Lesiones no acreditadas
La sentencia del Supremo se esfuerza en demostrar que las torturas podr¨ªan insertarse en la kantada, "coartada falsa" o "explicaci¨®n ficticia o deformada" que confirmar¨ªan los documentos de ETA, por lo que "la inmensa cantidad de golpes y agresiones de todo orden" que los etarras dijeron haber recibido "pueden responder a instrucciones org¨¢nicas recibidas, de cumplimiento operativo".
Para el Supremo, los dos forenses que examinaron a los detenidos en San Sebasti¨¢n pudieron emitir un dictamen comparando "las lesiones evidenciadas por los detenidos con el relato de su producci¨®n por los propios lesionados". Es decir, "no dictaminaron sobre la detenci¨®n y los forcejeos, sino sobre los malos tratos y agresiones", partiendo "de un presupuesto, con todos los visos de falaz", de acuerdo con su particular versi¨®n de los hechos (kantada).
En cambio, otros cuatro peritos (dos de la Audiencia Nacional y dos de la defensa) "reputaron las lesiones compatibles con una detenci¨®n violenta". Respecto a la fractura de costilla con neumot¨®rax de Portu, existe "plena unanimidad" entre los peritos, dice el Supremo, de que se produjo al d¨ªa siguiente, "por factores externos sobrevenidos no bien determinados", pero que ya no afectar¨ªan a los que practicaron la detenci¨®n.
El Supremo no considera desvirtuada la presunci¨®n de inocencia "al no resultar debidamente acreditada la comisi¨®n de los delitos de torturas o lesiones". Y descartado "un exceso de violencia en la detenci¨®n", los acusados "actuaron en cumplimiento de un deber, lo que conduce a su libre absoluci¨®n".
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