La Oreja de Dionisio

Aunque Mario Gas, director del teatro Espa?ol de Madrid, ha recorrido medio mundo, Siracusa, en la isla italiana de Sicilia, es uno de sus lugares favoritos de retiro.

?Por qu¨¦ le fascina?

Sicilia me parece un lugar bell¨ªsimo: Palermo, Corleone, el barroco, y Agrigento, la ciudad de Pirandello... Pero cuando fui a Siracusa se me qued¨® grabada.

?Por qu¨¦ fue all¨ª?

Iba a realizar unas audiciones y pas¨¦ varias semanas. Me dejaron un piso en Isla Ortigia, un lugar ins¨®lito dentro de la ciudad: un estrecho pedazo de tierra rodeado de mar y con el imponente Castelo Maniace.

?Hizo pruebas en el famoso teatro griego?

Iba muchas tardes. Hay un festival de teatro cl¨¢sico anual y se siguen programando las obras al atardecer, como los antiguos griegos. Muy cerca est¨¢ la Oreja de Dionisio.

?Qu¨¦ es eso?

Una cueva de caliza, horadada, que recuerda a una oreja y que es una caja de resonancia perfecta. Seg¨²n cuenta la leyenda, el tirano Dionisio I de Siracusa encerraba en la gruta a los disidentes mientras ¨¦l se apostaba en las cercan¨ªas, escondido. Por lo que Dionisio pod¨ªa escuchar lo que dec¨ªan.

Ya le gustar¨ªa a la mafia.

"?All¨ª no hay mafia!". Eso es lo que dice la gente todo el tiempo, pero haberla, hayla. La ciudad ha cambiado mucho. En los setenta era un nido de marginaci¨®n sobre un poso de historia y magia; ahora se ha gentrificado un poco, pero mantiene su esencia.

No se perder¨ªa la tumba de Arqu¨ªmedes...

Siracusa es la ciudad en la que naci¨® y muri¨®. La necr¨®polis de Groticelli, donde supuestamente est¨¢ enterrado, impresiona. Al parecer es de origen romano, as¨ª que quiz¨¢ no est¨¦ all¨ª.

?A nivel gastron¨®mico, con qu¨¦ se queda?

Con el cioccolatini siciliano al peperoncino, pero la pasta, los helados y las pizzas son tambi¨¦n incre¨ªbles. Los sicilianos son los inventores de las esencias italianas y tienen un conflicto con el resto del pa¨ªs por esa autor¨ªa.

Parece que les conoce muy bien.He vuelto muchas veces. En el restaurante Il Blu, con una terracita preciosa, Stefano, el due?o, me mantiene al d¨ªa. Siracusa es uno de esos lugares en los que podr¨ªa vivir.