Manual b¨¢sico de supervivencia en la crisis del euro
Diccionario de los conceptos clave de la jerga comunitaria para poder seguir la decisiva cumbre de los d¨ªas 8 y 9
Las turbulencias financieras est¨¢n poniendo en peligro los cimientos de la Uni¨®n Europea. Estas son las instituciones, los foros y las cuestiones de los que depende su supervivencia.
CUMBRE EUROPEA El m¨¢ximo foro pol¨ªtico
Es el nombre que tambi¨¦n se emplea para el Consejo Europeo que re¨²ne a los 27 Jefes de Estado o de Gobierno de la Uni¨®n Europea. Presidido por Herman Van Rompuy, cuenta tambi¨¦n con la participaci¨®n del presidente de la Comisi¨®n Europea, Jos¨¦ Manuel Dur?o Barroso, y, si se abordan asuntos econ¨®micos y monetarios, del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi. Es el m¨¢ximo ¨®rgano pol¨ªtico de la UE. Si se considera el elevado n¨²mero de sus miembros se aprecian las dificultades de establecer verdaderos debates, pues las intervenciones est¨¢n forzosamente limitadas muy pocos minutos. La crisis ha multiplicado el n¨²mero de sus reuniones, aunque algunas de ellas, como las dos ¨²ltimas, son bastante fallidas. El Tratado exige cuatro reuniones anuales, pero en 2008, el Consejo se reuni¨® siete veces y en 2009 y 2010, seis cada a?o. Cada vez con m¨¢s frecuencia se realizan cumbres del euro, a las que solo asisten los l¨ªderes de los 17 pa¨ªses de la moneda ¨²nica.
PODERES DEL BCE El ¨²ltimo prestamista
Uno de los puntos clave de la pr¨®xima cumbre es lograr que Alemania permita al BCE actuar como "prestamista de ¨²ltima instancia". Es decir, que funcione como los dem¨¢s bancos centrales de los pa¨ªses occidentales (Reserva Federal de Estados Unidos, Banco de Inglaterra o Banco del Jap¨®n). Ello permitir¨ªa al BCE comprar toda la deuda soberana que fuera necesario, lo que desanimar¨ªa a los especuladores y facilitar¨ªa la rebaja de los tipos de inter¨¦s. Espa?a paga un 6% por su deuda p¨²blica, que es inferior en relaci¨®n con el PIB a la de Reino Unido o a la de Estados Unidos, aunque estos solo pagan poco m¨¢s del 2%. En estos pa¨ªses el banco central compra toda la deuda que haga falta. Los estatutos del BCE, inspirados por la experiencia de la inflaci¨®n galopante en Alemania de los a?os veinte del pasado siglo, que condujo al nazismo, centran sus responsabilidades en la contenci¨®n de la inflaci¨®n. A pesar de ello, desde mayo de 2010 el BCE empez¨® a comprar deuda de Grecia, Irlanda, Portugal, Espa?a e Italia, convirti¨¦ndose en el verdadero garante del euro. Hasta el momento ya ha invertido unos 200.000 millones en estas compras. Su presidente ha insinuado que podr¨¢ actuar con m¨¢s contundencia si los Estados asumen un mayor compromiso fiscal.
DIRECTORIO FRANCO-ALEM?N Los verdaderos mandatarios
La canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente franc¨¦s, Nicolas Sarkozy, son los verdaderos mandatarios de la UE. Ambos han aprovechado la crisis para extremar su visibilidad y exhibir su poder e influencia, adoptando decisiones que en ocasiones han supuesto una clara desautorizaci¨®n de Van Rompuy y Barroso. Han institucionalizado las reuniones bilaterales como la que ma?ana mantienen en Par¨ªs para preparar la cumbre. En 2010 han sido significativas las reuniones de Berl¨ªn (14 de junio); Deauville (18 de octubre) y Friburgo (11 de diciembre), o la de Par¨ªs del pasado agosto, en la que lanzaron el gobierno econ¨®mico de la zona euro.
