Abu Dabi para bien y para mal
Un a?o despu¨¦s de perder el t¨ªtulo en la ¨²ltima carrera, Ferrari agita su estructura ante un Red Bull imparable
Por m¨¢s obvio que parezca, para tener la oportunidad de perder un t¨ªtulo mundial de f¨®rmula 1 en la ¨²ltima carrera de la temporada es imprescindible llegar a tal cita con posibilidades matem¨¢ticas de ganarlo, un razonamiento que el a?o pasado, en Abu Dabi, ofreci¨® un tremendo contraste entre la euforia que se desat¨® en el taller de Red Bull y la desolaci¨®n que tritur¨® al de Ferrari. Impulsado por el prototipo m¨¢s eficaz, de largo, de la parrilla, la escuder¨ªa de los b¨®lidos energ¨¦ticos se vio en 2010, por primera vez en su corta historia (debut¨® en 2005), en condiciones de imponerse en un campeonato.
La inexperiencia a la hora de manejar situaciones potencialmente arriesgadas entre Sebastian Vettel y Mark Webber, su pareja de pilotos, impidi¨® que el Mundial se decidiera a favor de Red Bull mucho antes de aquella dram¨¢tica ¨²ltima parada del calendario, en la que tanto ellos dos como Fernando Alonso, que lleg¨® como l¨ªder, pod¨ªan tocar la gloria. La flojera que atenaz¨® a Webber y Ferrari abri¨® la puerta a Vettel, que, inicialmente, era el que menos opciones ten¨ªa, y el alem¨¢n no desaprovech¨® el regalo.
Vettel iguala el r¨¦cord de Mansell (1992) de 14 'poles' en una temporada
Unos y otros sacaron sus conclusiones acerca de lo que hab¨ªa ocurrido aquel d¨ªa, aunque sus lecturas fueron opuestas debido a sus perspectivas, muy distintas. Mientras el objetivo de Ferrari ha pasado a ser el de tratar de acercarse a un curso como aquel, Red Bull se ha propuesto, y logrado, lo contrario: rematar la faena tan pronto como sea posible. Para los gerifaltes del constructor italiano, la recuperaci¨®n en la segunda parte de la temporada demuestra la magia que reside en Maranello.
Dos planteamientos tan alejados se explican a partir de la diferencia de rendimiento que hasta ahora han ofrecido el RB7 y el 150? Italia. Subido al primero, Vettel se volvi¨® a proclamar campe¨®n, esta vez en Jap¨®n, cuatro grandes premios antes del final. "Lo que ha ocurrido es que Red Bull no ha cometido los errores en la gesti¨®n de las carreras que el a?o pasado provocaron que no fuera antes campe¨®n, fallos t¨ªpicos en un equipo que no est¨¢ habituada a pelear por ganar campeonatos", advierte Alonso. Con la lecci¨®n aprendida, Baby Schumi acumula 11 victorias y 14 poles (la ¨²ltima se la adjudic¨® ayer), con lo que iguala el r¨¦cord, que hab¨ªa pertenecido en exclusiva durante casi 20 a?os a Nigel Mansell, que lo alcanz¨® en 1992 en su camino hacia el t¨ªtulo.
La Scuderia inici¨® una profunda reestructuraci¨®n que, paulatinamente, se ha ido completando a largo del a?o y que comenz¨® con el despido de Chris Dyer, se?alado indirectamente como responsable del error de c¨¢lculo que le cost¨® el cetro a Alonso, y con una serie de contrataciones. Las m¨¢s sonadas fueron las de Pat Fry (hab¨ªa llegado en junio procedente de McLaren con la recomendaci¨®n del espa?ol) y Neil Martin, que se puso al frente del departamento de Desarrollo de Operaciones, una nueva divisi¨®n creada para aumentar la fiabilidad del proceso de toma de decisiones. El ejercicio est¨¢ a punto de terminar y toda esta reestructuraci¨®n no parece haber causado el efecto esperado en la marca de Maranello. "No me afecta volver a correr en Abu Dabi porque no considero que perdi¨¦ramos el Mundial all¨ª", dec¨ªa Alonso en As hace unos d¨ªas.
Desde el taller de los monoplazas de Il Cavallino argumentan que el mal que afecta al equipo es operativo, una falta de adaptaci¨®n al nuevo ecosistema de recortes que se ha impuesto en el certamen. "Cambiar la mentalidad de la gente lleva tiempo. No hay que olvidarse de que venimos de una situaci¨®n en la que no ten¨ªamos l¨ªmites ni restricciones en ning¨²n aspecto. Ganar era y sigue siendo lo m¨¢s importante para nosotros, pero las circunstancias que nos rodean ahora son completamente distintas a las de hace algunos a?os", matiza Stefano Domenicali, m¨¢ximo responsable de los b¨®lidos rojos en las carreras, que lleva 20 a?os en la compa?¨ªa, pero que nunca hab¨ªa estado tan exigido como ahora.
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