La mitad de los jubilados perder¨¢ poder adquisitivo por los impuestos
El alza fiscal se comer¨¢ la subida del 1% para m¨¢s de 100.000 beneficiarios
Buena parte de los pensionistas volver¨¢ a perder poder de compra en 2012 por segundo a?o consecutivo. El incumplimiento por parte del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, de su promesa electoral de no subir los impuestos conlleva tambi¨¦n, en la pr¨¢ctica, el incumplimiento de otra de sus promesas: mantener el poder adquisitivo de las pensiones. En torno a la mitad de los perceptores de pensiones de jubilaci¨®n no se ver¨¢n afectados por el recargo en el Impuesto sobre la Renta de las Personas F¨ªsicas (IRPF), pero la otra mitad ver¨¢ c¨®mo esa subida de impuestos se lleva una parte de la subida del 1% para compensar la inflaci¨®n prevista. Los m¨¢s perjudicados ser¨¢n los perceptores de pensiones m¨¢s altas, para los que el efecto de la subida de impuestos ser¨¢ superior al del incremento de la pensi¨®n, de modo que ver¨¢n incluso reducirse (muy ligeramente) la pensi¨®n neta.
Tres millones de pensionistas, afectados por la subida del IRPF
La subida de tasas afecta a las rentas de capital, la otra fuente de ingresos
La subida de las pensiones ser¨¢, con car¨¢cter general, del 1%, que es el nivel que se ha establecido como objetivo de inflaci¨®n para este a?o. Los pensionistas (salvo los perceptores de pensiones m¨ªnimas) no recuperan el poder adquisitivo perdido en 2011, el 2,9% de acuerdo con la subida de los precios de noviembre de 2010 a noviembre de 2011, lo que se debe a la congelaci¨®n decidida por el anterior Gobierno, presidido por Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Pero, adem¨¢s, en torno a la mitad de los pensionistas volver¨¢ a perder poder adquisitivo este a?o por la subida de impuestos.
El recargo del IRPF afecta, con car¨¢cter general, a pensionistas con una prestaci¨®n superior a los 700 euros mensuales (equivalentes a 9.800 euros anuales al contar las 14 pagas). Ese nivel puede aumentar algo en funci¨®n de las circunstancias personales del beneficiario de la pensi¨®n (si est¨¢ casado y presenta declaraci¨®n conjunta o si tiene hijos menores a su cargo, por ejemplo). Seg¨²n las ¨²ltimas estad¨ªsticas de la Seguridad Social, correspondientes a noviembre pasado, de las 5.281.894 pensiones de jubilaci¨®n, 2,72 millones ten¨ªan pensiones superiores a los 700 euros mensuales, incluidos 555.136 que se situaban entre los 700 y los 800 euros mensuales, la zona fronteriza. Aunque es imposible calcular la cifra exacta de los afectados por la subida del IRPF (en cuanto depende de las circunstancias familiares), s¨ª cabe estimar que son aproximadamente la mitad del total de los jubilados.
Para los otros 3,57 millones de perceptores de pensiones contributivas (incapacidad, viudedad, orfandad...), el porcentaje que tiene prestaciones de m¨¢s de 700 euros mensuales es menor (en torno a un 28%), de modo que los potenciales afectados por la subida de impuestos son en torno a un mill¨®n de pensionistas m¨¢s.
En todo caso, la p¨¦rdida de poder adquisitivo ser¨¢ muy escasa para la mayor¨ªa de los pensionistas afectados por la subida del IRPF. Esa p¨¦rdida solo superar¨¢ los 100 euros para cerca de un mill¨®n de pensionistas (la mayor¨ªa jubilados) con pagas de 1.500 euros mensuales (21.000 euros anuales), de modo que la subida del IRPF se comer¨¢ una parte del alza del 1% de la pensi¨®n. De todo ellos, los m¨¢s perjudicados ser¨¢n aquellos que perciben la pensi¨®n m¨¢xima (unos 2.500 euros mensuales). Para ellos, en los casos de declaraci¨®n individual sin hijos a cargo, el recargo del IRPF ser¨¢ ligeramente superior a la subida del 1%, de modo que pierden el poder adquisitivo derivado de la inflaci¨®n prevista y algo m¨¢s. Seg¨²n las estad¨ªsticas de la Seguridad Social, hay unos 150.000 perceptores de pensiones m¨¢ximas de todo tipo, aunque una parte de ellos pueden ver algo aliviado el impacto de la subida del IRPF en funci¨®n de sus circunstancias personales y no perder toda la subida de la pensi¨®n.
A la p¨¦rdida de poder adquisitivo de buena parte de las pensiones, se suma la derivada del aumento del IRPF para las rentas de capital, que es una fuente de ingresos para buena parte de los pensionistas por el ahorro acumulado.
Para los pensionistas, si las prestaciones se ajustan con arreglo al IPC, no es neutral que la subida de impuestos se instrumente a trav¨¦s del IRPF o de otro tributo. Un aumento del IRPF se traduce directamente en una p¨¦rdida de poder adquisitivo para los pensionistas (como para el resto de contribuyentes). Aparentemente, una subida del IVA o de los impuestos especiales podr¨ªa mermar de igual manera su capacidad de compra, pero, en realidad, el IVA solo se traslada a los contribuyentes en la medida en que se refleje en subidas de precios. Por ello, siempre que las pensiones se revisen de acuerdo con el IPC, los pensionistas recuperan la capacidad de compra perdida con la paga compensatoria y la actualizaci¨®n en funci¨®n de la desviaci¨®n de la inflaci¨®n. Lo que ocurri¨® en 2010 es que se congelaron las pensiones para la mayor¨ªa de los pensionistas y por eso el aumento de inflaci¨®n derivado de la subida del IVA de julio de dicho a?o s¨ª produjo una merma de poder adquisitivo para ellos.
En todo caso, la p¨¦rdida de poder adquisitivo derivada del primer plan de ajuste del nuevo Gobierno presidido por Rajoy es como m¨¢ximo del 1%, frente al 2,9% que perdieron la mayor¨ªa de las pensiones en 2010 con la congelaci¨®n decidida por el Ejecutivo de Zapatero.
Adem¨¢s, si el recargo del IRPF es, como se ha dicho, temporal, la p¨¦rdida de poder adquisitivo se limitar¨¢ a dos a?os y no quedar¨¢ consolidada, como ocurri¨® con la congelaci¨®n de las pensiones de 2010.
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