La construcci¨®n de la mirada
Ana Vall¨¦s y Ch¨¦vere cuestionan en sus ¨²ltimas obras de teatro los roles de g¨¦nero y la confusi¨®n medi¨¢tica
?Cu¨¢l es la posici¨®n que adopta el espectador? ?C¨®mo interpreta lo que ve, cargado de su cultura, de su identidad? El trabajo de Ana Vall¨¦s es, ya desde su trayectoria en la compa?¨ªa Matarile, espejo en el que el teatro puede mirarse. Tras Cerrado por aburrimiento, en 2010, la directora, autora y actriz anunci¨® una nueva etapa. Y en ello est¨¢. Primero cuestion¨® en M¨¦tanse nos seus asuntos el grado de implicaci¨®n o pasividad con el que reaccionamos ante un acto p¨²blico. En su nuevo espect¨¢culo, Usted est¨¢ aqu¨ª, va un poco m¨¢is all¨¢.
Usted est¨¢ aqu¨ª tom¨® como punto de partida la confusi¨®n entre informaci¨®n y comunicaci¨®n. "Hay una idea de veracidad impl¨ªcita en los datos que nos transmiten los medios que no es tal. Lo contrario de la informaci¨®n, as¨ª entendida, es la comunicaci¨®n que se produce en la vida cotidiana o en el arte, basada en aspectos intangibles. Es ese misterio que nos atrae", explica. La exposici¨®n de la privacidad y la evocaci¨®n de ideas a trav¨¦s de im¨¢genes cimentaban M¨¦tanse nos seus asuntos, montaje que contaba Nuria Sotelo como int¨¦rprete ¨²nica. En Usted est¨¢ aqu¨ª, son la misma bailarina y Natxo Montero quienes se desnudan ante el espectador.
'I'll be watching you' analiza el sexismo de las baladas rom¨¢nticas
"Bailar es el modo, para ella, de encontrar la vida m¨¢s soportable", afirma Montero en un momento de la obra. Luego asegura que "tener que mostrar lo que hago es una aberraci¨®n". "Sobre todo con lo que pagan", matiza Vall¨¦s. Ya Cerrado por aburrimiento -el ¨²ltimo montaje de Matarile- reflexionaba sobre la situaci¨®n del teatro. "No podemos obviar lo que nos pasa, lo que hacemos", indica Vall¨¦s. Por lo que Usted est¨¢ aqu¨ª muestra, "al lado de algunos datos que son mentira, muchas experiencias personales". ?Y qu¨¦ le queda al teatro cuando triunfan los reality shows? Es una pregunta que lanza Montero y que introduce la cuesti¨®n del teatro como propuesta comercial. "A veces parece que se intenta hacer la burrada m¨¢s grande para ser m¨¢s contempor¨¢neo", lamenta Vall¨¦s.
Aunque lo suyo no es "el convencionalismo del teatro realista", entendido como el que lo reduce todo a la l¨®gica narrativa. "Para m¨ª", se?ala, "es sobre todo comunicaci¨®n no verbal". Teatro y danza a la vez. S¨ª es cierto que, en cambio, la actuaci¨®n de sus int¨¦rpretes resulta muy real, nunca forzada. "Trabajo con improvisaciones, y lo que busco es la naturalidad de lo espont¨¢neo. Llevar eso a cada una de las funciones es mucho m¨¢s dif¨ªcil", destaca. Sobre el escenario se suceden, as¨ª, en Usted est¨¢ aqu¨ª, distintos momentos de un juego de ambig¨¹edades: lo p¨²blico y lo privado, el entendimiento y la violencia, lo masculino y lo femenino. "Van cambiando los roles. Porque nada es ¨²nico. En nuestra cultura occidental s¨®lo se ve el blanco o negro, pero no el claroscuro", subray¨®. Las pr¨®ximas funciones se celebrar¨¢n los d¨ªas 27, 28 y 29 de enero en La Fundici¨®n, (Bilbao), y el 10 y 11 de febrero en Santiago.
Con los roles de g¨¦nero tiene tambi¨¦n mucho que ver la obra que Ch¨¦vere mantiene estos d¨ªas en cartel: I'll be watching you. La compa?¨ªa sigue su camino tras dejar la sala Nasa. La conocida canci¨®n de Police da t¨ªtulo a una obra que contin¨²a la senda de Testosterona, la reflexi¨®n sobre las identidades de g¨¦nero a partir de la teor¨ªa queer. 'I,ll be watching you -pensada para un p¨²blico juvenil- adopta la forma de un concierto ac¨²stico en el que Yeni -Patricia de Lorenzo- y su guitarrista -Manuel Cebri¨¢n- muestran el sexismo de las baladas rom¨¢nticas en sus letras. La cosificaci¨®n de la mujer, los celos como supuesta prueba de amor, el sentimiento de propiedad sobre la pareja o la connivencia con la violencia de g¨¦nero desfilan ante el espectador a trav¨¦s de la historia que cuenta Yeni sobre su propia relaci¨®n y de las canciones: temas de Beyonc¨¦, Shakira, Andy y Lucas, Mal¨², Amaral o Heredeiros da Crus. Yeni interpela al p¨²blico para crear un debate, como hizo Ch¨¦vere en la tercera parte de Citizen.
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