de artistas flamencos pero s¨ª acab¨® con un recopilatorio de canciones del rock catal¨¢n de los ¨²ltimos 20 a?os desde Sau hasta Sopa de Cabra. S¨¢nchez-Camacho casi tarare¨® las piezas. Y luego se sum¨® a cantar Els Segadors.
Los populares hicieron malabarismos desde primera hora por el conflicto suscitado en Badalona. Alberto Fern¨¢ndez D¨ªaz, concejal de Barcelona, lament¨® que junto a la estatua del conseller en cap hubiera colocado una bandera independentista que, a diferencia de a?os anteriores, nadie retir¨®. El monumento volvi¨® a estar cercado por un amplio per¨ªmetro de seguridad que libr¨® a los pol¨ªticos del bochorno de los insultos y algunos lo hicieron casi en solitario: cuando lo hizo ERC, ya no hab¨ªa ni m¨²sicos.
En el Fossar de les Moreres, no falt¨® el color: hubo una recreaci¨®n hist¨®rica protagonizada por un grupo de miquelets, los combatientes regulares de la Guerra de Sucesi¨®n, que lanzaron salvas de recuerdo a las v¨ªctimas de la ¨¦poca. Junto a la bas¨ªlica de Santa Maria del Mar, la Coordinadora Independentista del Fossar de les Moreres reuni¨® a 400 personas en un acto pol¨ªtico en el que intervino, entre otros, Txelui Moreno, portavoz de la izquierda arbertzale. La jornada acab¨® con un concierto promovido por ?mnium Cultural en el Arc de Triomf con este lema: la fiesta de la libertad.
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