ETA tambi¨¦n se ve agotada y da el relevo

Tres semanas despu¨¦s de anunciar el cese definitivo de la violencia y una antes del 20-N, ETA ha explicado, en una entrevista en el diario Gara, su decisi¨®n, planteada como irreversible. Aunque el texto mantiene la ret¨®rica de ETA, aporta claves informativas. Reconoce que la Ley de Partidos y la desafecci¨®n de la izquierda abertzale, tras su ruptura de la tregua de 2006, est¨¢n en el origen del agotamiento de la v¨ªa terrorista. Admite que su decisi¨®n de terminar es unilateral, no sometida a negociaci¨®n. Y tras reconocer que se equivoc¨® al continuar con el terrorismo, tras la tregua de 2006, y que la izquierda radical acert¨®, delega en esta la gesti¨®n pol¨ªtica. ETA se reserva la gesti¨®n de los presos. El texto tiene un aroma de despedida, con un balance de sus 52 a?os.

En negritas aparecen las frases m¨¢s representativas de ETA.

?Por qu¨¦ ETA decide el cese definitivo?

"La lucha armada ha hecho su aportaci¨®n, pero ha mostrado tambi¨¦n se?ales de agotamiento".

ETA admite, por vez primera, que el terrorismo se agota y por eso proclama su cese definitivo. Y admite, tambi¨¦n, que el terrorismo se hab¨ªa convertido en un obst¨¢culo para el desarrollo de la izquierda abertzale por la decisi¨®n del Estado de ilegalizarla, con la Ley de Partidos, al vincularla con ella. "Por eso ha tomado ETA esa decisi¨®n hist¨®rica. Para recoger la cosecha de estos a?os de lucha y ponerla al servicio de esa estrategia [la de la izquierda abertzale]".

No ha habido negociaciones

"No se ha producido ninguna reuni¨®n directa entre ETA y el Gobierno".

ETA asegura que, tras la ruptura de la tregua de 2006, se acabaron las negociaciones con el Gobierno, aunque apunta que el Ejecutivo s¨ª conoc¨ªa sus movimientos, lo mismo que el PP. ETA aclara que el proceso de cese definitivo del terrorismo fue una iniciativa unilateral de la izquierda abertzale sin ning¨²n proceso de contraprestaciones.

Tensiones entre ETA y la izquierda radical

"La izquierda abertzale acert¨® de pleno en su reflexi¨®n... Hubo diferentes lecturas respecto a abrir el proceso y sobre la funci¨®n de la lucha armada".

ETA confirma que, tras su ruptura de la tregua de 2006 con el atentado de la T-4 en Barajas, mantuvo tensiones con la izquierda abertzale. Mientras ETA decidi¨® volver al terrorismo y asesin¨® a 11 personas, la izquierda radical apost¨® por v¨ªas pac¨ªficas y le censur¨® esa campa?a. Finalmente, la izquierda abertzale gan¨® esa batalla. ETA llega a admitir en la entrevista que "ha hecho autocr¨ªtica porque en ese momento no cumpli¨® debidamente la funci¨®n que le correspond¨ªa hacia la izquierda abertzale".

La agenda de la izquierda 'abertzale' tras el 20-N

"Sea cual sea el color que tenga el Gobierno de Espa?a tras el 20-N, tendr¨¢ sobre la mesa las reivindicaciones sobre los presos vascos, de que termine con la estrategia de ilegalizaci¨®n y de que reconozca los derechos del pueblo vasco".

ETA plantea una hoja de ruta coincidente con la de la izquierda abertzale en la que la banda se reserva para s¨ª el futuro de presos y pr¨®fugos, lo que denomina "las consecuencias del conflicto". Es la izquierda radical la que tramitar¨¢ la legalizaci¨®n de su partido, Sortu, as¨ª como la reivindicaci¨®n del derecho a la autodeterminaci¨®n. ETA admite que las cuestiones pol¨ªticas quedan fuera de su ¨¢mbito.

ETA renuncia a intervenir en pol¨ªtica definitivamente

"ETA nunca ser¨¢ una amenaza para ese proceso... ETA no estar¨¢ sentada en la mesa de la negociaci¨®n pol¨ªtica...".

Todos los procesos negociados de los Gobiernos con ETA han fracasado porque la banda terrorista los quiso tutelar. En esta ocasi¨®n no hay un proceso negociado. Es unilateral y, adem¨¢s, por vez primera, es su anterior brazo pol¨ªtico quien lo dirige y no admite que la banda terrorista intervenga.

