_
_
_
_
Tribuna:El declive del Seiscientos | Las grandes crisis de la econom¨ªa espa?ola
Tribuna
Art¨ªculos estrictamente de opini¨®n que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opini¨®n han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opini¨®n de personas ajenas a la Redacci¨®n de EL PA?S llevar¨¢n, tras la ¨²ltima l¨ªnea, un pie de autor ¡ªpor conocido que ¨¦ste sea¡ª donde se indique el cargo, t¨ªtulo, militancia pol¨ªtica (en su caso) u ocupaci¨®n principal, o la que est¨¦ o estuvo relacionada con el tema abordado

El largo siglo XVII

Las posibilidades de que Espa?a, en la Edad Moderna, se situase en el grupo de cabeza del desarrollo econ¨®mico europeo eran escasas. En un mundo donde el sector agrario aportaba el grueso del PIB, carec¨ªa por razones medioambientales (clima, orograf¨ªa, calidad del suelo, v¨ªas mar¨ªtimas y fluviales) de recursos ¨®ptimos para ello. Pero las restricciones naturales no explican que el pa¨ªs, como sucedi¨®, estuviese lejos de aprovechar entre 1450 y 1800 el potencial de crecimiento que aquellas permit¨ªan. Dos circunstancias hist¨®ricas tienen, al respecto, gran relevancia: una, los desajustes que se operaron, principalmente, entre las econom¨ªas del interior peninsular y del litoral mediterr¨¢neo durante largos periodos de los siglos modernos; dos, la duraci¨®n e intensidad de la recesi¨®n que devast¨® las regiones del interior, las m¨¢s pobladas y urbanizadas a finales del siglo XVI, entre 1580 y 1650, y la extrema lentitud de la recuperaci¨®n posterior, que solo culmin¨® avanzado el siglo XVIII.

Se pas¨® de 37 a 22 ciudades. El interior tard¨® 170 a?os en recuperarse
La manipulaci¨®n de la moneda de vell¨®n para lograr recursos elev¨® la desconfianza
La deuda, que lleg¨® al 60% del PIB con Felipe II, creci¨® hasta la Paz de los Pirineos
Los Austrias se apoyaron en nobles y oligarcas, relegando al mundo urbano
M¨¢s informaci¨®n
Lecciones de la recesi¨®n

Ambas apuntan a un largo siglo XVII, durante el cual la econom¨ªa espa?ola se alej¨® del n¨²cleo de Europa occidental. Hacia 1700, el escu¨¢lido aumento del tama?o demogr¨¢fico y productivo de Espa?a hab¨ªa defraudado las perspectivas existentes en 1500 para una renovada colonizaci¨®n agraria de su superficie, tan vasta como poco poblada. Pese a sus dispares dotaciones de recursos, los resultados eran otros en los cuatro territorios que, junto al peninsular, registraban (exceptuada Escandinavia) las menores densidades demogr¨¢ficas del occidente europeo a comienzos del siglo XVI, Inglaterra y Escocia, Irlanda, Suiza y Portugal: de 1500 a 1700 estos pasaron, en promedio, de 12 a 25 habitantes por kil¨®metro cuadrado; Espa?a, de 11 a 15. Y al inicio del siglo XVIII, adem¨¢s, la posesi¨®n de inmensas colonias en Am¨¦rica no pod¨ªa compensar la desventaja que implicaba esa baja densidad demogr¨¢fica (y econ¨®mica). Ingleses, franceses y holandeses hab¨ªan ido obstruyendo, durante el siglo XVII, el acceso a las producciones y los mercados americanos, al comp¨¢s de la decadencia pol¨ªtica y militar de la Monarqu¨ªa hisp¨¢nica.

La primera mitad del siglo XVII fue una ¨¦poca de dificultades en Europa pero, desde 1650, superado el peor periodo, coincidente con la Guerra de los Treinta A?os, la recuperaci¨®n se extendi¨® y se consolid¨®. Arraig¨® entonces un proceso de concentraci¨®n de la actividad econ¨®mica y la urbanizaci¨®n en las zonas costeras. Este, impulsado por el progreso de la construcci¨®n naval, el desarrollo manufacturero y mercantil noroccidental y el incremento del comercio atl¨¢ntico, convirti¨® a los litorales en los espacios m¨¢s din¨¢micos de la econom¨ªa europea.

