Decir "matrona" es sexista en el campus

"Ser humano", "humanidad" o "persona" por "hombre"; "las personas adultas" o "la edad adulta" por "los adultos"; "el cliente" por "la clientela"; "personal de obstetricia" por "matrona". Las anteriores son algunas de las expresiones no sexistas que ofrece una gu¨ªa editada por el Servizo de Normalizaci¨®n de la Universidade de Santiago para hacer m¨¢s visible el papel de la mujer en la redacci¨®n de sus normas, textos cient¨ªficos y documentos internos. La publicaci¨®n, presentada ayer por el Servizo de Normalizaci¨®n y redactada por Alba Cid y Manuel Berm¨²dez, aconseja a la comunidad universitaria un cambio en los h¨¢bitos de redacci¨®n, como el uso de la doble flexi¨®n o la feminizaci¨®n de profesiones a las que la mujer se ha incorporado recientemente.

Seg¨²n la ling¨¹ista Teresa Moure, que apoy¨® con su asistencia la presentaci¨®n de la gu¨ªa, ciertos usos ling¨¹¨ªsticos permiten "la reproducci¨®n del orden simb¨®lico establecido". Entre ellos, se?ala el masculino como g¨¦nero neutro que, aunque correcto gramaticalmente, "fuerza a las mujeres a distinguir desde ni?as si est¨¢n incluidas o no en la palabra "hombre". El peque?o cuaderno aboga por lo que Moure llama "f¨®rmulas de concordia". "Este documento quiere ser una gu¨ªa pr¨¢ctica, una propuesta", propugna Alba Cid, una de las autoras del manual, que ya est¨¢ a disposici¨®n de los interesados en la web de la Universidade de Santiago. El texto condena la vinculaci¨®n de cada sexo a una profesi¨®n -"los m¨¦dicos y las enfermeras", como si el primero fuese un trabajo exclusivo de hombres y el segundo de mujeres- y t¨®picos como el de la frase "detr¨¢s de un gran hombre hay una gran mujer".

El manual ofrece, adem¨¢s, una lista de f¨®rmulas para escapar de los "actos comunicativos sexistas". Ni siquiera la flexi¨®n de ambos g¨¦neros - "los chicos y las chicas", por ejemplo- se libra de esta etiqueta si reproduce el orden cl¨¢sico, primero el masculino y despu¨¦s del femenino. "Est¨¢ claro que esta opci¨®n implica el mantenimiento del statu quo, y jerarquiza, al presentar como eterno secundario lo femenino", explican los autores en la gu¨ªa. El manual propugna el uso de recursos gr¨¢ficos como la barra, siempre que el femenino no vaya siempre en segundo lugar, "como elemento ap¨¦ndice, y veta la arroba en documentos institucionales, aunque s¨ª la aconseja para el correo electr¨®nico.

Para los impresos de matr¨ªcula, el documento recomienda sustituir la f¨®rmula Sr./ Sra. por el neutro "nombre o "nacido en" por "natural de". Para los carteles, sugiere el uso de sustantivos abstractos y colectivos. Mejor decir Vicerreitor¨ªa de Profesorado que referirse al Vicerreitor.