"Me siento como Cristiano Ronaldo"

La RAE define afligir como "causar molestia o sufrimiento f¨ªsico". Fiel al diccionario, el toro Afligido, de 608 kilos y nacido en 2006, muri¨® ayer alanceado en Tordesillas (Valladolid) en medio de una multitud despu¨¦s de casi media hora de encierro y una larga agon¨ªa. Ocurri¨® en el d¨ªa grande de las fiestas de la localidad, de Inter¨¦s Tur¨ªstico Nacional. Lo mat¨® ?scar Bartolom¨¦ Hern¨¢ndez, alias Zamorano, que a pie le clav¨® varias veces la lanza en el brazuelo izquierdo, y se gan¨® otro hueco en la historia de la pol¨¦mica tradici¨®n; en 2003, con solo 19 a?os, ya mat¨® al toro Ga?aflero.

Zamorano no ocult¨® su satisfacci¨®n, jaleado por el pueblo. "Me siento como Cristiano Ronaldo. Eres como Dios", explic¨® con la voz ronca. El toro, detall¨®, le entr¨® de frente y ¨¦l le clav¨® dos veces la lanza en el costado izquierdo. Afligido sangr¨® hasta caer rodeado por la masa.

El animal es tapado con un pl¨¢stico para ocultar su agon¨ªa

El Toro de la Vega parece crecer en espectadores con la pol¨¦mica. El alcalde, Jos¨¦ Antonio Gonz¨¢lez, del PSOE, cifr¨® de forma optimista en 50.000 el n¨²mero de personas que acudieron ayer a Tordesillas. Gonz¨¢lez defendi¨® as¨ª los beneficios de haber gastado 3.500 euros en Afligido.

El d¨ªa grande de Tordesillas es una polvareda sobre la arena de un pinar, en el que unos 300 caballistas y otras tantas personas a pie corren tras el animal y en la que solo los situados en primera fila saben exactamente qu¨¦ ocurre. Muchos abandonan el encierro y vuelven al bar tras haber visto el toro solo unos segundos. Bastantes llegaban con los ojos vidriosos, prueba de una larga noche de alcohol. Bastantes tambi¨¦n se dispon¨ªan a seguir tras la muerte de Afligido. La mayor¨ªa de sus 9.000 habitantes apoya el festejo y algunos cargan contra la prensa. "Nos insultan, nos abuchean porque no lo conocen", contaba una joven. El h¨¦roe era Zamorano, que posaba sonriente con el rabo de Afligido ensartado en su lanza y se dispon¨ªa a secarlo en sal.

Seg¨²n la norma del torneo, el primero que alancea al toro tiene derecho a matarlo, mientras el resto de lanceros evitan que el toro escape. Una vez en el suelo, los organizadores dejan ver poco o nada, y a¨²n menos grabar o fotografiar. El toro es cubierto con un pl¨¢stico para que no se vea la agon¨ªa, solo se intuya. "Tampoco se ven los animales en el matadero", justifica Gerardo Abril, presidente del patronato del Toro de la Vega, que se remonta al siglo XIV.

El morlaco tard¨® mucho en morir, algo que los organizadores atribuyen a que el encargado de descabellar a Afligido no apareci¨®. Seg¨²n Javier Moreno, de la ONG Igualdad Animal, intentaron apuntillar al toro con un destornillador, algo que neg¨® el regidor. La protesta principal contra el lanceo se celebr¨® el domingo, aunque ayer una activista a favor de los animales fue detenida tras rociar con gas irritante a los lanceros. Preguntado por la larga agon¨ªa del toro, Zamorano neg¨® la mayor: "No puedo decir que haya agonizado". El alcalde sali¨® en apoyo del h¨¦roe local: "El tiempo es relativo".