En Espa?a, la intensidad de la recesi¨®n fue mayor en la primera mitad del siglo XVII y la recuperaci¨®n posterior, con notables contrastes regionales, m¨¢s tard¨ªa y dificultosa, lo que le impidi¨® estar en primera l¨ªnea del avance del componente mar¨ªtimo de la econom¨ªa occidental.

Las cifras de bautismos (ver gr¨¢fico 1) revelan que la poblaci¨®n se redujo en todos los espacios peninsulares en alg¨²n momento del siglo XVII, pero con grandes diferencias. En el norte (Galicia, Asturias, Cantabria, Pa¨ªs Vasco y Navarra), aunque la ca¨ªda fue significativa de 1610 a 1630, el nivel inicial se recobr¨® pronto y el aumento posterior supuso un crecimiento del 25% sobre aquel hacia 1700. En el ¨¢rea mediterr¨¢nea (Catalu?a, Valencia y Murcia), un descenso algo m¨¢s suave y una recuperaci¨®n m¨¢s vigorosa propiciaron, en 1700-1709, un ¨ªndice un 26% mayor que el de base.

Andaluc¨ªa occidental arroja un primer contraste: tras siete decenios de estancamiento m¨¢s que de declive demogr¨¢fico, la posterior recuperaci¨®n ampli¨® el nivel de base un 18% hacia 1700, pero solo un 15% respecto de 1580-1589. Es el interior peninsular (Castilla y Le¨®n, La Rioja, Arag¨®n, Madrid, Castilla-La Mancha y Extremadura) el que muestra diferencias m¨¢s rotundas: una contracci¨®n demogr¨¢fica m¨¢s temprana, duradera e intensa, seguida de una recuperaci¨®n mucho m¨¢s lenta; el ¨ªndice 100 no se recobr¨® hasta 1720-1729, y los niveles m¨¢ximos de 1580-1589 solo se rebasaron 170 a?os despu¨¦s, en 1750-1759.

La difusi¨®n del ma¨ªz en las regiones cant¨¢bricas y la de diversos cultivos comerciales en las del Levante ayudan a explicar que ambos litorales viesen crecer sus poblaciones desde 1660-1670, alza que se aceler¨® en las zonas mediterr¨¢neas tras la Guerra de Sucesi¨®n. Pero tales progresos tardar¨ªan mucho tiempo en compensar el desplome econ¨®mico y humano del interior. La revoluci¨®n agron¨®mica que conoci¨® el litoral septentrional no se tradujo, durante d¨¦cadas, en un vigoroso proceso de urbanizaci¨®n y diversificaci¨®n de actividades productivas.

En cuanto al litoral mediterr¨¢neo, el desencuentro era m¨¢s antiguo. Entre 1480 y 1580, el periodo de auge de la corona castellana, Catalu?a registr¨® una tard¨ªa salida de la crisis bajomedieval y una modesta recuperaci¨®n poblacional (en 1591, ten¨ªa 11 habitantes por kil¨®metro cuadrado, la densidad demogr¨¢fica del conjunto de Espa?a en 1500), el Reino de Murcia sigui¨® estando muy poco poblado, y el de Valencia, aunque creci¨® m¨¢s en el siglo XVI, afront¨® en 1609 la sangr¨ªa demogr¨¢fica de la expulsi¨®n de los moriscos, el 27% de su poblaci¨®n.

Este desencuentro, durante el siglo XVI, seguramente supuso la p¨¦rdida de notables sinergias entre el interior castellano y las ¨¢reas levantinas. En la primera mitad del XVII, el desplome de aquel y el escaso vigor de estas contribuyeron a un sensible retroceso demogr¨¢fico en el momento de arranque de la econom¨ªa mar¨ªtima europea. Despu¨¦s de 1650, cuando el litoral mediterr¨¢neo pas¨® a ser el espacio peninsular con mayor potencial de crecimiento, las regiones del interior siguieron sumidas en una recuperaci¨®n desesperantemente lenta. Y el modo pausado con que el propio Levante fue ganando peso espec¨ªfico, al menos hasta 1720, hizo que los efectos de arrastre en el conjunto de la econom¨ªa espa?ola tardaran en adquirir fortaleza.