Las cosas est¨¢n de tal modo que ETA admite que "no hay garant¨ªas de que vaya a salir adelante" el derecho a decidir que plantea la izquierda abertzale. "Eso depende del nivel de adhesi¨®n que sea capaz de recabar la propuesta".

Tambi¨¦n admite resignadamente que el proceso pol¨ªtico puede alargarse en el tiempo. "El proceso se puede alargar en el tiempo en funci¨®n del comportamiento de los Estados y de la madurez de las fuerzas pol¨ªticas. Pero no hay otra alternativa que no sea el propio proceso. El pueblo lo tiene que alimentar para llevarlo hasta el final".

Reivindicaciones propias de ETA. Presos y desarme

"Respecto a la agenda negociadora, en nuestra opini¨®n, hay tres temas principales: la vuelta a casa de presos y exiliados, la inutilizaci¨®n de las armas de ETA y la desmilitarizaci¨®n de Euskal Herria".

ETA centra su papel en el objetivo de que los presos de ETA, as¨ª como los huidos, puedan regresar a sus casas. En la entrevista no precisa las prioridades. Se limita a reclamar que el nuevo Gobierno "deber¨ªa resolverlo cuanto antes". Tambi¨¦n est¨¢ dispuesta a adoptar compromisos sobre su desarme y lo vincula a la negociaci¨®n sobre presos y huidos. Apunta que la Comisi¨®n Internacional de Verificaci¨®n podr¨ªa jugar un papel en esa negociaci¨®n.

V¨ªctimas de ETA

"La confrontaci¨®n armada de las ¨²ltimas d¨¦cadas ha causado mucho sufrimiento, sin duda. Tambi¨¦n las acciones de ETA. No somos insensibles".

ETA admite, por vez primera, que sus acciones terroristas han causado sufrimiento. Pero lo enmarca en un conflicto hist¨®rico en el que se retrotrae, al menos, hasta el bombardeo de Gernika de 1937 por la Legi¨®n Condor, durante la Guerra Civil.

La actitud de Rajoy y de los partidos ante ETA

"Es verdad que esa reacci¨®n [de Rajoy] rompe con el discurso negativo, agresivo y sin sentido de hasta ahora. Ante esta coyuntura hist¨®rica quien tiene muchas posibilidades de ser presidente de Espa?a debe actuar con responsabilidad y es de suponer que Rajoy lo ha entendido as¨ª".

La izquierda independentista presion¨® sobre ETA para que declarara el cese definitivo de la violencia antes del 20-N. De ese modo, facilitaba el que el PP, m¨¢s reacio que el PSOE a tener en cuenta los pasos de ETA, tuviera m¨¢s dif¨ªcil la marcha atr¨¢s en el caso probable de que gane las elecciones. Lo que ha logrado la izquierda abertzale y ETA es que, al menos, Rajoy mantenga la prudencia y no rechace de antemano su voluntad de acabar con la violencia manifestada en su comunicado del 20 de octubre.

Intento de justificar d¨¦cadas de terrorismo

"Frente al entramado jur¨ªdico-pol¨ªtico que buscaba la desaparici¨®n de Euskal Herria, ETA adopt¨® una trascendente decisi¨®n: continuar la lucha armada. Y mediante ella se impidi¨® que el modelo de imposici¨®n de la reforma se afianzase en Euskal Herria".

ETA trata en este apartado de buscar argumentos para justificar ante las bases de la izquierda independentista lo imposible, la continuidad del terrorismo tras la llegada de la democracia en Espa?a. Su argumentaci¨®n es que la actividad de la banda terrorista ha conseguido que numerosos vascos asuman hoy el derecho a decidir y acusa al PNV de no haber trabajado en esa direcci¨®n.

Aroma de despedida

La entrevista de ETA denota un aroma de despedida. No solo porque asume que el cese de la violencia es irreversible. Tambi¨¦n porque, por vez primera, hace un an¨¢lisis retrospectivo de la historia de ETA.

As¨ª, considera que la decisi¨®n del 20 de octubre, de cese definitivo de la violencia, es el tercer hito m¨¢s importante de sus 52 a?os de historia. Lo equipara a su nacimiento, en 1959, y a su decisi¨®n de continuar el terrorismo, tras la llegada de la democracia en Espa?a.

Hace tambi¨¦n un balance de sus procesos negociadores. El de Xiberta, en 1977, en el que rompi¨® con el PNV por la decisi¨®n de este partido de presentarse a las elecciones de 1977. El de Argel, en el que "logramos sentar al Estado en la mesa de negociaci¨®n". Y el del proceso de 2006, del que dice que se fij¨® el m¨¦todo para el final.