Canciones 'soul' de ida y vuelta a Nigeria

Lo hizo a la vieja usanza. Sali¨® un d¨ªa a la calle en Hamburgo y vio un cartel de un peque?o sello discogr¨¢fico llamado Yo mama's. Entr¨®, sac¨® su maqueta de dos temas y les solt¨®: "Soy cantante, me llamo Nneka, si os gusta pod¨¦is producirme". As¨ª de chula. Y funcion¨®. "S¨ª, fue bastante old school. Sin m¨¢nager, contactos... nada". Y carec¨ªa de todo, b¨¢sicamente, porque hab¨ªa llegado a la ciudad dos a?os antes huyendo de Nigeria, sin un duro ni contactos. Pas¨® meses en un asilo con gente sin hogar y drogadictos. Luego, esta mestiza mitad africana mitad alemana, acab¨® en una instituci¨®n de monjas y la cosa empez¨® a mejorar: consigui¨® un trabaj¨® y empez¨® a estudiar arqueolog¨ªa. ?La m¨²sica? Una terapia, dice, para afrontar todo el suceso biogr¨¢fico.

Una historia rocambolesca y delicada. Ella no est¨¢ muy c¨®moda hablando del tema. "Me march¨¦ de Lagos por cosas horribles. No quiero profundizar mucho. Llegu¨¦ a Hamburgo sola, sin conocer a nadie. Tuve que aprender alem¨¢n... Y no quise saber nada de ?frica en tres a?os. Solo quer¨ªa una buena educaci¨®n y una vida sin violencia".

Desde entonces ha pasado de todo. Nneka (Warri, Nigeria, 1980) publica ahora Soul is heavy (Sony), su tercer disco fruto de una educaci¨®n musical autodidacta y buenas influencias. Su afro-soul, repleto de mensajes pol¨ªticos y cierto aire rap, ha entusiasmado a artistas como Lenny Kravitz, The Roots o Nas, que la han llevado de gira o remezclado alguno de sus temas. Y a todo eso, en el mejor momento, ha decidido que era el momento de volver a Nigeria. "Han pesado en este ¨¢lbum asuntos como las revoluciones en Libia, los talibanes en Nigeria... Mi mensaje no puede funcionar si no soy aceptada en mi propia casa. No quiero ser una extranjera en Nigeria. Por eso vuelvo".

Donde naci¨® han tardado en aceptar su m¨²sica. Solo ha cuajado cuando han podido asociarla a otras artistas como Asa, tambi¨¦n nigeriana y creadora de un sonido reconocible para ellos fuera de sus fronteras. "Desde que sal¨ª en el programa de David Letterman todo ha cambiado. Eso ayud¨®. Pero es una m¨²sica complicada. La gente no quiere afrontar la realidad. Quieren la m¨²sica para olvidar, beber, divertirse... Mi m¨²sica habla de sus problemas, de la corrupci¨®n, la religi¨®n".

?Y todo este ¨¦xito y su nueva vida tienen algo de malo? "No s¨¦ si nunca la tuve, pero echo de menos una cierta paz mental. Cuando no estaba en esto todo era m¨¢s casual... Pod¨ªa tomarme una copa de vino, fumarme un cigarro cuando me daba la gana... ahora estoy con eso del deporte, la comida org¨¢nica, vivir sano...".