Las sinergias perdidas por tales desajustes en el largo plazo constituyeron un relevante factor adverso para el crecimiento econ¨®mico de la Espa?a moderna. Entrado el siglo XVIII, estas disparidades acabaron propiciando un vuelco trascendental en la distribuci¨®n de la poblaci¨®n y de la actividad econ¨®mica, a favor de las ¨¢reas costeras y en contra del interior, vigente desde entonces.

La trayectoria productiva de la Corona de Castilla, salvo en su franja h¨²meda del norte, fue muy negativa entre 1580 y 1700. Los diezmos de los arzobispados de Toledo y Sevilla (ver gr¨¢fico 2), que abarcaban la mayor¨ªa de la Submeseta Sur y de la Andaluc¨ªa B¨¦tica, quiz¨¢ las regiones m¨¢s castigadas, revelan una intensa contracci¨®n del producto cerealista entre 1580 y 1610, la reanudaci¨®n de la ca¨ªda en la d¨¦cada de 1630, su culminaci¨®n en la de 1680 y una escu¨¢lida recuperaci¨®n, al final, que permiti¨® alcanzar, en 1690-1699, los ¨ªndices de 1600-1609, un 31% inferiores a los m¨¢ximos de 1570-1579.

El producto agr¨ªcola no cerealista (vino y aceite, b¨¢sicamente) registr¨® un descenso a¨²n m¨¢s abrupto, sobre todo entre los decenios de 1620 y 1680, situ¨¢ndose en el de 1690 un 45% por debajo del de 1570. En cuanto a la evoluci¨®n del producto no agrario, la aguda crisis urbana que sufri¨® la corona sugiere un desplome de las manufacturas y del comercio. Entre 1591 y 1700, la tasa de urbanizaci¨®n se contrajo una cuarta parte, y las ciudades castellanas con 10.000 o m¨¢s habitantes pasaron de 31 a 18 (de 37 a 22 en el conjunto de Espa?a). Adem¨¢s, el peso relativo de los activos agrarios aument¨® mucho en las urbes de ambas Castillas, Andaluc¨ªa y Extremadura, lo que implica que la contracci¨®n de las actividades econ¨®micas t¨ªpicas de las ciudades fue mayor que el propio descenso de la poblaci¨®n urbana.

Las da?inas consecuencias de la costos¨ªsima y prolongada pol¨ªtica imperial de la Monarqu¨ªa constituyen, seguramente, el factor que m¨¢s contribuy¨® al desplome econ¨®mico castellano del largo siglo XVII. Aquellas fueron ubicuas, econ¨®micas, pol¨ªticas y sociales, y actuaron tanto a corto como a largo plazo. Para mantener la hegemon¨ªa pol¨ªtica y militar en Europa, y defender el patrimonio din¨¢stico, los Austrias acrecentaron sus bases fiscales, elevando tributos y creando otros nuevos, a fin de ampliar su capacidad de endeudamiento. Por ese camino, Felipe II hab¨ªa acumulado deudas equivalentes, a finales del siglo XVI, al 60% del PIB espa?ol, porcentaje que debi¨® de crecer sensiblemente, al descender este y agrandarse aquellas, al menos hasta la Paz de los Pirineos de 1659.

La Corona de Castilla soport¨® el grueso de una escalada fiscal que, iniciada en el ¨²ltimo cuarto del siglo XVI, cuando la econom¨ªa castellana traspon¨ªa su c¨¦nit, alcanz¨® el suyo en 1630-1660, coincidiendo con el fondo de la depresi¨®n. Su primer crescendo, en la d¨¦cada de 1570, perturb¨® el comercio, aument¨® la fragilidad de muchas econom¨ªas campesinas, acosadas por el alza de la renta de la tierra, y empobreci¨® a las clases urbanas, cuyas subsistencias ya ven¨ªan encareci¨¦ndose. Imperturbables, la nobleza y el clero, total o parcialmente exentos de cargas fiscales y part¨ªcipes en las rentas reales, siguieron ingresando hasta fin de siglo abultadas rentas territoriales y diezmos, y vendiendo sus frutos a precios crecientes, con lo que se acentu¨® un intenso proceso de redistribuci¨®n del ingreso en contra de la mayor¨ªa de los castellanos. Cuando las cosechas cayeron abruptamente en las d¨¦cadas de 1580 y 1590, descenso propiciado por un cambio clim¨¢tico desfavorable que se sinti¨® en toda Europa, las v¨ªas hacia la recesi¨®n y la contracci¨®n demogr¨¢fica quedaron expeditas.

