Tres a?os por un pu?etazo
Un tribunal condena a la c¨¢rcel (y luego le recomienda pedir el indulto) a un hombre por partirle la nariz a otro
David Carballo Nieto, un carpintero de Rois (A Coru?a) de 36 a?os, tendr¨¢ que ingresar en prisi¨®n si no prospera el indulto parcial que pidi¨® despu¨¦s de ser condenado a tres a?os de c¨¢rcel por deformarle, de un pu?etazo, el tabique nasal a un vecino que le deb¨ªa dinero. El propio tribunal de la Secci¨®n 6 de la Audiencia Provincial de A Coru?a reconoci¨® en su veredicto la dureza de la pena que para estos casos establece el C¨®digo Penal. En el propio fallo sugiere al culpable que recurra a la indulgencia del Gobierno para al menos reducir a dos a?os la pena y eludir la c¨¢rcel.
"Estoy asombrado con las cosas que pasan. Las leyes est¨¢n mal planteadas y no son iguales para todos. A m¨ª me mandan a la c¨¢rcel por esto y otros, por cosas mucho peores como el narcotr¨¢fico, dicen que se arrepienten, hablan con el fiscal y ya se pueden marchar para casa", se lamenta el carpintero.
La v¨ªctima deb¨ªa dinero al agresor por un trabajo de carpinter¨ªa
Los abogados de David Carballo han tramitado el indulto ante el Ministerio de Justicia. Alegan a su favor la sugerencia que el propio tribunal le hizo para recurrir a esta v¨ªa de s¨²plica y el hecho de que no tiene antecedentes penales ni nunca se ha visto involucrado en ning¨²n hecho delictivo. La situaci¨®n familiar tambi¨¦n es una circunstancia a su favor, porque sus ingresos son los ¨²nicos que entran en el domicilio familiar y tiene dos hijos de corta edad. "Es una situaci¨®n que me preocupa mucho, porque mi mujer a¨²n no sabe que en cualquier momento puede venir la Guardia Civil para llevarme a la c¨¢rcel", afirma Carballo, que se confiesa "arrepentido" por haberse bajado del coche cuando el 29 de agosto de 2008 se cruz¨® con la v¨ªctima: "?l se ri¨® de m¨ª porque le reclamaba el pago de unas tuber¨ªas de aluminio que me hab¨ªa encargado. Hoy no lo hubiera hecho y habr¨ªa actuado con m¨¢s frialdad".
Durante el juicio, condenado y v¨ªctima discreparon sobre la sucesi¨®n de los hechos y sobre c¨®mo se produjo el golpe. Mientras el denunciante dijo que "el acusado le lanz¨® un escupitajo" cuando los veh¨ªculos se cruzaron, baj¨® del coche y le dio un pu?etazo a trav¨¦s de la ventanilla, el carpintero expuso un relato diferente. David Carballo asegur¨® que la v¨ªctima "se ri¨® burlonamente" de ¨¦l en el momento de encontrarse los coches. "Baj¨¦, me acerqu¨¦ a la ventanilla de su coche y ¨¦l, al abrir su puerta, se golpe¨® con ella cuando yo trat¨¦ de pararla con las manos para evitar que me golpeara a m¨ª". Para el tribunal esta versi¨®n result¨® inveros¨ªmil ante las pruebas m¨¦dico-forenses.
El condenado tendr¨¢ que indemnizar los da?os est¨¦ticos de su v¨ªctima con 4.290 euros, adem¨¢s de la incapacidad temporal, secuelas y gastos de la cirug¨ªa reparadora. "Es apreciable que la pena es severa, teniendo en cuenta que no consta peligrosidad en el acusado y dado su esfuerzo por paliar las consecuencias de sus actos con el pago de una indemnizaci¨®n, pero el delito no permite su suspensi¨®n, aunque pueda valorarse la concesi¨®n de un indulto parcial", dice la Sala.
La sentencia valora las consecuencias del golpe, por las que la v¨ªctima precis¨® cirug¨ªa: "Se trata de deformidad o imperfecci¨®n est¨¦tica que rompe la armon¨ªa facial y es por tanto un estigma visible y permanente".
"La situaci¨®n de tensi¨®n y conflicto de intereses" entre acusador y acusado fue el m¨®vil del incidente, pero el tribunal no entr¨® a valorarlo. David Carballo le reclamaba una deuda al denunciante por unos trabajos de carpinter¨ªa de aluminio para su casa, pero este se defendi¨® alegando que el carpintero no hab¨ªa cumplido los plazos de entrega.
Como consecuencia de la agresi¨®n, la v¨ªctima sufri¨® una contusi¨®n en la pir¨¢mide nasal con desplazamiento del tercio inferior del tabique y herida incisiva en el labio superior. Por ello, preciso de 21 d¨ªas para curarse de las lesiones, siete de los cuales estuvo incapacitado para trabajar. "Ahora espero que accedan a mi s¨²plica y pueda olvidarme de todo esto para siempre", concluye el carpintero de Rois.
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