Un ri?¨®n y un esca?o por amor

Detr¨¢s de la renuncia de Enric Millo a ser diputado por el Partido Popular en Girona no solo hay una pirueta para garantizar la estabilidad del PP catal¨¢n. En la decisi¨®n tambi¨¦n influye un drama familiar. Su esposa sufre un grave problema renal y la ¨²nica manera de garantizar su supervivencia es un trasplante. Ambos son compatibles. Esta es la historia de dos renuncias por amor: a un ri?¨®n y a un esca?o en San Jer¨®nimo.

El confeti resbalaba por la cabellera de una sonriente Alicia S¨¢nchez-Camacho que, copa de cava en mano, brindaba con los suyos por los buenos resultados del Partido Popular en Catalu?a. Era noche electoral del pasado 20-N y en una de las pantallas de plasma del sal¨®n del hotel Grand Marina, en Barcelona, se ve¨ªa c¨®mo Mariano Rajoy saludaba desde el balc¨®n de G¨¦nova. La Espa?a azul explotaba de alegr¨ªa y Girona no era la excepci¨®n. All¨ª, entre banderas y gritos, Enric Millo (Terrassa, 1960), el cabeza de lista popular en esa circunscripci¨®n, abrazaba a su esposa, Montserrat Vi?as. Millo hab¨ªa logrado por tercera vez en la democracia el esquivo esca?o por la provincia m¨¢s anti-PP de Espa?a. Un s¨ªmbolo m¨¢s de la arrolladora victoria de Rajoy. Sin embargo, su felicidad era agridulce. Algo le rondaba por la cabeza.

"No me lo pens¨¦ cuando el doctor dijo que ¨¦ramos compatibles"

El drama familiar fuerza al pol¨ªtico a renunciar al esca?o que gan¨® en Girona

La presencia de Vi?as, de 50 a?os y madre de tres hijos, sorprendi¨® a m¨¢s de uno en la sede de la calle del Migdia. Esta profesora de escuela p¨²blica en Banyoles (Pla de l'Estany) sufre desde hace a?os glomerulonefritis, una enfermedad renal cr¨®nica e irreversible que va degenerando el funcionamiento de los ri?ones. Aunque nunca ha dejado de trabajar, su vida p¨²blica ha disminuido considerablemente. En el ¨²ltimo a?o, su situaci¨®n hab¨ªa empeorado hasta el punto en que los m¨¦dicos de la unidad nefrol¨®gica del hospital Vall d'Hebron le explicaron que eventualmente necesitar¨ªa un trasplante. Millo recuerda el di¨¢logo con los doctores: "?Cu¨¢ndo?", pregunt¨®. "No se sabe", le respondieron. Era un anuncio sin d¨ªa ni hora, una espada de Damocles.

Mientras la profesora celebraba el triunfo con su esposo, al que conoci¨® la escuela secundaria de los Escolapios de Terrassa y con el que lleva 23 a?os de casada, sus dos ri?ones funcionaban al 20% de su capacidad. Cuando el nivel disminuye hasta el 17%, es necesaria la di¨¢lisis. Ah¨ª se entra en la penosa espera por un ¨®rgano, que en su mayor¨ªa provienen de las v¨ªctimas de accidentes de tr¨¢fico, y en la suerte de encontrar a alguien compatible sangu¨ªnea e inmunol¨®gicamente. La doctrina m¨¦dica establece que una persona debe conservar sus propios ¨®rganos hasta el l¨ªmite. En las postrimer¨ªas de la campa?a, Montse, como la llama Millo, comenz¨® a sufrir de anemia. Sus ri?ones estaban tan afectados que eran incapaces de producir los gl¨®bulos rojos. La espada cay¨® la semana despu¨¦s del triunfo.

Antes del verano pasado, cuando los m¨¦dicos hab¨ªan anunciado la posibilidad del trasplante, Millo y los hermanos de su esposa se sometieron a pruebas de compatibilidad para adelantarse a los hechos. Sorprendentemente, su ri?¨®n fue el m¨¢s apto. "Ella prefer¨ªa que fuera uno de sus hermanos, pero yo le dije que era un tema de pareja", afirma el tambi¨¦n portavoz del PP en el Parlamento catal¨¢n y hombre fuerte del partido que maneja los hilos del pacto no escrito con el Gobierno de Artur Mas. '?Por qu¨¦ tenemos que involucrarlos a ellos? Con mis dos ri?ones podemos vivir", explica Millo, recordando aquella conversaci¨®n con Montse.

Girona siempre hab¨ªa sido territorio comanche para los populares. El 70% de los habitantes de la provincia dice que "nunca" votar¨ªa al PP, un rechazo que solo superan Bizkaia y Gipuzkoa, seg¨²n Llu¨ªs Orriols, profesor de Ciencia Pol¨ªtica de la Universidad de Girona. Fuentes cercanas al PP explican que la decisi¨®n de poner a Millo como el cabeza de lista en las tierras gerundenses era una jugada que permit¨ªa asegurar el esca?o, aunque en el fondo le hac¨ªa ilusi¨®n ser diputado. Esto coronaba una carrera pol¨ªtica que tampoco ha estado exenta de pol¨¦mica. Se le relacion¨® con el caso Pallarols, de supuesta financiaci¨®n irregular de Uni¨® Democr¨¢tica de Catalunya, partido en el que antes milit¨® y abandon¨® por diferencias personales con Antoni Duran Lleida. En 2008, el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a le exculp¨®.

"No me siento un h¨¦roe: solo amo a mi esposa. Prefiero que estemos los dos justitos de salud a que uno est¨¦ bien y el otro mal", asegura Millo con positivismo.

Gracias a inyecciones de hierro y hormonas, Montse se mantiene estable, pero la intervenci¨®n es inminente. "Mis ri?ones est¨¢n fenomenal y listos", bromea el portavoz del PP, que siente la misma fe en Dios -es cat¨®lico practicante- y en la medicina. "No me lo pens¨¦ ni un minuto cuando el doctor me confirm¨® que ¨¦ramos compatibles. Creo que lo que yo hago por mi esposa lo har¨ªa cualquiera por su pareja", explica. "Cuando te adentras en el tema descubres que hay donantes an¨®nimos". Y acaba con un punto de pragmatismo: "Si tenemos dos ri?ones y podemos vivir con uno ser¨¢ por algo".