Desde 1600, los perniciosos efectos de la pol¨ªtica imperial se multiplicaron por varios caminos.

- La escalada fiscal dependi¨® de impuestos que gravaban el tr¨¢fico comercial y el consumo, recaudados por las autoridades municipales (en 1577, aportaron la mitad de los ingresos tributarios de la Monarqu¨ªa; en 1666, el 72%). En n¨²cleos peque?os, el recurso a repartimientos, seg¨²n el n¨²mero de yuntas o el volumen comercializado por vecino, perjudic¨® singularmente a los labradores que pose¨ªan las explotaciones m¨¢s productivas y orientadas al mercado. En ciudades y villas, donde las cargas tributarias tendieron a concentrarse, la proliferaci¨®n de exacciones sobre el consumo, especialmente de vino, aceite y carnes, deprimieron la demanda de tales art¨ªculos, ya menguante por el descenso demogr¨¢fico y la concentraci¨®n en el pan del gasto en alimentos efectuado por unos consumidores con menos medios. Ello, como muestra el gr¨¢fico 2, potenci¨® orientaciones productivas contrarias a las actividades agr¨ªcolas y ganaderas m¨¢s productivas, rentables y mercantilizadas, favoreciendo el cultivo de cereales, que gan¨® peso relativo, y el autoconsumo. Las manufacturas urbanas, por su parte, con su demanda deprimida por el desplome de las ciudades y el empobrecimiento de sus habitantes, afrontaron, al encarecerse numerosos productos b¨¢sicos, la consiguiente tendencia al alza de los salarios.

- La Monarqu¨ªa presion¨® a las haciendas municipales imponiendo donativos y servicios extraordinarios con creciente frecuencia, y la compra, obligada para evitar que cayesen en otras manos, de jurisdicciones y bald¨ªos enajenados del patrimonio real. Aquellas se endeudaron y promovieron dos arbitrios muy da?inos: el despliegue de una fiscalidad propia, a?adida a la regia mediante recargos locales de los tributos que gravaban el consumo, y el arriendo o venta de notables porciones de tierras municipales, hasta entonces de aprovechamiento comunal. Lo uno aviv¨® la escalada fiscal y lo otro, al encarecer el sostenimiento del capital animal de las explotaciones agrarias, entorpeci¨® a¨²n m¨¢s su desenvolvimiento. Estas, pese al fuerte descenso de la renta de la tierra desde 1595 o 1600, no salieron de su postraci¨®n. Ello evidencia el radical empobrecimiento de muchos campesinos, y sugiere que, si la ca¨ªda de las rentas territoriales (exigidas en trigo y cebada), pese a su magnitud, guard¨® proporci¨®n con la del producto cerealista, estas conservaron parte de su potencial para bloquear la recuperaci¨®n del cultivo durante mucho tiempo.

- La almoneda del patrimonio regio y la presi¨®n sobre las haciendas locales tuvieron otra vertiente: lograr la colaboraci¨®n de la nobleza y, m¨¢s a¨²n, de las oligarqu¨ªas municipales para movilizar el descomunal volumen de recursos requerido por la pol¨ªtica imperial. A nobles e hidalgos, la Monarqu¨ªa les pag¨® desprendi¨¦ndose de rentas, vasallos, jurisdicciones y cargos, lo que reforz¨® el poder se?orial. A las oligarqu¨ªas locales, consintiendo que aumentasen su poder pol¨ªtico, su autonom¨ªa en asuntos fiscales y su control sobre los terrenos concejiles; as¨ª, sus miembros lograron que sus patrimonios eludiesen la escalada fiscal e, incluso, consiguieron ampliarlos con comunales privatizados.

