Pescadores de lista negra
El Grupo Vidal Armadores ha sido sancionado repetidamente. Bruselas pide m¨¢s investigaci¨®n
Uno de los grupos pesqueros m¨¢s vigilados del mundo tiene su sede en la localidad coru?esa de Ribeira. La empresa familiar Vidal Armadores acumula un historial de barcos incluidos en "listas negras", persecuciones por pescar sin permiso y sanciones por no respetar a las especies protegidas. La empresa resalta que nunca ha recibido condena judicial por pesca ilegal y, tambi¨¦n, que est¨¢ cambiando su estrategia: en vez de seguir pescando, se va a dedicar solamente a negocios como las energ¨ªas renovables o la extracci¨®n de aceite de pescado.
"Pretendemos borrar una historia que no acaba de eliminarse, porque siempre hay alguien encargado de reactivarla", explica Antonio Vidal Pego, To?o, de 38 a?os, durante un almuerzo en un restaurante de Santiago de Compostela. Es el hijo del fundador de la empresa, Antonio Vidal, Tucho, que no asiste a la entrevista: "Non quero falar contigo" es lo ¨²nico que ha dicho el patriarca a los medios de comunicaci¨®n durante a?os. Su hijo To?o aparece como la cara p¨²blica de la compa?¨ªa, un ejecutivo que usa traje negro, corbata de cuadros rosas, gemelos de plata y zapatos impecables de piel, negros.
La empresa cuestionada ha recibido 8,2 millones en ayudas oficiales, incluida una pendiente de pago de la Xunta de Galicia
To?o asegura que tanto ¨¦l como su padre han trabajado siempre dentro de la ley. Pero tambi¨¦n insiste en que quiere "pasar p¨¢gina". ?Y cu¨¢les son las p¨¢ginas que le interesa que se olviden? Para responder a esa pregunta hay que bucear en cientos de documentos procedentes de media docena de pa¨ªses, que hablan de una compa?¨ªa sospechosa de jugar con los l¨ªmites de la legalidad en actividades pesqueras no solo lucrativas, sino subvencionadas. Desde 1996, las compa?¨ªas de Vidal Armadores han recibido al menos 8,2 millones de euros por parte de las administraciones nacionales y de la Comisi¨®n Europea, un pellizco de los casi 6.000 millones recibidos por la industria pesquera espa?ola desde 2000.
El caso m¨¢s esclarecedor sobre Vidal Armadores se produjo en mayo de 2008. El barco Paloma V atrac¨® en Auckland (Nueva Zelanda) con algo m¨¢s de 180 toneladas de merluza negra y tibur¨®n. El patr¨®n proporcion¨® una declaraci¨®n escrita asegurando que ni el barco ni la tripulaci¨®n hab¨ªan ayudado a buque pirata alguno. Pero los inspectores de pesca Phil Kerr y Dominic Hayden decidieron estudiar el caso con detenimiento. Conoc¨ªan un historial de incidentes anteriores de Vidal Armadores, una de cuyas filiales era copropietaria del Paloma V.
Los inspectores copiaron los discos duros de los ordenadores de a bordo. All¨ª encontraron datos que les llevaron a sospechar de esta empresa como actor principal en una red de barcos piratas que capturaban merluza negra en la Ant¨¢rtida, una zona donde la pesca se encuentra sometida a la Convenci¨®n sobre la Conservaci¨®n de los Recursos Vivos Marinos (CCRVMA), que proh¨ªbe proveer o realizar transbordos a barcos incluidos en listas negras. Los documentos consultados muestran recibos de pago efectuados por Vidal Armadores para el aprovisionamiento de barcos, fotograf¨ªas de transbordos a buques inscritos en listas negras y m¨²ltiples correos electr¨®nicos que hac¨ªan sospechar de la empresa espa?ola como directora de una red de barcos.
Las preguntas sobre el Paloma V son lo ¨²nico que parece enojar a Vidal Pego. Asegura que ese barco ya no es de su propiedad y, en cualquier caso, para ¨¦l toda la historia es "una aut¨¦ntica aberraci¨®n". El punto de vista del inspector neozeland¨¦s Phil Kerr es diferente: "Lo que Vidal hac¨ªa estaba bien organizado, bien estructurado", afirma. "Ten¨ªa una flota legal que aprovisionaba a la il¨ªcita. Cuando revisamos este material, vimos que estaba m¨¢s activo que nunca".
Sin embargo, las autoridades de Nueva Zelanda decidieron evitar un asunto largo y jur¨ªdicamente complejo contra el armador, y dejaron libre al Paloma V con una simple advertencia legal. Pero el nombre del buque pas¨® a una lista negra y despu¨¦s fue observado pescando en aguas de la Ant¨¢rtida bajo pabellones de Mongolia, Belice y Camboya. Desde 2005, la Comisi¨®n Europea ha enviado 16 cartas al departamento llamado ahora Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino pidi¨¦ndole que actuara contra Vidal Armadores. Finalmente, a mediados del a?o pasado, el ministerio inform¨® de que hab¨ªa sancionado a Vidal Armadores con 150.000 euros por la relaci¨®n del Paloma V con la pesca ilegal, m¨¢s la suspensi¨®n de toda ayuda p¨²blica y de las licencias de pesca por dos a?os. Pero la compa?¨ªa recurri¨® la sanci¨®n, por lo que no es firme.