UNI?N FISCAL Control de presupuestos
La otra cara de la negociaci¨®n de esta cumbre es el logro de una Uni¨®n Fiscal o Uni¨®n Presupuestaria. Es la condici¨®n impl¨ªcita que exige Merkel para aflojar las riendas al BCE. Aunque en teor¨ªa es independiente, sus componentes no mueven un dedo sin mirar antes a Berl¨ªn. La Uni¨®n Fiscal significar¨ªa un control de los presupuestos nacionales por parte de Bruselas, con poder para modificarlos y un endurecimiento de las sanciones (incluida la p¨¦rdida de voto en los Consejos o la imposibilidad de recibir fondos comunitarios) a los pa¨ªses que infringen los l¨ªmites de deuda o d¨¦ficit fijados en el Pacto de Estabilidad. Para efectuar estas tareas se nombrar¨ªa un ministro del euro o supercomisario, como el vicepresidente Olli Rehn pero con m¨¢ximos poderes, y se establecer¨ªa la posibilidad de demandar ante el Tribunal de la UE a los pa¨ªses infractores.
PACTO DE ESTABILIDAD Nuevas sanciones
Regula los l¨ªmites m¨¢ximos de d¨¦ficit (3%) y deuda (60%) en que pueden incurrir los Estados. Aunque se establec¨ªan sanciones pecuniarias a los infractores, hasta ahora nunca se han aplicado. Entre 2000 y 2007 ha sido vulnerado m¨¢s de cien veces. Francia y Alemania, 14 veces cada uno, y Espa?a, cuatro. En septiembre se reforzaron y ampliaron las sanciones, incluyendo las de desequilibrios macroecon¨®micos, pero ahora se quieren endurecer a¨²n mucho m¨¢s.
GOBIERNO DEL EURO Otro paso de integraci¨®n
Lanzado por Merkel y Sarkozy el pasado 16 de agosto, estar¨ªa formado por los jefes de Estados o de Gobierno de la zona euro, que se reunir¨ªan dos veces por a?o, y presidido por Van Rompuy. Ambos l¨ªderes piden que la regla de oro del equilibrio presupuestario se inscriba en las Constituciones de los pa¨ªses miembros, se establezca una tasa a las transacciones financieras, y un tipo y base com¨²n para el impuesto de sociedades.
FONDOS DE RESCATE A la espera del FMI
En mayo de 2010, tras la primera tormenta de deuda, se aprobaron dos fondos temporales para ayudar a los pa¨ªses que no se pod¨ªan financiar en el mercado. El Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) con 440.000 millones, que obtendr¨¢ fondos del mercado con garant¨ªa de los Estados, y el Mecanismo Europeo de Estabilizaci¨®n Financiera (MEEF), con 60.000 millones y con garant¨ªa de la Comisi¨®n Europea. Ambos ser¨¢n sustituidos por el fondo permanente a partir de 2013, el Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE), con un capital suscrito de 700.000 millones, para que tenga una efectividad de 500.000. Los intentos de potenciar el FEEF para atender las posibles necesidades de Italia y Espa?a han fallado. China, Brasil y M¨¦xico han declinado poner dinero al ver que los miembros de la UE no se arriesgaban. La UE busca ahora financiaci¨®n en el Fondo Monetario Internacional.
EUROBONOS Garant¨ªa solidaria
La Comisi¨®n Europea ha presentado una propuesta para realizar emisiones conjuntas de deuda europea que sustituir¨ªan a la nacional de cada pa¨ªs. Sugiere varias posibilidades: sustituci¨®n total o parcial de la deuda nacional hasta el 60% del PIB, con garant¨ªa solidaria de los pa¨ªses de euro, o emisi¨®n coordinada con garant¨ªa proporcional a las necesidades de cada Estado. En todos los casos, sobre todo en el primero, se logra una importante rebaja de los tipos de inter¨¦s y un mercado con una gran liquidez.
CAMBIOS EN EL TRATADO Obst¨¢culos legales
Muchas de las propuestas se?aladas, como la Uni¨®n Fiscal o las dos primeras formas de eurobonos, requieren una reforma del Tratado. Se barajan tres opciones. Una reforma general, lo que implica la convocatoria de una Conferencia Intergubernamental, con varios a?os de tr¨¢mite; un cambio a trav¨¦s de un protocolo, para lo que se puede aprovechar el Tratado de Adhesi¨®n de Croacia que se aprobar¨¢ el viernes, y un Tratado Intergubernamental expreso sin tener que pasar por la reforma del Tratado.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.