- A cambio del apoyo de las ¨¦lites, los Austrias renunciaron a ampliar su autoridad, y ello tuvo dos efectos adicionales de capital importancia.

De un lado, una fiscalidad m¨¢s heterog¨¦nea y una soberan¨ªa m¨¢s fragmentada, con m¨¢s agentes con prerrogativas para intervenir en los mercados y los tr¨¢ficos, incrementaron los costes del comercio y bloquearon la integraci¨®n de los mercados en el ¨¢mbito de la corona. En este sentido, el en¨¦simo arbitrio de los Austrias para allegar recursos, la manipulaci¨®n de la moneda de vell¨®n, que perdi¨® toda la plata que conten¨ªa y fue sometida a bruscas alteraciones de su valor nominal, generando correlativas oscilaciones de los precios, hizo m¨¢s incierto el comercio y hundi¨® la confianza en el signo monetario.

De otro, el progresivo control de la nobleza y las oligarqu¨ªas locales sobre las tierras concejiles, la mayor reserva de pastos y suelos cultivables, aumentaron su inter¨¦s por el ganado lanar, especialmente desde 1640, cuando volvieron a crecer los precios de las lanas exportadas. Grupos poderosos con intereses distintos (fuese participar en el negocio ganadero o restaurar los niveles de las rentas territoriales) hallaron entonces un objetivo com¨²n: obstaculizar el acceso de los campesinos y sus arados a dicha reserva de labrant¨ªos. Ya entrado el siglo XVIII, cuando la poblaci¨®n castellana se fue acercando a los m¨¢ximos de 1580, este frente antirroturador constituy¨® un freno de primer orden a la expansi¨®n del cultivo.

En suma, las m¨²ltiples y destructivas secuelas de la pol¨ªtica exterior de los Austrias que las regiones castellanas padecieron entre 1570 y 1660, ahondaron y prolongaron la depresi¨®n, primero, y obstaculizaron despu¨¦s, durante d¨¦cadas, la recuperaci¨®n. Esa pol¨ªtica origin¨® una formidable succi¨®n de recursos que da?¨® principalmente a los labradores acomodados, los artesanos y los comerciantes, a las actividades productivas m¨¢s mercantilizadas y al mundo urbano, reorientando a la econom¨ªa castellana por un rumbo poco propicio para el crecimiento econ¨®mico. Hacia 1700, apenas se atisbaban signos de recuperaci¨®n en los campos y ciudades del interior, los m¨¢s esperanzadores se hab¨ªan desplazado hacia el Norte y el Mediterr¨¢neo, y el grupo de cabeza de la econom¨ªa europea estaba un poco m¨¢s lejos.

Este apretado recorrido por la Espa?a del siglo XVII ofrece dos lecciones de actualidad. Una, que no hemos aprendido, subraya la conveniencia de mantener separados megaloman¨ªa y gasto p¨²blico. La otra, que quiz¨¢ a¨²n podamos atender, concierne al reparto social del coste de las crisis econ¨®micas. La negativa de los m¨¢s ricos y poderosos a soportar una parte proporcional a sus recursos, no solo atenta contra la justicia (o el bien com¨²n, en t¨¦rminos del siglo XVII); tambi¨¦n deprime la econom¨ªa. El incremento de la desigualdad, en solitario, no estimula el crecimiento; ¨²nicamente generaliza la pobreza. Y ambos juntos pueden alargar una recesi¨®n y bloquear por largo tiempo la recuperaci¨®n posterior.

Jos¨¦ Antonio Sebasti¨¢n Amarilla es profesor titular de Historia Econ¨®mica de la Universidad Complutense de Madrid

<i>La rendici¨®n de Breda</i>, de Vel¨¢zquez, reproduce un episodio clave en la larga guerra para impedir   la independencia de los Pa¨ªses Bajos
La rendici¨®n de Breda, de Vel¨¢zquez, reproduce un episodio clave en la larga guerra para impedir la independencia de los Pa¨ªses Bajos

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo

?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?

Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.

?Por qu¨¦ est¨¢s viendo esto?

Flecha

Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.

