Saul Williams contra los t¨®picos

El m¨²sico, poeta y actor estadounidense Saul Williams no sabe qu¨¦ va a recitar el pr¨®ximo viernes en La Casa Encendida. Programado en el marco del festival Yuxtaposiciones, el autor de List of demands viene a realizar un recital de spoken word. Sabe, pues, que habr¨¢ palabras, pero no sabe a¨²n cu¨¢les. "Depende de c¨®mo me sienta aquella noche. Lo decidir¨¦ antes de subir al escenario. Mis recitales hoy son un poco como los actos de protesta en Madrid o Nueva York", comenta desde su ¨¢tico en Par¨ªs. "Surgen de la pulsi¨®n de saber que algo diferente debe suceder, pero sin saber exactamente qu¨¦ ni c¨®mo lograrlo. Esto es lo m¨¢gico de estas protestas, que la gente siente una especie de llamada a la participaci¨®n y la queja. Por eso son tan festivas y coloridas, porque a¨²n no han solucionado el problema de qu¨¦ vendr¨¢ despu¨¦s. As¨ª vivo hoy mi carrera".

Saul Williams tampoco tiene muy claro c¨®mo definir Volcanic sunlight, su retorno discogr¨¢fico tras cuatro a?os de silencio, que saldr¨¢ al mercado una semana despu¨¦s de su actuaci¨®n en Madrid. Hasta horas antes de esta entrevista, hab¨ªa decidido publicitarlo como su ¨¢lbum "sin ira". Con un sonido menos agresivo que sus anteriores referencias musicales y el verbo menos arisco de toda su carrera, tanto musical como po¨¦tica, el largo se presentaba como un acto de ruptura en un devenir marcado por la denuncia, a veces l¨ªrica, a veces confrontacional, de las miserias de este mundo. Pero hoy ya no. "He estado escuchando las canciones de nuevo y no creo que haya suavizado mi discurso. Simplemente he buscado m¨¢s la melod¨ªa. Siempre he sentido envidia de los artistas que tiene temas divertidos que tocar en directo y que hacen que la gente levante las manos y se bese. Yo quer¨ªa unos cuantos de esos y aqu¨ª los tengo".

Este neoyorquino de 39 a?os salt¨® a la fama a finales de los a?os noventa, cuando ejerci¨® de guionista y protagonista de Slam, un filme que, a partir de su biograf¨ªa como poeta callejero, narraba la g¨¦nesis de este movimiento en el que se encontraban Allen Ginsberg y Public Enemy. La pel¨ªcula se llev¨® el Gran Premio del Jurado en Sundance y la Camera d'Or en Cannes. "Estuvo bien, porque yo hab¨ªa estudiado arte dram¨¢tico y me mor¨ªa por actuar. El problema es que me toc¨® escribirla y eso es costoso. Siempre quise ser actor porque es f¨¢cil. Adem¨¢s, a pesar de ser un filme independiente, tuve que hacer muchas concesiones. Me sirvi¨® para comprender que el universo alternativo est¨¢ m¨¢s cargado de pol¨ªtica que el masivo. Mira, he editado cuatro libros de poes¨ªa con la MTV y jam¨¢s he tenido un problema. Cada idea que les presento la celebran como genial. Supongo que me tienen publicando poes¨ªa para limpiar su imagen de lavacerebros adolescentes, pero, sea como sea, mi ego les debe la vida". Desde entonces, ha aparecido en otros cinco filmes. Y acaba de retornar de Senegal, donde ha estado rodando la producci¨®n francesa Aujourd'hui.

A los tres a?os de arrasar en la pantalla grande, Williams debutaba con el disco Amethyst rockstar, producido por Rick Rubin y publicitado como el largo que iba a devolver el posicionamiento intelectual al mundo del hip-hop. "Rick Rubin quer¨ªa que hiciera hip-hop. Me negu¨¦". Los recuerdos que tiene el poeta del productor rey Midas que devolvi¨® a la vida a Johnny Cash no son demasiado buenos. "?l asum¨ªa que, como ven¨ªa del arte callejero y era negro, deb¨ªa hacer un disco de hip-hop. Pero las cosas no son as¨ª. Blancos y negros tenemos tres siglos de historia en com¨²n en EE UU", interviene el autor, quien insiste en desmontar la mayor¨ªa de mitos sobre los que se erige lo m¨¢s celebrado de su biograf¨ªa. "Con 13 a?os rapeaba sobre t¨ªas y coches. Menudo rebelde. List of demands, mi tema supuestamente m¨¢s combativo, lo escrib¨ª un d¨ªa soleado en que me encontraba la mar de feliz, pero necesitaba una producci¨®n salvaje para contrarrestar ese hecho. El resultado fue que incluso Nike se la qued¨® para un anuncio, algo que me vali¨® cr¨ªticas por parte de un sector del p¨²blico y la cr¨ªtica, que no entendieron lo maravilloso de que una compa?¨ªa como esa haga famoso un tema como aquel".

Mucho mejores recuerdos guarda de sus posteriores experiencias con Trent Reznor, l¨ªder de Nine Inch Nails. "Trent siempre ha sido muy amable conmigo y ha entendido tanto el mensaje de mis letras como mi inter¨¦s musical. Yo no sab¨ªa qui¨¦n era ¨¦l cuando se interes¨® por producirme. Solo hab¨ªa visto muchos adolescentes de negro con cara de pocos amigos que luc¨ªan camisetas de su grupo. No sab¨ªa qu¨¦ iba salir de todo eso. Pero as¨ª es como he funcionado siempre y no me ha ido mal. Veo todo Par¨ªs desde mi azotea".

Saul Williams act¨²a el 4 de noviembre en La Casa Encendida.