?Hay esperanza para el PSPV?

Se dir¨¢ que a la fuerza ahorcan, sin duda, pero el PSOE se apresta una vez m¨¢s a reinventarse, aunque lo haga con unos ritmos que tal vez desconcierten a los observadores. Claro que algunos de estos pasan sin transici¨®n de escandalizarse por la falta de debate, a calificar de "guerra fratricida" cualquier discusi¨®n de contenidos, por civilizada y rigurosa que esta sea. Cosas del d¨¦ficit de cultura democr¨¢tica que arrastramos, dir¨ªa yo.

Ninguna de las plataformas que hasta hoy concurren (la de Rubalcaba y la de Chac¨®n) anuncia una enmienda a la totalidad, y esto tiene su l¨®gica, una vez que se asume cierta corresponsabilidad de todo el partido en lo que hacen sus dirigentes; pero contienen ambas suficiente rectificaci¨®n para que el resultado final no se parezca a lo que hay. Por lo dem¨¢s, del lado de la renovaci¨®n org¨¢nica, la convergencia es cada vez m¨¢s evidente: la apertura, la transparencia y las primarias caen por su propio peso y las promueven desde ambos flancos.

En cambio, las cosas en el PSPV tienen rasgos particulares: una larga historia de crecientes derrotas y una intrahistoria de enquistamiento de los equilibrios internos en el aparato y decadencia organizativa, que se acentuaron desde el ¨²ltimo congreso.

Por eso la aparici¨®n de Esperanza Socialista promete un dinamismo inesperado. Se trata de un movimiento genuinamente valenciano y cuya gestaci¨®n no data de la ¨²ltima derrota electoral. Esperanza Socialista ya dio su batalla en las primarias de Valencia ciudad procurando a Manolo Mata, contra viento y marea, casi la mitad de los votos y un eco ciudadano hasta entonces desconocido. Enlaza con los movimientos de renovaci¨®n socialista que una y otra vez intentaron transformar a este partido. Viene, por tanto, de muy atr¨¢s y nace de los sectores m¨¢s cr¨ªticos y exigentes del PSPV. Cr¨ªticos con las inconsistencias y vaivenes del discurso socialista en el Pa¨ªs Valenciano, que desmovilizaron a nuestro electorado y nos incapacitaron como alternativa de gobierno. Exigentes con la transparencia y la democracia interna, cuya pr¨¢ctica desaparici¨®n ha acabado desalentando a la militancia.

La renovaci¨®n org¨¢nica que plantea Esperanza Socialista y que est¨¢ defendiendo Manolo Mata busca asegurar estatutariamente los espacios de democracia deliberativa en todos los ¨¢mbitos de decisi¨®n del partido. La implicaci¨®n de la ciudadan¨ªa y los/as simpatizantes en la selecci¨®n de los cargos, mediante primarias internas para los org¨¢nicos y abiertas a la ciudadan¨ªa, seg¨²n el modelo franc¨¦s, para los institucionales. La generalizaci¨®n de la cultura de rendici¨®n de cuentas de cargos internos y externos. En definitiva, la adaptaci¨®n de la organizaci¨®n a las demandas de transparencia de una ciudadan¨ªa que no se conforma con la fachada de los partidos, porque quiere ver lo que ocurre dentro de ellos.

Para ese modelo de partido no se puede preguntar a nadie de d¨®nde viene, sino a d¨®nde quiere llegar y qu¨¦ piensa hacer para ello. La tarea de reconstrucci¨®n que los socialistas tenemos por delante exige unidad, es cierto, pero tambi¨¦n decisi¨®n y rigor intelectual. Reconstruir las redes ciudadanas, las extensas complicidades sociales que permitieron a los gobiernos socialistas de la Generalitat levantar los cimientos de nuestro Estado del bienestar, requiere que los congresos que se avecinan elijan una direcci¨®n pol¨ªtica orientada a la militancia, definan una militancia orientada a la ciudadan¨ªa, y establezcan una organizaci¨®n en permanente debate de ideas. Una reconstrucci¨®n como aquella que ped¨ªa Vargas-Machuca como condici¨®n para recuperar el cr¨¦dito de la pol¨ªtica. Esa tendr¨ªa que ser la aportaci¨®n de este colectivo al congreso federal que marcar¨¢ el nuevo rumbo del socialismo en Espa?a.

Esperanza Socialista no es la plataforma de un l¨ªder en busca de seguidores, sino un movimiento enraizado en la mejor tradici¨®n del socialismo valenciano y Manolo Mata es un socialista comprometido con ese movimiento. Su trayectoria profesional y su militancia de 30 a?os demuestran que entre los referentes p¨²blicos del socialismo valenciano puede hallarse esperanza para el PSPV.

Pepe Reig es militante del PSPV.