En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PA?S
Recomendaciones EL PA?S
Recomendaciones EL PA?S
_
_
seductrice.net
universo-virtual.com
buytrendz.net
thisforall.net
benchpressgains.com
qthzb.com
mindhunter9.com
dwjqp1.com
secure-signup.net
ahaayy.com
tressesindia.com
puresybian.com
krpano-chs.com
cre8workshop.com
hdkino.org
peixun021.com
qz786.com
utahperformingartscenter.org
worldqrmconference.com
shangyuwh.com
eejssdfsdfdfjsd.com
playminecraftfreeonline.com
trekvietnamtour.com
your-business-articles.com
essaywritingservice10.com
hindusamaaj.com
joggingvideo.com
wandercoups.com
wormblaster.net
tongchengchuyange0004.com
internetknowing.com
breachurch.com
peachesnginburlesque.com
dataarchitectoo.com
clientfunnelformula.com
30pps.com
cherylroll.com
ks2252.com
prowp.net
webmanicura.com
sofietsshotel.com
facetorch.com
nylawyerreview.com
apapromotions.com
shareparelli.com
goeaglepointe.com
thegreenmanpubphuket.com
karotorossian.com
publicsensor.com
taiwandefence.com
epcsur.com
southstills.com
tvtv98.com
thewellington-hotel.com
bccaipiao.com
colectoresindustrialesgs.com
shenanddcg.com
capriartfilmfestival.com
replicabreitlingsale.com
thaiamarinnewtoncorner.com
gkmcww.com
mbnkbj.com
andrewbrennandesign.com
cod54.com
luobinzhang.com
faithfirst.net
zjyc28.com
tongchengjinyeyouyue0004.com
nhuan6.com
kftz5k.com
oldgardensflowers.com
lightupthefloor.com
bahamamamas-stjohns.com
ly2818.com
905onthebay.com
fonemenu.com
notanothermovie.com
ukrainehighclassescort.com
meincmagazine.com
av-5858.com
yallerdawg.com
donkeythemovie.com
corporatehospitalitygroup.com
boboyy88.com
miteinander-lernen.com
dannayconsulting.com
officialtomsshoesoutletstore.com
forsale-amoxil-amoxicillin.net
generictadalafil-canada.net
guitarlessonseastlondon.com
lesliesrestaurants.com
mattyno9.com
nri-homeloans.com
rtgvisas-qatar.com
salbutamolventolinonline.net
sportsinjuries.info
wedsna.com
rgkntk.com
bkkmarketplace.com
zxqcwx.com
breakupprogram.com
boxcardc.com
unblockyoutubeindonesia.com
fabulousbookmark.com
beat-the.com
guatemala-sailfishing-vacations-charters.com
magie-marketing.com
kingstonliteracy.com
guitaraffinity.com
eurelookinggoodapparel.com
howtolosecheekfat.net
marioncma.org
oliviadavismusic.com
shantelcampbellrealestate.com
shopleborn13.com
topindiafree.com
v-visitors.net
djjky.com
053hh.com
originbluei.com
baucishotel.com
33kkn.com
intrinsiqresearch.com
mariaescort-kiev.com
mymaguk.com
sponsored4u.com
crimsonclass.com
bataillenavale.com
searchtile.com
ze-stribrnych-struh.com
zenithalhype.com
modalpkv.com
bouisset-lafforgue.com
useupload.com
37r.net
autoankauf-muenster.com
bantinbongda.net
bilgius.com
brabustermagazine.com
indigrow.org
miicrosofts.net
mysmiletravel.com
selinasims.com
spellcubesapp.com
usa-faction.com
hypoallergenicdogsnames.com
dailyupdatez.com
foodphotographyreviews.com
cricutcom-setup.com
chprowebdesign.com
katyrealty-kanepa.com
tasramar.com
bilgipinari.org
four-am.com
indiarepublicday.com
inquick-enbooks.com
iracmpi.com
kakaschoenen.com
lsm99flash.com
nana1255.com
ngen-niagara.com
technwzs.com
virtualonlinecasino1345.com
wallpapertop.net
casino-natali.com
iprofit-internet.com
denochemexicana.com
eventhalfkg.com
