"Tengo mal perder y peor ganar"
Pregunta. ?El sentido del humor tiene color?
Respuesta. En mis a?os de aprendizaje hab¨ªa un director que dec¨ªa a los actores: "Esta escena la quiero azul". Y yo quedaba rigurosamente perplejo. En mi caso, el sentido del humor s¨ª tiene color.
P. Ya. Negro. ?Y eso?
R. S¨ª [r¨ªe]. Alguna vez le preguntaron a Botero que por qu¨¦ pintaba pura gente gorda, y contest¨®: ?Es que no son as¨ª?
P. En el comunicado que hizo, tras su pataleta en el Festival de San Sebasti¨¢n, dec¨ªa que se arrepiente de las entrevistas que ha dado. A¨²n est¨¢ a tiempo de despedirme.
R. No, estoy esperando a leerla para arrepentirme.
P. ?Tiene tan malas pulgas como dicen?
R. No. Es lo que en Espa?a han llamado con justicia la leyenda negra. Cuando era un director muy jovencito decid¨ª tenerlas, y se han prolongado durante 46 largos a?os de carrera. Ya no es as¨ª, pero Ford dec¨ªa: entre la realidad y la leyenda, imprime la leyenda.
P. Pues hay que ver la que mont¨® en San Sebasti¨¢n. Qu¨¦ mal perder tiene, ?no?
R. Tengo mal perder... y peor ganar [r¨ªe].
P. Y esas despedidas desairadas... ?No va a volver nunca a los sitios donde no le premien?
R. No volver¨ªa a ning¨²n lado. Alex de la Iglesia, generosamente, dijo: Todos tenemos una mala tarde.
P. Vaya frase de seudoarrepentimiento: "Habl¨® la ira". ?Por qu¨¦ ca?er¨ªas se le desparram¨®?
R. Por las que se desparrama siempre: por los ojos, por las orejas, por la nariz. Y es dif¨ªcil andarse tapando todos los orificios.
P. "No estaba borracho, ni soy un ni?o". ?Est¨¢ seguro de lo primero?
R. De lo primero, absolutamente seguro, porque tengo pruebas. De lo segundo es de lo que ya me cuesta. La cara esta que tengo no corresponde al que se mira en el espejo y dice: ?Qui¨¦n es el viejito?
P. ?La vida es tan cutre y negra como en Las razones del coraz¨®n, su Madame Bovary revisitada?
R. S¨ª, por supuesto, pero hay opciones, alternativas. Cuando me preguntan si soy optimista, digo que lo suficiente como para poder hacer estas cosas tan tremendas. Porque hay un momento en que se acaban y la gente dice: Hombre, era un sue?o.
P. ?Y usted ser¨ªa capaz de tener, adem¨¢s de su mujer, una amante saxofonista?
R. Flautista. Flautista, s¨ª.
P. Dice sentirse extra?o en un mundo que no es el suyo. No habr¨¢ pensado en tomarse un lingotazo de matarratas, como su protagonista.
R. Pues de pronto se piensa. Vivir en un mundo donde ya eres periferia de la periferia se vuelve complejo. Un mundo donde gracias a la parafernalia se est¨¢n aboliendo los recuerdos es un mundo donde yo ya no quepo.
P. Y el matarratas, en la mesilla de noche.
R. Ah, s¨ª, por supuesto. Por ah¨ª est¨¢ siempre.
P. Bonito reproche al marido conocedor: "Ni siquiera me dejaste tener un pinche adulterio clandestino como Dios manda".
R. Est¨¢ bien, s¨ª. En este mundo que les corresponde a los j¨®venes no s¨¦ cu¨¢les son las profundidades del adulterio, pero en el m¨ªo era h¨²medo, oscuro, nocturno, secreto.
P. ?Ha tenido muchos de esos?
R. No, no.
P. Los suyos no eran ni h¨²medos, ni oscuros ni secretos.
R. Ni adulterios.
P. ?Cu¨¢l es el bolero que mejor le define?
R. Perfume de gardenias. No es el que m¨¢s me define, pero s¨ª el que m¨¢s me gusta. Est¨¢ en la pel¨ªcula, y en otras que he hecho. El que m¨¢s me define, No me platiques m¨¢s, de Lucho Gatica, que habla de los recuerdos.
P. ?Qu¨¦ santos del cine o la literatura presiden su altarcillo?
R. San Luis Bu?uel y san Jorge Luis Borges. Y una bola de compa?¨ªas dign¨ªsimas.
P. Cuenta que no es ni reflexivo ni equilibrado. ?Qui¨¦n le aguanta?
R. Mi mujer, nada m¨¢s. Ya no me queda m¨¢s que ella. Y mis hijos, quiz¨¢s, porque viven fuera de M¨¦xico.
P. "No invitar¨ªa a comer a ninguno de mis personajes". ?Pretende que paguen ellos?
R. No. Lo que pretendo es no verlos. Yo les tengo agradecimiento, emoci¨®n y cari?o, siempre y cuando los vea en una pantalla. No conversar¨ªa con ellos nunca.
P. ?Por qu¨¦ dice que a su cine le va mal siempre?
R. Porque es cierto.
P. Por una vez que no le den un premio...
R. Huy, no, no es por eso. Si yo he perdido una cantidad de premios enciclop¨¦dica, oce¨¢nica. He tenido mi fortuna de ganar un mont¨®n, pero he perdido much¨ªsimos.
P. Entonces no es que amenace con no volver a San Sebasti¨¢n. ?Amenaza con volver?
R. Voy a hacer primero la pel¨ªcula, y despu¨¦s veo. Uno tiene que ver si es digno de. Porque a los festivales uno no va y te toman. Te invitan o no.
P. La pelota est¨¢ en el tejado donostiarra.
R. S¨ª.
P. Y usted rezongar¨¢: vaya jurado, vaya presidente, vaya todo...
R. My Godness!
Perfil
Tiene 67 a?os y dos hijos, y acaba de estrenar en Madrid su ¨²ltima pel¨ªcula, cuya ausencia de galardones en San Sebasti¨¢n tanto desbordamiento verbal le produjo. Le gusta leer y ver la televisi¨®n, y dice que va poco al cine porque le decepciona much¨ªsimo. Entre sus grandes virtudes, arreglar "cosas peque?itas, como la tostadora", y leer siempre muy bien todas las instrucciones, "g¨¦nero literario que ha bajado de nivel seriamente".
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