Otra reclamaci¨®n espera a los Vidal en Mozambique. En 2008, el Gobierno de ese pa¨ªs confisc¨® el Antillas Reefer cuando pescaba tiburones protegidos. Las autoridades le sancionaron con una multa equivalente a 3,3 millones de euros. El Gobierno espa?ol negoci¨® la puesta en libertad de la tripulaci¨®n y nadie ha pagado la multa: Vidal Pego dice que su empresa solo era socio minoritario de la compa?¨ªa namibia propietaria del barco, mientras Manuel Castiano, director de vigilancia pesquera de Mozambique, asegura que seguir¨¢ presionando para que alguien pague: "3,3 millones de euros es mucho dinero, suficiente para hacer funcionar mis patrulleras por un tiempo", dice. El barco confiscado ha sido reconvertido en embarcaci¨®n dedicada a la vigilancia mar¨ªtima.
El primer tropiezo de Vidal Armadores se remonta a finales de los a?os noventa. Las aguas de la Ant¨¢rtida son ricas en merluza negra, tambi¨¦n llamada "bacalao de profundidad" o "r¨®balo de fondo". Poco conocida en Espa?a, esta especie alcanza un precio equivalente a 40 euros por kilo en las pescader¨ªas de Estados Unidos. Este negocio anim¨® a muchos armadores espa?oles a aventurarse en las peligrosas aguas ant¨¢rticas: los Vidal, en concreto, ayudaron a algunos a abanderar sus buques en Uruguay. Uno de sus buques con bandera uruguaya, el Viarsa 1, fue perseguido por una patrullera australiana en 2003 y acab¨® en Australia, donde un juez termin¨® absolviendo al propietario.
Mucho peor pinta ten¨ªa el proceso abierto en 2005 en Estados Unidos. Un fiscal federal de Miami acus¨® a Vidal Pego y a una de sus compa?¨ªas en Uruguay de falsificar documentos para ocultar el origen de una importaci¨®n ilegal de merluza negra. Interpol emiti¨® orden de busca y captura contra Vidal Pego, que se present¨® ante el tribunal de Florida en 2006. Su compa?¨ªa uruguaya Fadilur admiti¨® todos los cargos; Vidal Pego solo se declar¨® culpable de obstrucci¨®n a la justicia. Entre los dos, pagaron una multa de medio mill¨®n de d¨®lares (368.000 euros). El juez le dej¨® en libertad condicional tras prohibirle que se dedicara al negocio de la merluza negra por un periodo de cuatro a?os, bajo advertencia de enfrentarse, en caso contrario, a 20 a?os de c¨¢rcel.
Hoy, mientras sale de Santiago de Compostela conduciendo su porsche, Vidal Pego cuenta que se declar¨® culpable con el fin de agilizar un costoso proceso. Asegura que no se dedica a la pesca desde entonces, y reitera que su compa?¨ªa no ha sido condenada nunca por pesca ilegal, lo cual es t¨¦cnicamente cierto. Sin embargo, s¨ª ha recibido condenas por actividades relacionadas con esta y ha sido sancionada repetidamente.
Originarios de la ciudad portuaria de Ribeira, los Vidal se han ganado el respeto de sus paisanos por crear empleo o patrocinar el club local de taekuondo. "Para m¨ª, han sido aut¨¦nticos caballeros", asevera Manuel Torres, patr¨®n de pesca en Ribeira, quien tambi¨¦n recuerda que cuando sus barcos y tripulaciones tuvieron problemas, Vidal padre "pag¨® a los abogados y les sac¨® de la c¨¢rcel".
Pero algunas ONG -Greenpeace llev¨® un informe de actividades ilegales a la fiscal¨ªa espa?ola, que no encontr¨® razones penales para intervenir- y la Comisi¨®n Europea no ven con buenos ojos que una empresa tan cuestionada contin¨²e recibiendo subvenciones. Sobre todo, despu¨¦s de la reciente legislaci¨®n contra la pesca ilegal, vigente desde 2010, que permite prohibir el acceso a ayudas p¨²blicas a personas y empresas relacionadas con esta actividad. Y sucede que su ¨²ltima iniciativa, Biomega Nutrici¨®n, una f¨¢brica que extraer¨¢ ¨¢cido graso omega-3 procedente de h¨ªgado de pescado en Boiro, tiene pendiente de pago una subvenci¨®n de casi cuatro millones de euros de la Xunta de Galicia, cofinanciada con fondos europeos. Ernesto Penas Lado, director de Pol¨ªtica Pesquera de la Comisi¨®n Europea, afirma que est¨¢ siguiendo el caso de cerca para asegurarse del respeto a la ley.
Entre tanto, en Madrid, el ministerio tiene una nueva investigaci¨®n sobre la mesa. Dos barcos incluidos en listas negras, y con pabell¨®n de Corea del Norte, fueron fotografiados en febrero pasado cuando estaban sin autorizaci¨®n cerca de la Ant¨¢rtida. Los barcos fueron propiedad durante a?os de empresas participadas por Vidal Armadores. Aunque esta dice que ya no son suyos, la Comisi¨®n Europea ha pedido a Espa?a que lo investigue.
"Kate Willson y Mar Cabra son periodistas del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigaci¨®n (ICIJ por sus siglas en ingl¨¦s). La investigaci¨®n completa, en ingl¨¦s, puede leerse en este enlace ."
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