medcon-taiwan.com
life-himawari.com
myriamshomes.com
nightmarevue.com
healthandfitnesslives.com
androidnews-jp.com
allstarsru.com
bestofthebuckeyestate.com
bestofthefirststate.com
bestwireless7.com
britsmile.com
declarationintermittent.com
findhereall.com
jingyou888.com
lsm99deal.com
lsm99galaxy.com
moozatech.com
nuagh.com
patliyo.com
philomenamagikz.net
rckouba.net
saturnunipessoallda.com
tallahasseefrolics.com
thematurehardcore.net
totalenvironment-inthatquietearth.com
velislavakaymakanova.com
vermontenergetic.com
kakakpintar.com
begorgeouslady.com
1800birks4u.com
2wheelstogo.com
6strip4you.com
bigdata-world.net
emailandco.net
gacapal.com
jharpost.com
krishnaastro.com
lsm99credit.com
mascalzonicampani.com
sitemapxml.org
thecityslums.net
topagh.com
flairnetwebdesign.com
rajasthancarservices.com
bangkaeair.com
beneventocoupon.com
noternet.org
oqtive.com
smilebrightrx.com
decollage-etiquette.com
1millionbestdownloads.com
7658.info
bidbass.com
devlopworldtech.com
digitalmarketingrajkot.com
fluginfo.net
naqlafshk.com
passion-decouverte.com
playsirius.com
spacceleratorintl.com
stikyballs.com
top10way.com
yokidsyogurt.com
zszyhl.com
16firthcrescent.com
abogadolaboralistamd.com
apk2wap.com
aromacremeria.com
banparacard.com
bosmanraws.com
businessproviderblog.com
caltonosa.com
calvaryrevivalchurch.org
chastenedsoulwithabrokenheart.com
cheminotsgardcevennes.com
cooksspot.com
cqxzpt.com
deesywig.com
deltacartoonmaps.com
despixelsetdeshommes.com
duocoracaobrasileiro.com
fareshopbd.com
goodpainspills.com
hemendekor.com
kobisitecdn.com
makaigoods.com
mgs1454.com
piccadillyresidences.com
radiolaondafresca.com
rubendorf.com
searchengineimprov.com
sellmyhrvahome.com
shugahouseessentials.com
sonihullquad.com
subtractkilos.com
valeriekelmansky.com
vipasdigitalmarketing.com
voolivrerj.com
zeelonggroup.com
1015southrockhill.com
10x10b.com
111-online-casinos.com
191cb.com
3665arpentunitd.com
aitesonics.com
bag-shokunin.com
brightotech.com
communication-digitale-services.com
covoakland.org
dariaprimapack.com
freefortniteaccountss.com
gatebizglobal.com
global1entertainmentnews.com
greatytene.com
hiroshiwakita.com
iktodaypk.com
jahatsakong.com
meadowbrookgolfgroup.com
newsbharati.net
platinumstudiosdesign.com
slotxogamesplay.com
strikestaruk.com
trucosdefortnite.com
ufabetrune.com
weddedtowhitmore.com
12940brycecanyonunitb.com
1311dietrichoaks.com
2monarchtraceunit303.com
601legendhill.com
850elaine.com
adieusolasomade.com
andora-ke.com
bestslotxogames.com
cannagomcallen.com
endlesslyhot.com
iestpjva.com
ouqprint.com
pwmaplefest.com
qtylmr.com
rb88betting.com
buscadogues.com
1007macfm.com
born-wild.com
growthinvests.com
promocode-casino.com
proyectogalgoargentina.com
wbthompson-art.com
whitemountainwheels.com
7thavehvl.com
developmethis.com
funkydogbowties.com
travelodgegrandjunction.com
gao-town.com
globalmarketsuite.com
blogshippo.com
hdbka.com
proboards67.com
outletonline-michaelkors.com
kalkis-research.com
thuthuatit.net
buckcash.com
hollistercanada.com
docterror.com
asadart.com
vmayke.org
erwincomputers.com
dirimart.org
okkii.com
loteriasdecehegin.com
mountanalog.com
healingtaobritain.com
ttxmonitor.com
nwordpress.com
11bolabonanza.com