Una chica triple A

La incontenible atenci¨®n de los medios de comunicaci¨®n entroniza, d¨ªa a d¨ªa, en inagotable hagiograf¨ªa, las vidas ejemplares contempor¨¢neas. Dado que las agencias de rating son hoy f¨¢bricas de santidades ejemplarizantes, ya no deben existir personajes inolvidables sino tipos triple A: seres conscientes de que un m¨ªnimo resbal¨®n ser¨¢ castigado con la p¨¦rdida de una A, con el bochorno y la desgracia universal. As¨ª es el mundo, competitivo, innovador y terror¨ªfico que tiene, como s¨ªmbolo de excelencia, la triple A. Todo el mundo lo sabe. Adjudicar el t¨ªtulo de chica triple A a Mar¨ªa Dolores de Cospedal es, por tanto, situarla un lugar excelso del escalaf¨®n social. ?Qui¨¦n sino ella -el grupo Bilderberg ya la califica de gran lideresa- para simbolizar al prototipo en alza?

El ventr¨ªlocuo Rajoy habla v¨ªa Cospedal, el prototipo en alza, sobre un futuro de recortes divinos

Exhibir una triple A define a un ser creador de escuela y costumbres. Es la esencia de lo pol¨ªticamente correcto. Como en las vidas de santos, ser ungido con una triple A equivale a acumular una leyenda fabulosa y a transformarse en ideal, en mito. Y, como en los mercados, la triple A es garant¨ªa de poder trif¨¢sico: dinero, influencia medi¨¢tica y decisi¨®n pol¨ªtica. ?No est¨¢ llamada Cospedal, n¨²mero dos del Partido Popular y presidenta -ejecutiva- de Castilla-La Mancha, a alcanzar una vicepresidencia en un futuro Gobierno de Mariano Rajoy? ?No es obvio que don Mariano, experimentado ventr¨ªlocuo, habla, a trav¨¦s de Cospedal, sobre un futuro de divinos recortes, santa austeridad y maldades socialistas?

El caso de esta chica triple A es claro. Hay rasgos que saltan a la vista. En la cuarentena, guapa, con buena planta, sin complejos. Su leyenda vital se adapta a la ultramodernidad: un hijo in vitro en plena solter¨ªa, y un matrimonio posterior con su pareja de hecho, un tranquilizador empresario. Su trayectoria profesional y pol¨ªtica es escalera a la gloria. En menos de 20 a?os, la espa?olita, crecida en Albacete, se licencia en Derecho (Madrid), gana oposiciones a abogada del Estado, comienza un carrer¨®n como alto cargo de diversos ministerios (nunca m¨¢s de dos a?os en ellos y siempre en ascenso) incluida la embajada espa?ola en Washington; como chica Acebes vive el 11-M al lado del Gobierno; consejera de Esperanza Aguirre y senadora, don Mariano la nombra su n¨²mero dos, gana -por poco, pero gana- las elecciones para presidir Castilla-La Mancha. Su sueldo -no menos de 200.000 euros- fue pol¨¦mico en 2010, "trabajo mucho", dijo. Hoy trabaja m¨¢s: es presidenta en Toledo y n¨²mero dos en Madrid. R¨¢pido, r¨¢pido. Hay prisa: lo que est¨¢ por llegar es el Gobierno del Estado. ?O no? (?Y si no ganan las elecciones?, ?hay alguien capaz de pensar eso?).

Puede estar en dos o tres sitios a la vez, va de moderna y seria combinando la decisi¨®n ejecutiva y la provocaci¨®n c¨ªvica con la mantilla y la peineta. Solo dice lo que le da la gana, es ella quien hace las preguntas y quien multa a aquellos a los que, como presidenta, debe dinero (preguntar a los farmac¨¦uticos manchegos). Antes de ciertas reuniones pol¨ªticas -as¨ª fue hace poco en El Casar- va a misa y luego presenta un Plan de Garant¨ªa de los Servicios Sociales B¨¢sicos que garantiza que se recortan 1.800 millones de euros y ello "es un ejemplo para Espa?a" (EL PA?S, 1 de septiembre). As¨ª son las chicas triple A: no hay recorte sino promesa de ahorro, lo cual, a la larga, dicen los suyos y corrobora el Ministerio de Econom¨ªa, permitir¨¢ volver a endeudarse para hacer mejores servicios sociales. ?Puestos de trabajo en juego? ?Y qu¨¦? Ha acu?ado la expresi¨®n operaci¨®n bikini administrativa para popularizar el horror al Estado al que ella misma dice servir (honorarios incluidos e intocados). Sonr¨ªe poco y con esfuerzo.

Suele hablar en nombre de los espa?oles, las espa?olas, los manchegos, las mujeres y la sociedad: es una generalista nata. Sin excepciones: "El PSOE deja ocho a?os de conflictos entre los espa?oles" (EL PA?S, 31 de julio). "Zapatero y todos los que le han acompa?ado han pasado ocho a?os aprobando normas y haciendo cosas con un objetivo claro: dividir a la sociedad espa?ola", no hay m¨¢s que hablar. Con tal contundencia de esp¨ªritu ?qui¨¦n va a atreverse a llevarle la contraria? Est¨¢ claro: "No es que el Partido Popular no apoye al Gobierno, sino que el Gobierno no quiere el apoyo del PP" (declaraciones del 29 de agosto). Todo ello se hace sin mover una ceja. Esta chica triple A -?es realmente una mujer?- es un or¨¢culo al que ya nos estamos acostumbrando: la voz de Rajoy, de reconocidas habilidades triple A. Un asombro.

Mi generaci¨®n -malditos progres- no puede evitar una asociaci¨®n simb¨®lica que hoy, dada la generalizada miseria de conocimientos y referencias hist¨®ricas, se ignora. La triple A (AAA) fue en los setenta un grupo paramilitar criminal de extrema derecha creado por el brujo L¨®pez Rega: la Alianza Anticomunista Argentina. Inolvidable como s¨ªmbolo del terror. Los tiempos cambian: hoy el ¨¦xito se llama triple A. Otro s¨ªmbolo.

Margarita Rivi¨¨re es periodista y escritora.