El l¨ªder del mayor sindicato peronista rompe con la presidenta argentina

El secretario general del mayor sindicato de Argentina, la Confederaci¨®n General del Trabajo (CGT), Hugo Moyano, replic¨® ayer con dureza a la presidenta Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner y llam¨® a reconstruir el peronismo, frente a un Partido Justicialista que es una "c¨¢scara vac¨ªa". Moyano anunci¨® que renuncia a todos los cargos que ocupa en el justicialismo, a nivel provincial y nacional, y record¨® a la presidenta que buena parte del 54% de los votos que obtuvo en las pasadas elecciones "son los de los trabajadores". "Que no se equivoquen, que no se olviden de que la votamos. ?Ahora resulta que somos chantajistas?", lanz¨®, en una alusi¨®n directa al discurso de investidura de Cristina Fern¨¢ndez, en el que advirti¨® contra "chantajes y extorsiones" sindicales.

El dirigente atribuye a la Casa Rosada maniobras para desalojarle de la CGT

El esperado discurso de Moyano, que celebraba el D¨ªa del Camionero en el estadio del Club Atl¨¦tico Hurac¨¢n, y que estaba siendo retransmitido en televisi¨®n, fue cortado porque coincidi¨® con la anunciada visita de la propia presidenta a una planta de Toyota en la localidad bonaerense de Z¨¢rate. La presidenta no se dio por aludida directamente, pero, en un breve discurso, mencion¨® la creaci¨®n de puestos de trabajo, el incremento de los salarios y las pol¨ªticas de apoyo industrial que desarrolla el kirchnerismo desde hace a?os. Cristina Fern¨¢ndez, que le "rob¨®" completamente la peque?a pantalla al l¨ªder sindical, record¨® una vez m¨¢s a su marido, el expresidente N¨¦stor Kirchner, fallecido hace un a?o, y se emocion¨® al recibir una flor de un ¨¢rbol que "¨¦l" plant¨® en 2005 en la misma f¨¢brica.

La presidenta hizo tambi¨¦n menci¨®n durante el acto al reciente hallazgo en Tucum¨¢n de una fosa com¨²n con los restos de 15 desaparecidos, entre ellos el senador peronista Guillermo Vargas Aignasse, cuyo hijo es actualmente diputado oficialista.

Moyano, de 57 a?os, dirigente del importante gremio de Camioneros, hab¨ªa anunciado ya su desacuerdo con la presidenta, a cuyos seguidores atribuye un intento de desalojarlo de la secretar¨ªa general de la CGT. Ante varios miles de sus fieles, que, en contra de lo esperado, no llegaron a llenar completamente el estadio, Moyano reclam¨® el dinero, una cifra superior a 12.000 millones de pesos (m¨¢s de 2.000 millones de euros), que, seg¨²n la CGT, el Gobierno debe a las obras sociales de los gremios y que "nadie sabe d¨®nde ha ido a parar".

Las reivindicaciones sindicales se eclipsaron casi frente a su duro discurso pol¨ªtico: "No puedo aceptar que otros tomen las decisiones que deber¨ªan tomarse en el seno del peronismo". "Renunciamos a los cargos, pero no a la lucha, como dijo Evita", asegur¨®. Entre el p¨²blico pudo verse alg¨²n cartel con la leyenda: "Eva Per¨®n no hay m¨¢s que una". "Ahora resulta que cuando hay un reclamo sindical, los trabajadores hacen chantaje o extorsionan. Los trabajadores no extorsionan a nadie, reclamamos leg¨ªtimamente nuestros derechos", proclam¨®, antes de hacer un llamamiento a "los peronistas de Juan y Eva Per¨®n a reconstruir el peronismo".

El secretario general de la CGT, uno de los gordos, como se denomina a los principales dirigentes sindicales de la central obrera, consider¨® que el Partido Justicialista era un espacio "intrascendente", ya que todo se decide fuera de ¨¦l. "Pero el peronismo est¨¢ en los trabajadores. Nadie m¨¢s que ellos han interpretado a Per¨®n", a?adi¨®.