Los supervisores niegan que el recargo de capital a la banca tenga impacto econ¨®mico
Tras meses de dilaciones, s¨ªntoma de un debate enconado, el G-20 decidir¨¢ por fin este mes de noviembre c¨®mo encaja en la reforma financiera a los grandes bancos, aquellos que los Estados no dejan caer por su efecto multiplicador en el sistema. Buena parte de la propuesta que debe presentar el Consejo de Estabilidad Financiera ya est¨¢ madura desde junio. Ahora, el organismo internacional que impulsa la reforma, se ha parado a analizar el impacto econ¨®mico de la exigencia adicional de la capital a estas entidades, que concentran buena parte del cr¨¦dito internacional. Y su conclusi¨®n es contundente: "Como mucho tendr¨ªa un impacto muy modesto en la producci¨®n, cuando los beneficios de reducir los riesgos de crisis financieras ser¨¢n sustanciales".
El requisito adicional var¨ªa entre el 1% y el 2,5% de los activos
Esta crisis financiera, que explot¨® cuando se dej¨® quebrar en septiembre de 2008 a uno de esos gigantes, el banco Lehman Brothers, ha evidenciado la privilegiada posici¨®n de la gran banca en la econom¨ªa internacional. Su tama?o y su participaci¨®n en todo tipo de operaciones de cr¨¦dito, m¨¢s o menos arriesgadas, implican que cuando una de estas entidades amenaza con irse a pique, sea cu¨¢l sea la v¨ªa de agua (la brusca depreciaci¨®n de activos t¨®xicos, cr¨¦ditos inmobiliarios o t¨ªtulos de deuda p¨²blica), la incertidumbre se propaga como un reguero de p¨®lvora, el pr¨¦stamo se seca y la econom¨ªa real se contrae, como demostr¨® la Gran Recesi¨®n. Eso pone una presi¨®n casi ineludible sobre los Estados que se aprestan a poner dinero p¨²blico cuando uno de estos gigantes est¨¢ en apuros. Y el banco franco-belga Dexia es solo el ¨²ltimo bot¨®n de una muestra prolija.
La constataci¨®n de la enorme influencia de los gigantes financieros en la econom¨ªa mundial ha activado varias iniciativas para extremar su vigilancia y para evitar que el peso de crisis bancarias futuras vuelva a recaer en los contribuyentes. Por mandato del G-20, el Consejo de Estabilidad Financiera decidi¨® dar un tratamiento espec¨ªfico a las "entidades sist¨¦micas" dentro de la reforma financiera. Si a todos los bancos se les exigir¨¢ m¨¢s capital para que tengan m¨¢s capacidad de asumir futuras p¨¦rdidas (el ratio de capital ordinario debe subirse del 2% al 7% de los activos ponderados por riesgo entre 2013 y 2019), a los grandes bancos se les impondr¨¢ un recargo adicional.
El comit¨¦ de Basilea, que re¨²ne a los principales bancos centrales, ya plante¨® en junio establecer cuatro tramos de recargo para las entidades sist¨¦micas, que oscila del 1% al 2,5% adicional seg¨²n su importancia en el sistema financiero internacional. En definitiva, el capital de mayor calidad (acciones y reservas) que se exigir¨¢ a los grandes bancos en 2019 ir¨¢ del 8% al 9,5% de los activos ponderados por riesgo.
A partir de esas nuevas variables (un recargo adicional de entre el 1% y el 2,5% a una treintena de entidades), los t¨¦cnicos de varios bancos centrales han hecho simulaciones sobre el impacto econ¨®mico de esta medida. La conclusi¨®n es que el aumento de capital puede llevar a los bancos a encarecer los cr¨¦ditos, pero de manera muy limitada. Y que eso tendr¨¢ una incidencia casi inapreciable en la marcha de las econom¨ªas afectadas, apenas un 0,01% del PIB menos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.